Concedido por el Rey tras convertir a la Reina Sofía en Camarera de Honor
Antes de irse de vacaciones de verano la Hermandad del Rosario recibía una noticia largamente esperada y que, sin duda, será protagonista de las Fiestas Patronales de este mes de octubre. Y es que la Casa Real había concedido el título de "Real" para la Hermandad torrejonera. Así, y en pleno día del Corpus Christi, la Hermandad se convertía en "Real e Ilustre Hermandad de Nuestra Señora Virgen del Rosario Coronada" tras conseguir un título solicitado después de convertir a la reina Emérita en Camarera de Honor, y convirtiéndose en la segunda Hermandad torrejonera en lograrlo, tras la del Rocío.
El título de «Real» es uno de los máximos honores que puede recibir una corporación religiosa en España. Este reconocimiento no solo es un símbolo de prestigio, sino que también refleja la importancia de la hermandad en la comunidad y su compromiso con valores tradicionales. A lo largo de la historia, este tipo de distinciones ha sido otorgado a diversas entidades, incluyendo clubes deportivos y asociaciones benéficas, que han demostrado un impacto positivo en la sociedad.
La obtención de este título no es un proceso sencillo. La hermandad tuvo que presentar una solicitud formal a la Casa Real, que evalúa cada candidatura con gran cuidado. La perseverancia de varias Juntas Directivas fue fundamental para cumplir con los requisitos necesarios, que incluyen tener una antigüedad mínima de 25 años y una notable implantación social. Un paso crucial en este proceso fue el nombramiento de la Reina Emérita Doña Sofía como Camarera Honorífica de la Hermandad, lo que ayudó a fortalecer la conexión con la Casa Real.
La entrega simbólica del título tuvo lugar en una fecha de gran relevancia para la comunidad cristiana: el día del Corpus Christi. Esta jornada es considerada una de las más solemnes en el calendario litúrgico, lo que añade un componente espiritual y emotivo al evento. Durante la celebración, la hermandad recibió la credencial oficial, fechada el 12 de junio de 2025, marcando así un momento memorable en su historia.
La Hermandad de la Virgen del Rosario Coronada ha expresado su gratitud por este reconocimiento, destacando que es el resultado del esfuerzo colectivo y la dedicación de sus miembros a lo largo de los años. Este honor no solo valida su trabajo, sino que también refuerza su compromiso con la comunidad y su labor devocional.
Aunque el título de «Real» no implica cambios jurídicos en la gestión de la hermandad, sí establece un vínculo simbólico de gran prestigio con la monarquía española. Este reconocimiento es una muestra de aprecio y distinción que resalta la trayectoria y la relevancia histórica de la hermandad en su entorno.
El título ha sido otorgado a diversas entidades en distintos ámbitos, lo que demuestra su versatilidad y el valor que la Casa Real otorga a las organizaciones que contribuyen a la sociedad. Este reconocimiento no solo se limita a hermandades y cofradías, sino que también abarca clubes deportivos e instituciones culturales que se destacan por su compromiso y aportaciones a la comunidad.
Junto al título de la Hermandad del Rosario, el Rey Felipe VI concedió los primeros títulos nobiliarios de su reinado, marcando un hito en su décimo primer año en el trono. Este acto ha sido informado oficialmente por la Casa de Zarzuela, destacando la importancia de los galardonados en diversas áreas de la sociedad española.
El Rey ha otorgado títulos nobiliarios a varias personalidades destacadas, cada una reconocida por sus contribuciones excepcionales en sus respectivos campos:
Rafa Nadal: Designado como Marqués de Llevan de Mallorca, el tenista es un ícono del deporte español y mundial, conocido por su impresionante trayectoria en el tenis.
Teresa Perales: La nadadora paralímpica ha sido nombrada Marquesa de Perales. Su carrera está llena de logros que la han convertido en una referente en el deporte adaptado.
Luz Casal: La famosa cantante ha recibido el título de Marquesa de Luz y Paz, reconociendo su impacto en la música y la cultura española.
Carlos López Otín: El bioquímico y biólogo molecular ha sido nombrado Marqués de Castillo de Lerés, con un título de carácter vitalicio, destacando su contribución al ámbito científico.
Cristina García Rodero: La fotógrafa ha sido designada Marquesa del Valle de Alcudia, siendo reconocida por su trabajo en el arte y la fotografía.
Jaime Alfonsín: El ex jefe de la Casa del Rey ha sido distinguido con el título de Marqués de Alfonsín, que incluye el carácter de grande de España, también hereditario.
La Casa del Rey ha enfatizado que todos los galardonados son considerados “exponentes de la excelencia” en sus respectivas trayectorias, ya sea en servicio a la Corona o en los ámbitos del pensamiento, la cultura, la ciencia, las artes y el deporte. Se señala que estas personalidades son una fuente de orgullo para España y representan valores que deben inspirar a la sociedad.
El discurso de proclamación del Rey, realizado el 19 de junio de 2014, ha sido mencionado como un reflejo de los principios de servicio, compromiso y deber que Felipe VI desea imprimir en su reinado.
La concesión de títulos nobiliarios es una prerrogativa del Rey, quien tiene la autoridad para otorgar honores y distinciones conforme a las leyes establecidas en el artículo 62, apartado f, de la Constitución de 1978. Este proceso se formaliza a través de una real carta y se hace efectivo con la publicación del real decreto de concesión en el Boletín Oficial del Estado (BOE), donde se detallan los términos y condiciones de cada título.
Los títulos nobiliarios otorgados son, en su mayoría, hereditarios, lo que significa que se transmiten al primogénito del titular. Sin embargo, existen condiciones que pueden hacer que un título revierta a la Corona si no se ejercen las acciones necesarias para su adquisición o transmisión durante un periodo determinado. Además, es importante destacar que estos derechos honoríficos no son comerciables, lo que asegura su carácter exclusivo y simbólico. |