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27 Jul 2024 |
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SATSE pide que se aumenten las contratacionesEl 10% de las enfermeras y enfermeras especialistas que están hoy trabajando se jubilarán en los próximos 5 años y lamentablemente la CAM no hace nada y parece que no hay recambio para ellas, tal y como denuncia SATSE en un comunicado. A estas 2.400 enfermeras hay que sumar las más de 10.000 que son necesarias para igualar las ratios de la Comunidad de Madrid al resto de Europa. “En los próximos años nos podemos encontrar con una crisis asistencial de primer orden, sin enfermeras, y sin posibilidad de contratar ya que las bajas retribuciones del Sermas y las peores condiciones laborales que el resto de Servicios Públicos de Salud hacen que Madrid sea exportador de enfermeras en lugar de atraerlas”. “Llevamos años exigiendo cambios para mejorar las condiciones de conciliación, laborales y retributivas de las enfermeras, enfermeras especialistas y fisioterapeutas del Sermas, así como advirtiendo que la política sanitaria de la CAM está provocando la precarización de la asistencia sanitaria”, explican desde SATSE Madrid. Para esta organización, la excesiva medicalización del Sermas está provocando que se enquisten problemas que podrían solucionarse con la buena voluntad de la administración sanitaria. “No es normal que casi todos los centros asistenciales la plantilla enfermera sea deficitaria por no cubrir las Gerencias las vacantes existentes y todo porque las enfermeras no quieren trabajar en la Comunidad de Madrid por sus bajas retribuciones, por sus malas condiciones laborales y por la dificultad de conciliar su vida profesional y personal. Todo ello sin contar que la CAM es una región con un nivel de vida más caro que otras comunidades de nuestro entorno. Según datos del Colegio de Enfermería de Madrid anualmente se gradúan algo más de 2.100 nuevas enfermeras de las distintas universidades de la Comunidad. De ellas, solo un tercio, unas 700, se han colegiado en Madrid para poder ejercer como enfermeras en nuestra región. La Universidad madrileña, al igual que los centros asistenciales que les acogen durante sus prácticas, hacen un gran esfuerzo económico y personal por formar a excelentes profesionales pero luego éstas, ante la precariedad y las malas retribuciones del Sermas, optan por buscar trabajo fuera de nuestra Comunidad por lo que nos convertimos en exportadores de nuevos profesionales. A la precariedad de enfermeras que ya sufren los hospitales de la región durante este verano hay que sumar que casi 1.000 enfermeras se trasladarán a trabajar a Castilla-La Mancha en septiembre, tras resolver su concurso de traslados. Serán casi mil enfermeras más las que tendrán que ser reemplazadas, con la dificultad añadida de que muchos hospitales han sido incapaces de sustituir a las enfermeras que han disfrutado de sus vacaciones estivales. Hay hospitales que han dejado sin cubrir gran parte de los puestos autorizados por la Consejería de Hacienda para ser contratados ante la falta de enfermeras que quieran trabajar en la Comunidad de Madrid por lo que se ha recurrido a cerrar más camas de las previstas o, directamente, a solicitar a las enfermeras que están trabajando a hacerlo tras finalizar su jornada laboral habitual (doblar). “Da lo mismo que la Consejería de Hacienda autorice 2.000 mensualidades para contratar enfermeras durante este verano, añaden desde SATSE Madrid, si éstas no quieren trabajar en el Sermas. El problema no es autorizar nuevas contrataciones sino que las enfermeras estén dispuestas a trabajar en el Sermas y éstas no quieren hacerlo por sus malas condiciones laborales. El Hospital Doctor Rodríguez Lafora atiende a pacientes que precisan hospitalización psiquiátrica breve, cuidados psiquiátricos prolongados o tratamiento hospitalario de trastornos adictivos relacionados con el alcohol y otras sustancias de abuso, según publicita la CAM. La plantilla enfermera la componen 131 profesionales de Enfermería de las que 43 son enfermeras especialistas en Salud Mental. La realidad es que solo hay 110 enfermeras en activo ya que el resto está de baja o