El programa raciona el alcohol después de lo ocurrido hace una semana

Parece que por fin Gran Hermano ha entendido las advertencias, en forma de indirectas, lanzadas desde el Gobierno en los últimos días, y por eso la fiesta rockera de anoche fue casi sin alcohol: (entraron tres botellas para toda la casa). La consecuencia, imaginada por todos: la fiesta no dio el juego esperado, y el programa tendrá que tirar de inventiva para llenar de contenido una gala en la que ya no estará Miriam (y las tramas interesantes no las contarán), y de la que saldrán los Gemelos Montoya.

No obstante, y aunque no de la forma esperada, la fiesta sí dio de sí: Igor se lesionó por un mal paso de baile, Adrián defendió a Argi del ataque furibundo de Desi, y Kristian se atrevió a enfrentarse a su Sonia a costa de la actitud con el Susargismo. Enseguida cuento todo esto, pero antes, vamos a la noche anterior.

Una noche en que los concursantes, agotados por la prueba y el hambre, se fueron a dormir prontito, aunque no todos: Anabel y Desi, esta vez sin jacuzzi de por medio, hablaron largo y tendido de todos sus compañeros de encierro, y no precisamente bien. Desi, por supuesto, volvió a arremeter con fuerza contra Argi, de la que lo más bonito que dice es que es una “rata”, mientras Anabel se centraba en su “relación” con Igor. Sin compañeros molestos de por medio, las dos intrusas no tuvieron problema en hablar de lo que habían visto desde fuera sobre los concursantes, ofreciendo una visión bastante más cercana a lo que realmente piensan que a lo que quieren hacer creer a sus compañeros. Ambas tienen muy claro que la única persona que tienen como favorita es Raki (¿ se está fraguando una nueva alianza?).

Sin embargo, desde fuera las candidatas a la victoria son, sin duda, el dúo Susargista. Susana y Argi recibían ayer una dosis extra de energía al escuchar los tradicionales megáfonos. Pero vamos por partes, porque esta vez los gritos no fueron anónimos. Un club de fans del Susargismo decidió hacer una visita a la casa de Guadalix, y fueron relatando, a través de Twitter, sus acercamientos a la casa de cristal, incluso colgando fotos. Una vez a las puertas del jardín no dudaron en mandar un par de recados a los concursantes, para después retornar a Madrid.

La acción del comando provocó la reacción del Wallismo (nótese que, tras el distanciamiento entre los Pelochos las carpeteras de la pareja están casi desaparecidas, mientras que la facción wallista sigue con mucha fuerza, al menos a través de las redes sociales), que pidió, y consiguió que Twitter suspendiese la cuenta (también dejaron un comentario de pésimo gusto sobre Susana y Argi que fue retuiteado por la mismísima madre de Sonia), aunque el bloqueo duró poco.

El mensaje lanzado a la casa no pudo ser más claro y contundente: “Susargi ganadoras”, “Sonia falsa”, y fue escuchado por Igor y Susana, aunque rápidamente se enteró toda la casa, si bien con una versión adulterada: Susana contó a su otra mitad lo de Susargi ganadoras, haciendo que la vasca se pusiera muy contenta, mientras que Igor contó a Kristian lo de Sonia falsa, y el Pelocho se encargó de que se enterase la interfecta.

Poco después de enterarse, Sonia vio contentas a las Susargistas, y pensó que era por el comentario que le había llegado a ella, con lo que la canaria volvió a entrar en el bucle de la triple nominación, los cariños que no llegan, etc, etc. En concreto se lo contaba a los nuevos para intentar ganárselos de cara a la próxima nominación. Sin embargo, el mensaje tuvo un efecto totalmente inesperado en Kris. En lugar de acercarse a su chica para consolarla, lo que hizo fue, con alguna copa de más, recriminarle el haber nominado al Susargismo, ante lo que Sonia no tuvo más remedio que callarse (si parecía que el Pelocho intentaba alejarse de la canaria tras lo que que pasó el pasado martes, ahora tiene la excusa perfecta para buscar nuevas alianzas, tal vez, en la Saray recién llegada). En cualquier caso, Kristian ya preparaba el terreno unas horas antes, cuando Sonia le preguntaba cómo estaría su relación dentro de un año, a lo que el madrileño contestaba: “espérate a que salgamos”.

Sin embargo, no fue la única visita inesperada que recibieron los concursantes en sábado. Por la mañana un helicóptero sobrevolaba la casa a poca altura (no lo se seguro, pero posiblemente estén preparando algo para la próxima Gala, que Frank Blanco afirmó “sería de altura”), ante lo que los concursantes no dudaron en saludar.

Con Sonia rallada y el Susargismo eufórico, llegamos a la fiesta, una fiesta rockera en la que sonaron grandes éxitos del rock and roll como “No digas nada por favor”, “Gangman Style”, y mucho reggaeton (¿Dónde está Iván cuando se le necesita?). La fiesta, al más puro estilo Greasse, comenzaba con palomitas y coca cola (que acaba de iniciar una campaña con Telecinco, por lo que los concursantes se van a hartar de refresco), aunque sin nada más para cenar, y terminaba con unos batidos de chocolate (la crisis está llegando a límites insospechados en Guadalix).

Con la entrada del alcohol, bastante menos del habitual (Desi bromeaba, o eso espero, con beberse la colonia), comenzaba la fiesta propiamente dicha, una fiesta que estuvo a punto de acabar por culpa de un mal paso. Igor estaba bailando cuando dio una patada poco estilosa y acabó con la pierna en cuarentena. Rápidamente el programa llamó al médico que visitó al vasco en el confesionario, y le recomendó reposo. Como última hora os cuento que esta mañana el chico se ha levantado con la pierna muy inflamada. Lo curioso es cómo ocurrió la lesión. Igor estaba bailando el Ave María de David Bisbal cuando hizo su conocida patada, con efectos poco deseables (Me muero por ver los comentarios de Miriam cuando vea el vídeo del vasco imitando a Bisbal, ya que ella es fan hasta límites insospechados del coach de La Voz, hasta el punto de llegar a arrancarle los rizos. ¡Que se prepare Igor cuando salga!).

La lesión de Igor a punto estuvo de cancelar la fiesta, pero el chico pidió que continuase porque no era para tanto (por algo es vasco). Con los concursantes de nuevo cantando y bailando el juego continuó entre bailes y algún streptease, para terminar, como siempre, dentro del jacuzzi.

Mucho más interesante, como siempre, fue la post fiesta. Adrián y Desi tuvieron una intensa conversación en que la de Sevilla volvió a arremeter con mucha dureza contra Argi, ante lo que el también sevillano salió en defensa de la vasca: “no le llames perra. Es muy feo. Valora a quién te critica a la cara, y no a los que lo hacen por la espalda”, le recomendaba el chico.

Y así las cosas, todo apunta a que el Sonia falsa puede revolucionar las nominaciones de esta noche, que, parecía, iban a ser cosa de los nuevos. Ahora es muy probable que los tres nombres en salir a la palestra sean los de Argi, Susana y Sonia, por lo que ya se inventará el programa algo para evitarlo. Mañana lo veremos...