La torrejonera es indultada por la productora y la cadena y recuperará su silla tras la baja de audiencia

Es lo que tiene el cambiar valores como de camisa, al principio se pusieron chulos y hasta dignos expulsando a la torrejonera por una conducta agresiva pero viendo que la audiencia se ha resentido desde su ausencia han decidido darle una oportunidad. Como ya os avisé Telecinco se esmeraba en crear el campo de cultivo ideal para su vuelta y así no dudaba en presentarla como una pobre desgraciada que necesita la pasta que gana en el programa para mantener su casa.

Y al final se han adelantado los tiempos y vistiendo la polémica de dramatismo y teatro (como nos tienen acostumbrados), Paz leyó la decisión de la dirección donde sorprendentemente Rosa era readmitida dejando la dignidad de la cadena de Mediaset por los suelos.

La readmisión de Rosa no solo es una bajada de pantalones ante la torrejonera sino que también es un desafío al Gobierno y sus leyes del horario protegido. Sálvame ya ha recibido avisos de Industria para que moderen contenidos y es en parte a estos avisos que se decidió apartarla durante unos meses hasta agosto. Rosa por fin podrá seguir comprando en las tiendas de chinos de la ciudad y calentando una silla. Y solo calentándola ya que no sabe lo que es dar una información (que no sea de su familia directa). Las malas lenguas opinan que la readmisión de Rosa obedece a un intento de tener entrada de primera fila sobre el asunto que enfrenta a Ortega Cano, con su hermano, su sobrino y su hijo. Ya de hecho, Kiko Hernandez está empezando a dar minutos al tema hasta que el lunes Rosa de la versión en el programa.

Por otra parte, las reacciónes han sido tan diversas como falsas e interesadas. Belén recibió la noticia bailando un poco de reguetton, Mila ni se inmutó y Kiko fingía que no le hacía gracia. Todos en su papel no se salieron del guión especialmente Paz que sigue demostrando que haciendo teatro no le gana nadie. Aunque la sorpresa estuvo a punto de venirse abajo cuando la interesada afirmaba a las preguntas como si ya se supiera el resultado. "Cuando vaya os voy a llevar un abanico a cada uno" decía sin supuestamente saber si volvía a Madrid.

Tras una agresión en directo, ¿es positivo que se premie con una posible más que suculenta mejora de contrato?. Yo creo que no