Las primeras investigaciones apuntan al colapso de una terraza como responsable
El alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, expresó su profundo pesar y apoyo a las familias, amigos y compañeros de las cuatro víctimas mortales del colapso de un edificio en la calle Hileras. A primera hora de la mañana, el alcalde confirmó que los bomberos habían rescatado los cuerpos de las dos personas que permanecían desaparecidas, tras haber encontrado previamente otros dos cadáveres.
El rescate se llevó a cabo poco antes de las 3 de la madrugada, cuando los bomberos lograron recuperar los cuerpos de las últimas víctimas. La Policía Científica de la Policía Municipal y la Policía Nacional se encargarán de la identificación de los cuerpos en las próximas horas. De las cuatro víctimas, tres eran hombres y una era mujer. Se indicó que la mujer tenía "alguna responsabilidad en la obra", lo que sugiere que podría haber estado involucrada en las labores de construcción o supervisión del edificio.
Martínez-Almeida utilizó sus redes sociales para transmitir su "cariño y apoyo" a los afectados por esta tragedia, destacando la "profunda tristeza" que siente por las pérdidas. El alcalde se desplazó al lugar del colapso para supervisar la situación y brindar apoyo a los equipos de rescate.
No se han encontrado indicios claros sobre las causas del desplome. La investigación del accidente ha sido asignada a la Policía Judicial de la Policía Municipal de Madrid, dado que se trata de un accidente laboral. Según Almeida, el derrumbe se originó en el forjado de la sexta planta, lo que provocó un efecto dominó que afectó a todas las plantas del edificio hasta llegar a la planta baja.
Miguel Seguí, jefe de Guardia de los Bomberos del Ayuntamiento de Madrid, proporcionó detalles sobre el evento y la posterior intervención de los servicios de emergencia.
Seguí explicó que el derrumbe fue resultado de "varios factores", afectando específicamente a dos zonas de forjado en la parte central de un bloque de edificios. El incidente generó aproximadamente 150 metros cúbicos de escombros. El edificio, en el que se produjo el colapso, estaba en proceso de obras de mejora estructural para un cambio de uso, lo que implica que se estaban realizando trabajos sobre una estructura antigua, incluyendo la retirada de tabiques y la modificación de cargas.
La investigación sobre las causas del derrumbe ha sido asignada a la Policía Científica, que ha calificado el evento como un accidente laboral. Aunque se han identificado varios factores que podrían haber contribuido al colapso, Seguí se abstuvo de especular sobre las causas específicas, enfatizando que no se ha detectado ninguna amenaza a la estabilidad de los edificios colindantes.
Tras el derrumbe, que ocurrió alrededor de las 13:00 horas, los Bomberos de Madrid fueron llamados a la escena. Su primera acción fue asegurar la zona de intervención para prevenir posibles nuevos desprendimientos. Esto incluyó la retirada de elementos inestables que podrían haber puesto en riesgo tanto a los rescatistas como a posibles sobrevivientes.
A pesar de los riesgos presentes, los bomberos se vieron obligados a actuar rápidamente debido a la posibilidad de que las cuatro personas reportadas como desaparecidas pudieran estar con. Los trabajos de rescate se llevaron a cabo durante la noche y se extendieron hasta las 3:00 horas del día siguiente. Durante este tiempo, se recuperaron los cuerpos sin vida de las cuatro personas.
El operativo de rescate se enfrentó a un considerable desafío debido a la acumulación de hasta tres metros de escombros en una superficie de aproximadamente 50 metros cuadrados. Esto obligó a los bomberos a retirar los escombros manualmente, lo que complicó y prolongó el proceso de rescate. Además, se contó con el apoyo de unidades caninas de búsqueda, que marcaron de manera precisa la ubicación de los cuerpos.
El derrumbe afectó el forjado superior de la terraza de un edificio de seis plantas, impactando únicamente en dos zonas centrales del forjado. Aunque quedaron zonas inestables y elementos colgantes, Seguí aseguró que el trabajo de rescate había finalizado y que se mantenía un retén de apoyo técnico en el lugar.
Mientras tanto, la Policía Científica y los técnicos de control de edificaciones están llevando a cabo las comprobaciones estructurales necesarias para evaluar la seguridad del edificio y determinar las causas exactas del colapso.
El juez de Instrucción número 43 de Madrid, Fernando Fernández, ha asumido la responsabilidad de la investigación. En su función como juez de guardia de diligencias, ha comenzado a indagar sobre las circunstancias que rodearon el derrumbe. Hasta el momento, las causas del siniestro permanecen desconocidas, lo que ha llevado a la necesidad de una investigación exhaustiva.
El magistrado Fernández estuvo presente en el levantamiento de los cuerpos de las víctimas, que fueron hallados entre los escombros por los equipos de emergencias. Este proceso se llevó a cabo durante la madrugada, en el marco de las diligencias que se han iniciado tras el accidente. |