En Infantil, Primaria y Educación Especial

La Comunidad de Madrid comenzará el próximo curso escolar 2024/25 el 9 de septiembre -lunes- en los colegios de Educación Infantil, Primaria y Especial y en los centros Integrados de Enseñanzas Artísticas de Música. Un día después volverán a las aulas los alumnos de Educación Secundaria Obligatoria, Bachillerato, Formación Profesional y los centros Integrados de Enseñanzas Artísticas de Música y de ESO; mientras que las Escuelas Infantiles y las Casas de Niños empezarán su actividad antes, el 5 de septiembre.

El calendario para los centros educativos sostenidos con fondos públicos de la región, que se publicará próximamente en el Boletín Oficial de la Comunidad de Madrid (BOCM) y podrá consultarse en la web institucional www.comunidad.madrid, fija también el 10 de septiembre como arranque de curso para los alumnos de los Conservatorios Profesionales de Música y Danza, las Escuelas Oficiales de Idiomas y el 2º curso de los ciclos de Artes Plásticas y Diseño de las Escuelas de Arte.

Además, el 12 de septiembre iniciarán las clases los centros de Enseñanzas Artísticas Superiores, mientras que los centros de Educación de Adultos lo harán el 18 y el primer curso de los ciclos de Artes Plásticas y Diseño el 19.

Las vacaciones de Navidad serán del 21 de diciembre al 7 de enero, y el periodo no lectivo con motivo de la Semana Santa se desarrollará entre el 11 y el 21 de abril de 2025. El 1 de noviembre y el 6 de diciembre de 2024 serán festividades de carácter general, y, además, serán no lectivos el 28 de febrero y el 3 de marzo.

El curso terminará el 20 de junio en Infantil, Primaria, Educación Especial, ESO, FP, Enseñanzas Artísticas de Música, Conservatorios Profesionales de Música y Danza, Escuelas Oficiales de Idiomas, Escuelas de Arte y Educación de Adultos. Los alumnos de 1º de Bachillerato también concluirán este mismo día, mientras que para los de 2º curso las fechas se adaptarán a las necesidades derivadas de la realización de la evaluación final y de los procedimientos de admisión en las Universidades. Por su parte, las Escuelas Infantiles y las Casas de Niños concluirán el curso el 31 de julio.

"El calendario escolar impuesto por la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, para el próximo curso 2024-2025 en los centros sostenidos con fondos públicos amenaza con poner en pie de guerra a la comunidad educativa. La secretaria general de la Federación de Enseñanza de CCOO Madrid, Isabel Galvín, ha denunciado “graves irregularidades” en la tramitación de dicho calendario, que se llevó a la Comisión Permanente del Consejo Escolar el pasado 14 de marzo, dos meses y medio antes de lo que viene siendo habitual y por la vía de urgencia", afirma CCOO en un comunicado.

“La única razón para tantas prisas”, afirma Galvín, “es sacar adelante la última ocurrencia de la señora Ayuso”. Ésta no es otra, según la nota explicativa ofrecida por la Consejería de Educación, que la apertura de los colegios públicos los días no lectivos para facilitar la conciliación de la vida laboral y familiar.

“Resulta escandaloso que se supedite la tramitación del calendario escolar, de vital importancia para el ejercicio del derecho a la educación y la vertebración social, a una medida populista anunciada por Ayuso días antes, medida de coste cero, carente de rigor y dirigida a tapar la falta de recursos y de inversión para responder a las necesidades educativas reales”, protesta Galvín.

En todo caso, CCOO recuerda a la presidenta madrileña que la escuela no es un “parque de bolas” y que “no puede suplir la falta de políticas en materia de conciliación familiar”.

En cuanto a la tramitación en sí del calendario escolar, el sindicato advierte de que no se ajusta a la legalidad vigente. De entrada, la resolución por la que se acuerda que se realice por la vía de urgencia carece de competencias para adoptarla y lo hace, además, una vez iniciada la tramitación: “Esta precipitación ha conllevado el incumplimiento de la obligada negociación colectiva con los sindicatos representantes del profesorado y de todo el personal de la enseñanza, lo que, junto con la tramitación por la vía rápida, supone una sanción clara de nulidad”.

A todo ello, se añaden rémoras y reivindicaciones desoídas desde hace años. La irracionalidad y descompensación de los tiempos lectivos es una de ellas. Los trimestres son desproporcionados y superan los 175 días preceptivos que marca la Ley Orgánica. De hecho, Madrid es la única comunidad con este número de días lectivos. “El primer trimestre cuenta con 73 días lectivos mientras el tercero, que es el más intenso, tiene 50, un desequilibrio aún mayor que el del presente curso y que provoca el aumento del cansancio del alumnado y del profesorado, especialmente a final de curso”, protesta Galvín.

Otra de los desacuerdos tiene relación con supeditar los días lectivos a las fiestas religiosas católicas en vez de a criterios pedagógicos. “Por una cuestión cultural y de tradición se podría entender que se mantuvieran las festividades de largo raigambre popular, pero no que las mismas determinen todo el periodo vacacional”. Por último, la Federación de Enseñanza de CCOO Madrid ha anunciado que recurrirá el calendario escolar ante el Tribunal Superior de Justicia de Madrid.

Faltan 60.000 plazas de comedor en los centros educativos públicos de la Comunidad de Madrid, un déficit que afecta a todos los ciclos educativos, pero sobre todo al alumnado de la ESO, FP y Bachillerato. Tras la aprobación de la nueva convocatoria de becas de comedor para el curso 2024-2025 por parte de la Consejería de Educación, la Federación de Enseñanza de CCOO Madrid ha recordado al Gobierno regional, en palabras de su secretaria general, Isabel Galvín, que “las becas no construyen comedores” y que “asignarlas cuando el alumnado de los centros públicos no tiene en muchos casos acceso a este servicio no responde a criterios de equidad”.

“La mayor equidad en la asignación de los fondos para ayudas de comedor”, considera Galvín, “debe generar una mayor demanda por parte de las familias del alumnado de centros públicos, que reclaman servicio de comedor de gestión directa”.

Este problema, subrayan desde el sindicato, no afecta, sin embargo, a los centros privados de enseñanza, cuyo alumnado es mayoría entre los usuarios de comedor, a pesar de no tenerla en las distintas etapas: “Faltan plazas de comedor en Infantil y Primaria de centros públicos, pero es sobre todo en los institutos donde se produce el mayor desfase”.

Así, en el curso 2022/23, el porcentaje de alumnado madrileño en segundo de Infantil en centros públicos era del 54,8%, pero los usuarios y usuarias del comedor sólo representaban el 50%. En Primaria, más de lo mismo. El 54,7% del alumnado madrileño cursaba Primaria en centros públicos, pero el porcentaje de los que acudían al comedor baja al 49,6%.

El desfase se agrava en la ESO: el 53,1% del alumnado madrileño estudia esta etapa en un centro público, pero sólo el 2,8% usa el comedor escolar. “En la ESO, para tener un porcentaje de alumnos de centros públicos similar al de los privados habría que dotarlos de 60.000 plazas de comedor”, reitera Isabel Galvín.

En cuanto a FP y Bachillerato, el desfase se agranda en contra del alumnado de centros públicos: sólo el 0,7% de los usuarios de comedor de Bachillerato es alumnado de centros públicos cuando los escolarizados en esa etapa son mayoría. En FP los usuarios y usuarias de comedor de centros públicos son únicamente el 44,6%, si bien en este caso, son muy pocos, en total 910, quienes usan el comedor.