Sonia desvela públicamente el misterio de los gemelos

Los Idus de marzo siguen generando estragos en Guadalix. Los mensajes del exterior que llegaron a los concursantes han provocado una serie de acontecimientos que, sumados al alcohol de la fiesta, ponen en peligro el record (la expulsión va a ser difícil, pero no imposible) de Iván.

Vamos por partes: anoche dejamos a los concursantes en una post fiesta en la que ya había pasado de todo: preguntas indiscretas de Raki a Juan Carlos, confesión de tocamientos entre Igor y Miriam, críticas de Susana a Sonia, y una gran pelea entre Argi y Gonzalo (por cierto, la que provocó la discusión no fue otra que Noe, que no dudó en contar al andaluz que la vasca pensaba nominarle), pero la noche fue mucho más larga.

Durante la fiesta Igor y Miriam siguieron con su tonteo habitual, aunque tal vez subiendo unos cuantos grados el juego, pero, tras apagarse la música, el vasco no dudó en consolar a Argi. La superviviente del Costa Concordia, muerta de celos, se llevó a Igor a la cama, y, esta vez sí, hubo mucho más que palabras. De momento solo hemos visto un avance, pero todo apunta a que ambos calentaron mucho el ambiente en la casa, y, sobre todo, el de una gala que, esta vez sí, no debería tener problemas para subir algo sus audiencias. Y es que, si al guión ya conocido (expulsión, nominaciones exprés, resolución de la trama gemelos, entrada de nuevos concursantes, reencuentro Kristian-Sonia, decisión sobre la continuidad de Edo, decisión sobre Dani, y entrevista muy potente con Iván contra Leti y Lorena) le sumamos lo acontecido anoche deja una gala de lo más completa.

Miriam explicaba este presunto edredoning aludiendo a los mensajes de la fiesta. La chica piensa que, si su Mike no ha enviado mensaje es porque ya no está fuera, y eso la permite dar rienda suelta a la pasión. El problema está en que Mike sí sigue fuera, y fue la decisión del programa la que provocó que el mensaje fuera el que fue. Los concursantes (sin duda por la situación de verse encerrados en lo que Max Weber llamaba una institución total, ni siquiera se plantean que el elemento del que depende su supervivencia esté jugando con ellos como si de cobayas se tratase) han entendido que el único contacto con el exterior que tienen son esos mensaje, al igual que los que les llegan por megáfonos, y con ellos, y solo con ellos, tienen que convivir.

Miriam, después de llorar por su chico, decidía pasar al despecho, y terminaba la jornada entre las sábanas de Igor, para intentar explicarlo al día siguiente con algo que ya anunció nada más entrar en la casa: “Esto tiene que pasar por algo. No me encierro en una persona. Si mi Mike no quiere estar conmigo… lo que está pasando está pasando”. Sin embargo, la de Alicante no es la única a la que los mensajes están cambiando: Noe, la princesa de Gijón, también se siente despechada al no haber recibido mensaje de Jairo. La chica considera que fuera solo tiene a su padre y su yegua.

Pero la mañana comenzaba con una nueva faceta de Iván: después de que contase que  era sonámbulo, y de descubrir sus múltiples personalidades, ayer nos despertaba con una última  sorpresa: el chico habla en sueños, en concreto, en pesadillas, y, por cierto, con quien soñaba era con Igor. Juan Carlos, por su parte, comenzaba el día muy pegadito a Raki, con la que compartió cama la noche anterior.

Los concursantes comenzaban ya a tomar posiciones de cara a las nominaciones, de tal forma que Gonzalo amenazaba con nominar a Argi si no cambia de actitud. El chico lo explicaba de una forma muy romántica, la quiere fuera para que no se le pueda relacionar con ella, y sentirse libre para liarse con otra chica que entre.

Sonia confesaba que sigue en su mar de dudas particular, sin saber aún si prefiere a su ex (que, por cierto, según la chica es director de una revista), o a Kristian, e Iván comienza a mover ficha de cara a las próximas nominaciones en el caso de que se quede: su nueva víctima será Susana, a la que montó un pollo por spoilear el final de una película.

El humorista, como es habitual todos los domingos, comenzó su campaña para evitar la nominación de sus compañeros, y en este caso, el objeto de su ira fue Igor, al que sigue reprochando haberle nominado el pasado lunes. Sin embargo, esta vez la situación fue diferente: Susana, Raki, Miriam, Igor y Sonia han descubierto que la razón de las críticas es únicamente la cercanía de las nominaciones, por lo que parece que esta  vez no surtirá el efecto deseado (tampoco podrá hacerlo, porque, salvo que el público decida castigar a Miriam, Iván tiene pie y medio  fuera de la casa. Es curioso: uno de los dos concursantes de Alicante va a salir justo al filo de la hora de la cremá de las Fallas de Valencia, la fiesta más importante de la Comunidad, que se celebra cada día de San José).

Decía que es casi segura la expulsión de Iván, pero el affaire de Miriam puede darle la vuelta a las encuestas, ya que el número de votos que se están recibiendo en esta edición es totalmente ínfimo, y suele concentrarse en las galas. Tanto es así que los propios concursantes reconocían no haber votado nunca para expulsar en Gran Hermano.

Más cosas: las extrañas coincidencias continúan proliferando por Guadalix. En esta ocasión eran Sonia y Edo los que descubrían que tienen una amiga en común, una estudiante de fisioterapia que vive en Las Palmas. Por otra parte, Noe es una bruja. No, no es que me esté metiendo con ella, sino que la princesita, además de tener una varita mágica que funciona de verdad (o eso dice ella), también tiene sueños premonitorios sobre quien abandona la casa. La chica asegura que todavía no ha fallado ninguna expulsión, pero se niega a soltar prenda de lo que ocurrirá esta noche.

Además, la  tecnología ha llegado a Guadalix. Los chicos han recibido la visita de la nueva aplicación para móvil que se convertirá en poco tiempo en la alternativa gratuita a WhatsApp (hay que tener muy poca visión comercial para, en un mercado tan saturado como el de las aplicaciones informáticas, convertirse en la primera compañía en cobrar por sus servicios, máxime cuando, hasta ahora, era la aplicación líder del mercado), Line. Los concursantes descubrieron la aplicación y jugaron con los personajes de personalización, con la intención de ganar un sorprendente privilegio: enviar un mensaje al exterior (por suerte para el resto de concursantes, Kristian no entró en el juego).

Y terminamos con dos asuntos que traerán cola: los concursantes no han superado la prueba semanal, por lo que esta semana no tendrán comida (al parecer el culpable ha sido Igor, que ha errado el número de bolas de colores en quinientas sesenta unidades, según afirmaban los encerrados en la casa pequeña, que fueron los encargados de hacer el recuento final. El error de Igor puede provocar, con mucha facilidad, que el vasco vuelva a estar en la palestra, y, después de lo ocurrido con Miriam, con muchas papeletas para salir de la casa, en un enfrentamiento con Dani y, posiblemente, Argi); y Sonia ha hecho público, aunque de aquella manera, lo que todos saben pero ninguno se atreve a decir. Ayer por la tarde la doctora Walls preguntaba a Gonzalo: “¿por qué no meten a tu hermano y jugáis los dos juntitos?”, dejando al gemelo al borde del infarto.