La Fábrica no huye de las polémicas exteriores al concurso y las utiliza en la Gala

Antes de comenzar este post tengo que dar la enhorabuena a La Fábrica de la Tele por demostrar que se puede aprender, en tan sólo dos días, a hacer un buen reallity. Si la presentación del martes fue lenta, aburrida, sosa y con múltiples fallos, la primera Gala ha conseguido solventar gran parte de esos problemas. Y es que los concursantes han ayudado mucho: en tan sólo 48 horas han pasado bastantes más cosas que en todo Gran Hermano 14, y eso permite hacer una gala con ritmo, divertida y que no aburra al espectador. Otra cosa es sí eso es suficiente para convencer a una audiencia que no acabó de conectar con el programa el pasado martes.

Y es que uno de los aciertos de la productora es que, a diferencia de otras, no huye de las polémicas externas, si no que las utiliza para rellenar minutos de una Gala de más de cuatro horas: el comunicado de los scouts del que os hablaba ayer, o la polémica carta-testamento de Lucía Extebarría se convirtieron en argumentos de debate en el plató del programa.

En cuanto al comunicado de la Federación de Escultismo de España, el programa decidía cambiar el nombre de sus concursantes, para convertirlos en “exploradores” (curiosamente, la traducción española del término scout), después de pedir perdón a los que pudieran sentirse ofendidos por el uso; mientras que de la carta de Lucía se leyeron algunos párrafos (los más polémicos), para, a continuación, darle caña.

El programa comenzaba con un resumen de todo lo ocurrido en las primeras 48 horas, perfecto cebo para todo lo que iba a dar de sí la noche, para pasar a presentar a los defensores: la familia de Nagore y la propia concursante de Gran Hermano, por Lucía y Jeyko; Rosa, por Montalvo; Álvaro Colina por Pedre; y Desi, por Modesto (lo que viene siendo una defensa a ultranza).

Tras una ronda de alegatos, a eso de las diez y media, Kiko Hernández se encargaba de dar el nombre de la primera expulsada del Campamento: Carmen Bazán, que, tres horas después, entraba en el plató para enfrentarse a una sorprendente polémica: “los miembros del jurado hemos recibido presiones de la familia Janeiro para expulsar a Carmen”, afirmaba Kiko Hernández a gritos.

Las razones, bastante lógicas: Carmen Bazán entró en el Campamento como parte de su contrato con Sálvame, y, por tanto, no tiene un caché establecido como el del resto de sus compañeros, cuando su participación en un reallity tendría muchos ceros.

Al margen de los Janeiro, gran parte de la Gala se centró en una serie de episodios vividos durante los dos primeros días de juego: Lucía Etxebarría huyendo despavorida de su tipi al intuir que Pedre estaba jugando un solitario; Pedre, hospitalizado por una otitis aguda; El sargento Alonso como objeto de deseo de Gaby, Olvido y Jeyko; Gaby, con un mono totalmente imposible a 24 horas de entrar en el juego; Lucía, convertida en la “pupas”, tras caerse por un terraplén y herirse la pierna; Karmele agrediendo a un cámara que la quería grabar cambiándose de ropa; Olvido, pillada fumando a escondidas; y Mónica Pont atacando a Sonia Ferrer. Episodios todos ellos que nos hicieron recuperar el espíritu de uno de los programas más polémicos de la historia de Telecinco, pero también uno de los más queridos y recordados: “Hotel Glam”. Por buscar similitudes, aquel programa que ya es historia de la televisión, también comenzó con juegos manuales no aclarados, ni entonces, ni después.

Entre los grandes momentos de la noche, destacar el ataque furibundo de Gaby contra Kiko Hernández, que, por supuesto no se calló; la petición de dimisión de Karmele como responsable de su tipi, y sobre todo, la respuesta de Joaquín Prat: “debe pensarse que está en el Congreso, aunque allí no dimite nadie”, seguido de un gran aplauso del público; y el momento mechero al más puro estilo Supervivientes (¿habrá entrado el arma del delito de la misma forma que en el concurso de supervivencia?). Por cierto, genial Modesto cargando con toda la culpa aunque no fume, mientras Desi se moría de la risa en plató.

