Un vehículo se encarga de detectar los conatos

Rivamadrid activó el pasado 17 de junio el Servicio de Primera Intervención (SPI), una medida que se pone en marcha cada verano, desde 2009, para hacer frente a las incidencias relacionadas con las altas temperaturas en el entorno natural de la ciudad. Su actividad de vigilancia y prevención de incendios forestales finaliza el próximo 29 de septiembre, cuando da comienzo la temporada de otoño e invierno y el servicio se adapte a la próxima climatología estacional.

Este será el segundo año en uso del nuevo vehículo que sustituyó al anterior en el verano de 2023: más polivalente, ligero y adaptado al terreno forestal. El servicio se presta en horario de lunes a viernes, de 15.00 a 02.00, y los fines de semana a tiempo completo, desde las 7.00 del sábado hasta las 7.00 del lunes.

La campaña de verano 2023 fue valorada por la empresa municipal Rivamadrid como “relativamente tranquila”, y se cerró el pasado 1 de octubre con 267 actuaciones. Todo, pese a las temperaturas extremas alcanzadas en julio y agosto, coincidiendo con una sequedad preocupante por la falta de precipitaciones” durante los meses estivales.

“A pesar de esas condiciones, podemos estar satisfechos por no haber sufrido ningún incidente preocupante que hubiese podido poner en riesgo nuestro patrimonio forestal”, señalaron desde Rivamadrid.

Hallazgo de vidrios, restos de ‘botellones’ o conatos de incendios son algunos de los motivos de actuación del SPI, con el que se puede contactar a través de Policía Local, en el 91 666 16 16 o en el 112.