bien tiene algún tipo de reducción de jornada. La plantilla enfermera del Lafora afronta este verano con graves problemas de personal a pesar de que el centro está prácticamente al 100% de su capacidad. Según informa la sección sindical de SATSE Madrid en el hospital, “hay un total de 278 camas abiertas de las cuales están ocupadas 275. Hay 13 pacientes ingresados pero de permiso por lo que hay 262 pacientes presenciales. Es decir, prácticamente el 100% de la capacidad actual del psiquiátrico”. Al problema de la falta de sustituciones de cara al verano, que no se resuelve con el cierre de las 49 camas previstas por el Sermas, hay que sumar que tampoco se cubren las bajas que se producen por diversos motivos como enfermedad o reducciones de jornada. Las bajas por enfermedad no cubiertas son un total de 13, así como 7 de las 9 reducciones. “Esto significa, explican desde SATSE, que son las propias enfermeras las que han de ocuparse de suplir a sus compañeras de baja, con reducción de jornada y, también las que están de vacaciones”. La Dirección del centro solicitó llevar a cabo 23 contratos de verano, insuficientes en opinión de SATSE Madrid, ya que apenas cubre las bajas existentes y para las que no se han contratado enfermeras. Al final, de estos 23 contratos solicitados solo se han hecho efectivos 6, un 34%. El resto no ha podido cubrirse por falta de candidatas”. Aunque la consejera de Sanidad, Fátima Matute, afirme que la falta de enfermeras es un problema generalizado en todo el Estado, la realidad es que salvo en Andalucía, Comunidad Valenciana o Murcia, el resto de comunidades han cubierto, de una u otra forma, las vacaciones de sus enfermeras por lo que tienen la plantilla enfermera necesaria y puede garantizar la correcta asistencia a sus ciudadanos durante el verano”. El problema de la Comunidad de Madrid son sus condiciones laborales, más precarizadas y con peores retribuciones que el resto de regiones. Los contratos que ofrece el Sermas son de menor duración de los que se ofertan en otros servicios de salud y el nivel de vida de Madrid es más alto, por lo que no resulta atractivo trabajar en el Sermas. “El Servicio Madrileño de Salud, en lugar de ser un sistema sanitario atractivo para las enfermeras, es un exportador de recursos enfermeros. En Madrid formamos a enfermeras para luego expulsarlas por las malas condiciones que se ofrecen. Gastamos recursos que luego no recuperamos. Regiones fronterizas como Castilla-La Mancha o Castilla y León tienen mayoritariamente cubiertas sus necesidades de personal enfermero, seguramente en muchos casos con enfermeras formadas en las universidades madrileñas”. En la Comunidad de Madrid finalizan anualmente sus estudios de Grado, unas 2.000 profesionales de Enfermería de las que, según datos del Colegio de Enfermería, únicamente se han colegiado en la Comunidad de Madrid, un tercio de ellas. El resto, según el propio Codem, tal vez prefiera trabajar fuera de Madrid por lo que previsiblemente se estén colegiando en otras provincias españolas para poder ejercer fuera de la Comunidad de Madrid. El problema de la sanidad pública es la excesiva medicalización que de ésta hacen los responsables autonómicos. El último ejemplo, la denuncia de la consejera de Sanidad de Madrid, Fátima Matute, afirmando que faltan 211 médicos para cubrir las vacaciones de estos profesionales pero no dice nada de las más de 2.000 enfermeras que serían necesarias en el Sermas para suplir a las que disfrutan de sus vacaciones. “Si se hubieran contratado las enfermeras y enfermeras especialistas necesarias evitaríamos, por ejemplo, el cierre masivo de camas que se están llevando a cabo en todos los hospitales del Sermas o que haya Unidades donde una enfermera tenga que asumir el trabajo de 2 o 3 por falta de contrataciones”, explican desde SATSE Madrid. Evitaríamos, por ejemplo, que Servicios como el que atienden las matronas tengan dificultades para encontrar sustitutas y que la solución de las Gerencias sea que doblen (prolonguen su jornada una vez terminan la habitual) o que atiendan a más pacientes de las recomendadas por las organizaciones nacionales e internacionales. Faltan matronas en todos los ámbitos