Con el programa totalmente fuera de sí tras la acusación de Olvido, el programa tiró de demagogia para defender su posición, afirmando que está prohibido el tabaco para evitar incendios, pero los concursantes en bloque desmontaron el chiringuito a la productora: “aquí fuma todo el mundo, incluidos cámaras y gente de producción”. Intentando tapar la evidencia, el programa decidía castigar a Olvido, Gaby, Modesto, Montalvo y Karmele durmiendo a la intemperie.

Sin embargo, los concursantes no aceptaron de buen grado el castigo: Karmele se enfrentó, cuando pensaba que no grababan las cámaras, con Olvido; y Modesto se rebeló contra la productora negándose a acatar la sanción. Ante la negativa, y después de una serie de broncas, al padre de Desi se le dieron tres opciones si no quería dormir al raso, y una de ellas desveló uno de los secretos mejor guardados del programa: Modesto no está cobrando por participar en el concurso o, al menos, no sabe cuanto. El programa intentó echar tierra sobre el asunto (segunda pillada en poco más de media hora), amenazando con expulsarle del concurso. Al final Modesto aceptó dormir con sus compañeros, aunque dejando a los pies de los caballos al programa y la productora. Por cierto, no fue la única productora que quedó al descubierto: Desi desvelaba que el anterior reallity en que participó les metía tabaco fuera del presupuesto.

Un intento de acercamiento entre Rosa y Montalvo, y una bronca a distancia entre Jacobo Ostos y Nagore preparaban el terreno para el gran enfrentamiento de la noche: Mónica Pont contra Sonia Ferrer.. O mas bien, el que debería haber sido el gran enfrentamiento, ya que la Ferrer no quiso entrar al trapo y se limitó a intentar limar asperezas con la Pont cuando pensaba que no había cámaras grabando.

La noche terminaba con unas nominaciones sorprendentes, en que los concursantes se lanzaron dardos unos contra otros, y esta vez no de forma figurada, y en la que salieron nominados Karmele, Jeyko, Pedre y Gaby, aunque no sin polémicas: Karmele se autonominaba al fallar su lanzamiento, mientras que el Tribunal nominaba a Gaby al fallar tres lanzamientos. Con poco tiempo (por algo es la productora de Sálvame), el programa elegía a sus nominados y se despedía dejando cosas en el aire, como la sanción a Karmele por agredir a un cámara (lo único que vimos fue echar la cámara hacia atrás con un palo), o la decisión sobre Gaby, que dará que hablar en las próximas horas.

Como decía al principio, no tengo ni idea de cómo puede responder la audiencia a este programa, aunque es evidente que Telecinco ya confía en levantar sus noches de verano, cediéndoles la noche de los martes para arropar a Frágiles (en esa gala express se salvará uno de los tres nominados, el que decida el público a través de las votaciones en la web oficial), si bien el comportamiento en share social es bastante significativo: a pesar de no pasar en ningún momento de la noche de los doscientos comentarios por minuto, casi siempre estuvo entorno al 80% de share social, muy por delante de todos sus competidores. Eso sí, la noche no era propicia para hacer predicciones, ya que el público tuitero se encontraba pendiente de la “barbacoa de chorizos” en que se convirtió el centro de Madrid durante la tarde-noche.

Nominaciones

Monica Pont Karmele Jeyko

Esteban Olvido Jeyko

Modesto Gaby Gaby

Lucía Etxebarría Karmele Karmele

Pedre Gaby Gaby

Jacobo Pedre Pedre

Karmele Olvido Karmele

Montalvo Pedre Pedre

Gaby Pedre Gaby

Olvido Pedre Pedre

Jeyko  Pedre Pedre