Empieza a fraguarse un cuarteto amoroso

“Love is in the air”… y no es para menos. Ayer el mundo entero celebraba ese monumento al consumo llamado San Valentín, y la Casa de cristal no iba a ser menos. No me estoy refiriendo, que también, a lo que les preparó Gran Hermano para celebrar la efeméride: un bizcocho, sino al extraño juego de miradas, roces y jugueteos que se traen entre sí cuatro concursantes. El problema está en que, como en la vida misma, no son relaciones de dos.

La mañana comenzaba con dos concursantes mucho más pegados de lo que exigía la prueba semanal: Kristian, el pelocho entrenador de futbol, abrazaba, dormido, a una Giuls nominada desde la noche anterior. Y es que la pequeña Giuls intuye que va primera en las votaciones y ya se prepara auto convenciéndose de lo bueno que es irse la primera: “las primeras expulsadas siempre tienen más platós, como Aída”, afirmaba la mallorquina. No obstante, no va a tirar la toalla tan fácil, e intenta dar juego acercándose a quien, intuye, es favorito.

Kristian, que, como casi todos los hombres, no se entera de nada, prefirió juguetear con Sonia, la dentista canaria, que se dejaba querer mientras el pelocho le hacía un masaje con una sola mano (no seáis mal pensados, la otra la tenía dentro del guante corazón de la prueba semanal). Al ver lo acaramelados que se encontraban los dos, la luchadora mallorquina se puso en medio cortando un poco una situación que puede estallar esta misma noche, con la primera fiesta de la edición.

Eso sí, no está nada claro en qué dirección estallará, ya que Kristian, Giuls y Sonia no son los únicos a los que Cupido ha lanzado sus flechas traicioneras. Juan Carlos, el otro futbolista, también confesaba a sus compañeros de habitación que le gustaba una chica, y todo apunta a que no es otra que Sonia.

Así las cosas, parece que la Gala del lunes se presenta interesante, y más le vale a Telecinco. La Gala 1, como ellos mismos la llamaron, no consiguió llegar al 20% de share, a pesar de empezar, oficialmente, a las once menos cuarto, y terminar a las dos menos cuarto. En periodo de máxima audiencia, siempre estuvo en torno al 16%, encendiendo todas las alarmas en Telecinco, que confiaba en remontar lo perdido el lunes con una gala mucho más ágil de lo habitual en una segunda noche.

Y es que el público no acaba de engancharse a esta edición. La pésima forma de programar de Telecinco, sumado al nulo interés que despierta en el resto de programas de la cadena, está provocando datos paupérrimos tanto en resúmenes como en conexiones en directo. Sin embargo, Telecinco prefiere vender que el programa triunfa en Internet, exactamente igual que OT 8.

Por todo ello, la Gala del lunes, que tampoco lo va a tener fácil enfrentándose a una Gala especial de Tu cara me suena, y al estreno de Torrente 4, tirará la casa por la ventana: el cuarteto amoroso, con todo lo que ocurra el fin de semana, la entrada de un nuevo concursante, que podría ser la mismísima Bodromira, la primera expulsión, y una conexión con Álvaro, el pollito volador, deberían ser armas suficientes para decidir si esta edición sobrevivirá hasta junio o habrá que recortarla.

Pero, como decía al principio, el amor está en el aire de la sierra madrileña, o, más bien, el amor pasado. Raky confesaba a Iván que tenían una conocida en común, una ex novia del Antonio Recio de Guadalix con la que, al parecer, las cosas terminaron muy mal. Iván no quiso hablar del tema, y pedía que no dieran pábulo a este tipo de testimonios (tranquilo, Iván, que con el interés que está despertando la edición, salvo el propio programa, nadie la buscará).

Y para terminar, el enorme fichaje que se incorporaba a la casa el pasado miércoles. Miriam, en 24 horas, ha demostrado por qué siempre estuvo en las quinielas, a pesar de ser el perfil que se filtró, con nombres y apellidos a través de Forocoches. Y es que la mallorquina que sobrevivió al Costa Concordia es una caja de sorpresas: ayer contaba a sus nuevos compañeros alguna de sus andanzas persiguiendo personajes famosos, ya que la chica es una fan, fan, fan de poster, como diría Ángel Llacer en cierto programa que también está muy presente en la casa (ya le han preguntado a Miriam quien ganó, aunque la del crucero no ha podido contestar, so pena de ser expulsada).

Volviendo a Miriam, relataba a sus compañeros un “incidente” vivido con David Bisbal hace unos años. Según explicaba la concursante, persiguió al cantante hasta lanzarse sobre él y arrancarle algunos rizos, por lo que se la llevó la Policía. Por suerte para el coach de La Voz, a Miriam ya no le gusta desde que está con Elena Tablada.

También Miriam vivió un altercado con Cristiano Ronaldo. Siempre según su sorprendente versión intentó saltar una valla para colarse en medio de un partido y saludar al portugués. Por suerte, esta vez la Policía estuvo más rápida y se lo impidió.

La última perla que dejaba Miriam puede dar mucho de qué hablar; afirmaba que ha entrado en la casa para poner a prueba sus sentimientos, y que si siente algo por alguno de los chicos, no se casará. Eso sí, si hay boda, quiere que cante Bisbal, aunque no sé yo si estará por la labor.