asistenciales del Sermas y la respuesta, a nivel de Estado, es sacar cada vez menos plazas de formación especializada. En esta convocatoria se han perdido 18 plazas. Es verdad, siguen las mismas fuentes, que desde la Consejería se autorizaron 7.000 mensualidades (que permite la contratación de algo menos de 2.400 enfermeras) pero la realidad es que pocos hospitales han cubierto todas las contrataciones previstas y aquellos que las han cubierto siguen sin disponer de todas las enfermeras necesarias ya que no cubren bajas laborales, reducciones de jornada, permisos, etc. “Las enfermeras no quieren trabajar en Madrid por sus bajas retribuciones, por las malas condiciones laborales y por la precariedad de los contratos que les ofrecen. En otras regiones de nuestro país, la cobertura ha sido casi del 100% mientras que en Madrid hay hospitales que no han cubierto ni el 30% de las plazas ofertadas”. Muchos hospitales no han podido cubrir las vacaciones estivales de enfermeras y enfermeras especialistas y están recurriendo a suspender permisos y libranzas para poder garantizar el personal mínimo para el correcto funcionamiento de las Unidades. En otros, directamente han decidido reorganizar los Servicios, cerrando más camas de las previstas inicialmente. No hay enfermeras en paro y la AMAS no encuentra profesionales de Enfermería que quieran trabajar en sus residencias públicas. Sus condiciones de trabajo y retributivas son peores que las del Sermas y las pocas enfermeras disponibles prefieren trabajar en centros asistenciales públicos y no en las residencias de la AMAS. Ante la precariedad existente y que una única enfermera tenga que atender a 250 residentes o más (muchos de ellos demandantes de grandes cuidados), la Consejería de Asuntos Sociales, con el beneplácito de la de Hacienda, autorizó la realización de horas extras en aquellos centros con alta dificultad para encontrar enfermeras y para poder cubrir así todos los turnos de trabajo con el número mínimo indispensable de profesionales de Enfermería. La Residencia de Mayores El Carmen es uno de los centros con gran dificultad para encontrar enfermeras que sustituyan a las que están de baja o de vacaciones. La AMAS autoriza la realización de horas extras voluntarias pero el Comité de Empresa se niega a que se realicen. Sorprendentemente este órgano, que representa también a las enfermeras de esta residencia, no permite la realización de estas horas extras voluntarias por parte de las enfermeras. Tendrán que atender a los 500 residentes, muchos de ellos dependientes, con una plantilla precarizada ya que no se han cubierto totalmente ni las vacaciones ni las bajas existentes entre las enfermeras. Desde SATSE Madrid no se comprende cómo un Comité de Empresa, que dice representar a todos los trabajadores, se niega a que los residentes cuenten con la atención mínima e indispensable y que las enfermeras que voluntariamente lo soliciten puedan suplir la falta de profesionales de Enfermería en determinados turnos. “Es una situación que no se entiende sobre todo cuando la falta de enfermeras está provocando una desatención de los residentes ya que una plantilla reducida y sin refuerzos debe seguir cuidando a los residentes que allí viven”, explican desde SATSE. Las horas extras están reguladas por el convenio colectivo, y aunque SATSE cree que no es la mejor solución, son la única alternativa prevista ante el déficit de profesionales de Enfermería que se produce durante la temporada de verano. La negativa del Comité de Empresa a que se lleven a cabo “hace que las enfermeras del centro estén desbordadas, provocando una situación de sobrecarga y frustración. Además, impide que los residentes de la Residencia El Carmen dispongan de más enfermeras para atender adecuadamente sus necesidades de salud. CSIT UNIÓN PROFESIONAL, segunda fuerza sindical entre los empleados públicos de la Comunidad de Madrid, tras la reunión mantenida con la consejera de Sanidad de la Comunidad de Madrid, Fátima Matute, en aras de exponer los problemas y necesidades de los profesionales del SERMAS, remitía una carta a la Presidenta de la CM para buscar soluciones reales que vengan a mejorar las pésimas condiciones de