2013 comenzaba con una semana relativamente tranquila, y es que, a pesar de la situación económica, política y social en que vive España, la Zona Este sigue, más o menos, de vacaciones. Así, en esta semana se ha hablado, y mucho de Reyes, los tres que vienen de Oriente, y otro que solía venir de Baqueira.

Precisamente este último concedía una entrevista el pasado viernes con la intención de limpiar una imagen tremendamente deteriorada, intención que, por cierto, no ha conseguido en absoluto: preguntas pactadas, respuestas regrabadas, ausencia de temas polémicos, y un tono que en nada parecía al de una entrevista no han hecho más que echar más leña a un fuego que amenaza con quemar a muchos. Y eso que la entrevista pasó muy desapercibida entre los espectadores: tan sólo un 14% de los espectadores vio el programa. Sin embargo, la polvareda levantada con posterioridad sí ha hecho correr ríos de tinta: Pilar Urbano afirmaba en El Gran Debate que el Rey tiene celos de su hijo, y la producción televisiva “eliminó” del globo terráqueo el país de Botsuana colocando estratégicamente el respaldo de la silla.

Pero no fue el único Rey del que se habló en lo­s últimos días: los Reyes de Oriente llegaban a todos los rincones de España aunque mucho más austeros que otros años: menos carrozas, mucho menos presupuesto y una puesta en escena muy comedida para las Cabalgatas más sosas de la última década. Sin embargo, una localidad rompió los esquemas poniendo en marcha una gran Cabalgata a la altura de lo que merecen los niños: Torrejón, con diecisiete carrozas y un espectacular fin de fiesta consiguió destacar sobre el resto de la Comunidad y de España.

Otra Cabalgata también destacó en la noche del cinco de enero, aunque por motivos muy diferentes: una carroza de la Cabalgata de Málaga atropellaba a un niño de seis años que se había acercado a recoger caramelos. El trágico suceso, no obstante, no impidió que el desfile continuase por expreso deseo de los padres del pequeño, que no quisieron romper la ilusión a todos los niños de la ciudad.

Pero al margen de la Noche de Reyes, esta semana comenzaba con la temida Cuesta de Enero, una cuesta que este año amenaza con convertirse en una auténtica montaña: subidas del teléfono, el agua, la luz, la gasolina, los transportes y los peajes llegaban sumados a la puesta en marcha en Madrid del polémico euro por receta, una medida que ya se ha convertido en el nuevo tema estrella de la política regional: amenazas de querellas, recursos ante el Constitucional y la Defensora del Pueblo, y el comienzo de una nueva movilización auguran un invierno tan caliente como el otoño en materia sanitaria.

Y es que no es para menos: la estrategia de desgaste llevada a cabo por la izquierda social, sumado a las medidas muy impopulares del Gobierno Central ya han provocado la situación que todos esperaban: las últimas encuestas sitúan al PSOE por delante el PP en intención de voto, y eso, a pesar de que los socialistas siguen inmersos en una guerra interna que no hace más que hundir su credibilidad.

Otro asunto que parece lejos de cerrarse en el escenario regional es el del ERE de Telemadrid, y es que, a pesar de que en los últimos días terminaba la negociación, continúan las movilizaciones y la pantalla en negro en el canal.

Pero Enero llegaba con buenas noticias para la situación económica: el mejor dato de paro de un mes de diciembre en toda la historia, una considerable rebaja de la prima de riesgo y las palabras del FMI pidiendo perdón por pedir medidas de recorte auguran que 2013 no será tan terrible como 2012. En el otro lado, también hay síntomas para seguir temblando: Reino Unido ya ha tenido que bajar sus previsiones de crecimiento, y el último balance del FLA afirma que la mayoría de comunidades rescatadas por el Estado Central han mentido en sus datos de déficit. Precisamente entre las Comunidades que, presuntamente, falsearon sus datos, se encuentra Cataluña, que continúa con su proceso de creación de un nuevo Estado con la formalización del Gobierno.

En el terreno político, por último, esta semana se ha hablado de enchufes, y es que la Diputación de Orense se encuentra en el punto de mira por la formalización, presuntamente, de más de cien contratos irregulares, asunto que, ayer mismo entraba en fase judicial. Nuevos implicados en la Operación Pokémon y una ampliación de la participación de Nacho Vidal en la Operación Emperador completan la crónica judicial de la semana. Y ya en la Zona Este, la crónica de la semana deja dos asuntos que van a dar juego: la denuncia en Alcalá de la transformación en personal municipal de contratados por Alcalá Promoción; y la situación financiera de la Empresa de Vivienda de San Fernando.

Con respecto al primer asunto, la contundente respuesta del alcalde, presentando el acta del Pleno en que lo aprobaron los partidos que ahora se oponen parece cerrar un capítulo que, no obstante, seguro tendrá repercusiones. En el aspecto más puramente político, la confluencia de intereses de PSOE y UPyD auguran que puede haber cambio de gobierno mucho antes de lo que pudiera imaginarse.

Y en cuanto a San Fernando, si el año terminaba con Plaza de España, el nuevo comienza con las viviendas de Somorrostro, un asunto del que, sin duda, se hablará en los próximos días. De momento, era el PP de la localidad el que advertía de la situación en que se encuentra el último balance de la EMS, un balance que, según los populares, era totalmente “irreal y ficticio”.