Las primeras se concedieron en junio, tan solo un mes después de entrar en vigor en la Comunidad de Madrid

La licencia express acaba de cumplir tres meses en Torrejón, y en este tiempo ya se han concedido 31. Y es que el municipio, utilizando las prerrogativas que le concede ser Gran Ciudad, puso en marcha la llamada declaración responsable de actividad tan sólo un mes después de que entrara en vigor en la Comunidad de Madrid, y un mes antes de que lo hiciese en el resto de España.

Así, las primeras licencias se concedieron en pleno mes de junio, pocos días después de ser aprobado en Junta de Gobierno, si bien hasta hace un mes no llegaba al Pleno Municipal, aunque como dación de cuentas. Y para celebrar estos primeros meses, el alcalde se acercaba a conceder la licencia definitiva a uno de los primeros establecimientos que solicitaron el trámite abreviado: Ortopedia Torrejón.

La “licencia express” ya es una realidad para poder abrir negocios gracias al Real Decreto 19/2012 de “medidas urgentes de liberalización del comercio y determinados servicios” aprobado por el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, por el cual un comercio puede abrir sus puertas con tan sólo presentar una declaración responsable en el Ayuntamiento. A partir de ese momento, se abre un proceso mediante el cual los técnicos municipales visan que todo esté correcto y se ajusta a la normativa vigente. Una vez superado este trámite se concede la licencia definitiva. El alcalde de Torrejón, Pedro Rollán, y el concejal de Empleo, Hacienda y Universidad, Ignacio Vázquez, han presentado esta mañana el balance de esta conocida “licencia express” en la ciudad, visitando Ortopedia Torrejón, uno de los negocios que se ha beneficiado de esta iniciativa. Desde su implantación el Ayuntamiento ha tramitado 31 licencias de este tipo, que están dirigidas a comercios con una superficie inferior a los 300 metros cuadrados y que permiten potenciar la actividad comercial del municipio.

Gracias a la conocida como “licencia express” se facilita mucho a los empresarios y emprendedores el poder abrir un negocio en un día, ya que pueden hacerlo minutos después de que presenten su declaración responsable en el Ayuntamiento, evitando así la burocracia que existía antes. De este modo, ya no tienen que esperar varios meses hasta que el Ayuntamiento comprobara que todas las instalaciones y el comercio se ajustan a la normativa vigente para concederles la licencia y pudieran abrir, como sucedía anteriormente. “Gracias a esta nueva normativa, se han recortado los tiempos y las pérdidas son menores para los ciudadanos que monten su negocio, de forma que se prevé dinamizar la actividad comercial minorista y de determinados servicios mediante la eliminación de cargas y restricciones administrativas que antes existían y que afectaban al inicio y ejercicio de la actividad comercial. Eso es lo mejor, el ahorro de trámites. Se reducen al máximo porque registrando un papel se puede abrir un negocio”, indicó el alcalde.

“Un ejemplo de lo anterior lo podemos aplicar con Lucía y Bernardo, propietarios de Ortopedia Torrejón. Ellos presentaron la declaración responsable a finales del mes de julio y abrieron este negocio inmediatamente. Hoy, una vez que los técnicos municipales han comprobado que todo está correcto, les hemos hecho entrega de la licencia de funcionamiento”, recordó Pedro Rollán.

Ortopedia Torrejón se encuentra en la calle Lisboa 27, en una de las zonas más comerciales de la ciudad. Estos dos emprendedores torrejoneros decidieron abrir su propio negocio para mejorar su situación laboral. Lucía se asesoró en la Concejalía de Empleo y realizó el curso “Creación de Empresas para Emprendedoras” de la Concejalía de Mujer. Ella hizo un plan de negocio como trabajo de curso que fue supervisado en el Ayuntamiento, y visado en la Comunidad de Madrid y en la consultoría Deloitte. A los pocos meses decidió montar su propio negocio: un centro ortopédico en Torrejón con una idea novedosa en la ciudad como es el estudio de la pisada. Hoy es el lugar donde trabajaban tanto ella como su marido.

En este sentido, lo mismo sucede con el cambio de titularidad de un comercio siempre que se mantenga el mismo tipo de actividad. “Mediante una comunicación previa presentada en el Ayuntamiento se permite el traspaso de la actividad de un propietario a otro desde el mismo momento en el que se presenta en el registro. Antes este trámite duraba meses porque había que esperar a la presentación de toda la documentación necesaria. Por último, presentando la declaración responsable además de la licencia de actividad se permite obtener la licencia de obras de acondicionamiento del propio local” recordó el concejal, Ignacio Vázquez.

Para solicitar la licencia tan sólo hay que acudir al Ayuntamiento, pagar la tasa y presentar la declaración responsable cuyo modelo de solicitud está a disposición de los ciudadanos en la web municipal, www.ayto-torrejon.es para facilitar el acceso al nuevo régimen.

En base a la clasificación nacional de actividades económicas, el ámbito de aplicación de esta norma se extiende en el comercio minorista, entre otros, a alimentación, frutería, carnicería, pollería, charcutería, pescadería, panadería, pastelería, heladería, tiendas de caramelos, bodegas y autoservicios de alimentación. A ellas se suman el textil confección y hogar, peletería, herbolario y parafarmacia, perfumería, droguería, equipamiento del hogar, muebles, aparatos electrónicos, ferretería, material de construcción y saneamiento, bricolaje, venta de automóviles y accesorios, óptica, ortopedia, instrumentos musicales, antigüedades, librería, papelería, juguetería, joyería y plantas.

En la pequeña industria artesanal, están incluidas las actividades vinculadas al calzado y textil, mientras que en las actividades de servicios se incluyen agencias de viaje, actividades de promoción inmobiliaria, reparación de ropa y zurcido, reparación de calzado, peluquerías, institutos de belleza y estética, servicios de fotocopias y servicios de enmarcación. Quedan excluidas las actividades que tengan impacto justificado y proporcionado en el patrimonio histórico-artístico o en el uso privativo y ocupación de los bienes de servicio público.