trabajo que arrastran durante años, algo que, hasta la fecha, ha sido imposible por parte de las autoridades competentes al respecto. Isabel Díaz Ayuso, en la misiva remitida a este Sindicato, ha expresado su deseo de conseguir un verdadero compromiso en materia de conciliación laboral entre los empleados públicos, instándonos a “seguir avanzando en la vía de la negociación para integrar y aplicar con la mayor racionalidad y orden posible todas las medidas orientadas a tal fin, sin menoscabar la buena atención de la demanda asistencial, al objeto de alcanzar avances que satisfagan a todas las partes implicadas en el asunto”. El Área de Sanidad de CSIT UNIÓN PROFESIONAL viene demandando desde hace más de 5 años distintas propuestas en el ámbito del SERMAS, para poner fin a las situaciones abusivas que lesionan gravemente los derechos de los profesionales (personal sanitario y no sanitario) en materia de conciliación de la vida profesional y familiar. La Consejería de Sanidad ha ignorado nuestros requerimientos, y los trabajadores del ámbito sanitario se encuentran en una situación de agravio comparativo, en relación a otros colectivos, puesto que, de manera continuada, la Administración deniega a los profesionales del SERMAS excedencias por cuidados de familiares, permisos sin sueldo, acumulaciones por reducciones de jornada, obligación de doblar turnos y no se respetan los descansos entre jornadas, entre algunos de los ejemplos a destacar. Así, es complicado prestar una adecuada asistencia a los pacientes, pese a los sobresfuerzos de los trabajadores. Desde CSIT UNIÓN PROFESIONAL, agradecemos las palabras de la Presidenta, esperando que se éstas se conviertan en hechos y no en mero eslóganes de campaña electoral, debido a la importancia y dimensiones del asunto que nos concierne, así como el valor de la conciliación para los profesionales con menores, mayores y discapacitados a su cargo. CCOO Sanidad Madrid ha reclamado a la Consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid un plan de igualdad específico para el personal de la sanidad pública. El sindicato considera que las características de la actividad asistencial en este sector público requieren un trato diferenciado de otros sectores dependientes de la Administración Regional. La secretaría de Mujer, Igualdad y Diversidad de CCOO Sanidad Madrid ha trasladado su posición, durante la segunda reunión de la Subcomisión Técnica de Igualdad, que es el órgano encargado del seguimiento y cumplimiento del desarrollo de estos planes, y donde la Administración debe dar cuenta del grado de cumplimiento de las medidas recogidas en el último Plan de Igualdad de la Comunidad de Madrid en la sanidad pública de la región. En el mismo encuentro, CCOO ha arrancado el compromiso de que se inicie en septiembre la negociación del nuevo plan de igualdad, ya que el actual acababa su vigencia en julio de 2024. Asimismo, ha mostrado su inconformidad con la falta de transparencia y con el grado de cumplimiento del plan que ha llegado a su fin. Y ha aprovechado para reclamar que, en esta ocasión, se aborde la igualdad en la Consejería de Sanidad como algo propio y específico del sector y no dentro del mismo acuerdo que el resto de los organismos del sector público de la Comunidad de Madrid. A juicio de CCOO, los planes de igualdad permiten hacer un estudio de la situación real de los centros de trabajo de la sanidad pública respecto a la igualdad de oportunidades, teniendo en cuenta entre otros factores, las dificultades de conciliación de las plantillas, así como su incidencia en el desarrollo profesional y acceso a cargos de responsabilidad. En definitiva, políticas activas que permitan flanquear el “techo de cristal”. Y desde CCOO Sanidad Madrid se ha demandado la elaboración de un protocolo exclusivo para el acoso sexual y por razón de género en el entorno laboral. Además de las nuevas propuestas que la organización ha puesto encima de la mesa de la Consejería de Sanidad, en materia de igualdad, ha exigido al Gobierno de la Comunidad de Madrid que cumpla la ley y que de inmediato habilite el nuevo permiso de paternidad del que no disfrutan los empleados públicos de la Comunidad de Madrid. |