El Guachibuelo en descapotable, un cuervo ecologista y una aurora boreal en el Teatro Griego, momentos de la fiesta

Durante este fin de semana la actividad festiva de Torrejón se ha centrado en Parque Europa, y no es para menos, pues el recinto cumplía el pasado 4 de septiembre catorce años de vida, y la localidad lo celebraba por todo lo alto. Así, tras las inauguraciones de las exposiciones de Veranearte y Tutankamón, llegaban los actos centrales, 72 horas de actividades que llenaron el parque de vecinos y visitantes.

En concreto, la fiesta comenzaba en la tarde del viernes con un concierto de música ochentera que terminaba con la primera función del fin de semana de la fuente cibernética, también dedicada a los años ochenta. O más bien la jornada terminaba para los visitantes, pues tras el cierre del parque, los fotógrafos se hacían protagonistas, celebrando el II Maratón Fotográfico de AFOTAR que entregaría sus premios al día siguiente.

Y es que los actos centrales se concentraron en la tarde del sábado. Así, y tras una mañana en que el parque acogió un espectáculo de guiñol, la tarde comenzaba como manda la tradición, es decir, con el corte de la tarta del decimocuarto aniversario del parque por parte del alcalde y los niños que guardaban cola para recibir un trozo del pastel.

Y tras el acto protocolario comenzaba la fiesta: ensayos en el Teatro Griego, carrozas en la Puerta de Alcalá y un photocall preparado para recibir a Los Guachis en la Puerta de Brandenburgo anunciaban que algo iba a pasar en esa tarde. Y así fue: a las siete la furgoneta de Fauna Aventura llegaba hasta un Teatro Griego completamente abarrotado a pesar del intenso calor para celebrar su tradicional exhibición de animales salvajes, y entre ellos, además de una impresionante boa constrictor o un halcón, presentaban un curioso cuervo que recogía la basura y la tiraba al contenedor.

A las ocho la actividad se trasladaba hasta la Puerta de Alcalá, desde donde partía el tradicional desfile de Los Guachis una propuesta que, en tan sólo tres ediciones ya se ha convertido en cita ineludible, y que en esta ocasión llegaba acompañada de las Mamis Kanguro, protagonistas del pasacalles. Pero los focos se los llevó otro elemento del desfile, pues, además del tradicional tren y el barco de los duendes navideños, el desfile lo abría el mismísimo Guachibuelo a bordo de un descapotable.

Y es que Torrejón ha decidido adelantarse a Vigo y hasta a Venezuela, pues Los Guachis que tomaron el Teatro Griego tras terminar su desfile, no dudaron en recordar que la Navidad estaba a la vuelta de la esquina. Tras la actuación de los duendes llegaba el fin de fiesta. Torrejón proyectaba la segunda fuente cibernética del fin de semana, y lo hacía con una sorpresa que no dejó indiferente a nadie. Y es que, en un momento del espectáculo, los rayos de luz inundaron no solo el lago sino también el Teatro Griego haciendo lucir una especie de aurora boreal sobre las cabezas de los que se encontraban allí.

Para explicar el efecto hay que recurrir a algo que ocurrió de forma muy sutil durante la actuación de Los Guachis, pues el teatro se fue llenando paulatinamente de vapor de agua para ofrecer una fuente cibernética mucho más interactiva, además de, por cierto, bajar unos cuantos grados la temperatura. Y este espectáculo terminaba a lo grande, pues, y al ritmo de la música, los fuegos artificiales acompañaron el cierre, poniendo el broche de oro a la segunda jornada de celebración.

Pero la cosa no acabó ahí, pues al día siguiente partidas de ajedrez en la Puerta de Brandenburgo precedían al cierre de la fiesta. Justo antes de comenzar a atardecer, la Agrupación Lírica subía a las tablas del Teatro Griego para ofrecer un recital "non stop" con algunas piezas de zarzuela en las que estuvieron acompañados por el Ballet de Carmen de Córdoba. Así durante casi una hora los líricos repasaron las piezas más conocidas del género chico ante un público entregado. El aniversario terminaba con la última fuente cibernética del fin de semana, un espectáculo ""Happyness" que mantuvo llenas las gradas del Teatro y las praderas junto al lago, y que terminaba con un fuerte aplauso para cerrar la celebración del 14 aniversario del parque.