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27
Ago
2021
España suma tres platas y siete diplomas en la tercera jornada de los Juegos PDF Imprimir E-mail
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Foto cedida por Comité Paralímpico EspañolÍñigo Llopis, Marta Fernández y Sergio Ibáñez subieron al pódium

Siguen cayendo medallas en Tokio, y la mayoría de ellas, de plata. Así la jornada de este viernes dejaba otras tres preseas argénteas en los Juegos Paralímpicos, conseguidas por Íñigo Llopis y Marta Fernández en la piscina y Sergio Ibáñez en el tatami.

El equipo español cuenta ya con siete medallas (un oro y seis platas) y la clasificación por países sigue encabezada por China (20 oros, 11 platas y 14 bronces), seguida de Gran Bretaña (9, 9 y 9), Rusia (9, 7 y 10), Australia (7, 4 y 8), Estados Unidos (6, 5 y 1), Brasil (6, 4 y 7), Países Bajos (5, 4 y 2), Italia (4, 5 y 4), Ucrania (3, 12 y 6) y Azerbaiyán (3, 0 y 2). España se sitúa decimosexta en el medallero general de países.

En un día con una masiva participación española en 10 deportes (sólo 'descansaron' el fútbol-5, el piragüismo, el triatlón, el taekwondo y el tiro), el primer éxito se produjo en el Centro Acuático de Tokio, donde el nadador Íñigo Llopis remontó en la piscina para hacerse con la medalla de plata en los 100 metros espalda (clase S8).

Llopis finalizó el primer largo a la piscina en la tercera plaza, por detrás del estadounidense Robert Griswold y del chino Fengqi Liu. Tras el viraje, ganó centímetros al oponente asiático y lo adelantó a unos 20 metros de la pared final, con lo que se colgó la medalla de plata con un tiempo de 1'06"82. Llopis, de 22 años y con discapacidad física, se presentó en la final de los 100 metros espalda (clase S8) con el segundo mejor tiempo de los participantes.

El nadador donostiarra finalizó el primer largo a la piscina en la tercera plaza, por detrás del estadounidense Robert Griswold y del chino Fengqi Liu. Tras el viraje, ganó centímetros a su oponente más inmediato y le adelantó a unos 20 metros de la pared final, con lo que se colgó la medalla de plata con un tiempo de 1'06"82. Griswold batió el récord del mundo (1'02"55") y Liu tuvo que conformarse con la medalla de bronce (1'07"09). El español consiguió así el primer metal paralímpico de su carrera deportiva.

“Estoy muy cansado y muy contento. La marca no me ha gustado mucho, pero al final lo que contaba era ganar a mis rivales. Quedar segundo era a lo que más podía aspirar y lo hemos logrado. Es un subidón después de mi experiencia en Río y las lesiones que he tenido”, indicó Llopis tras lograr la plata. Llopis comentó que “volver a competir a este nivel es increíble”. “Esta prueba es la que más he trabajado durante todo el año”, añadió.

El nadador guipuzcoano debutó con 17 años en los Juegos Paralímpicos de Río 2016, cuando perteneció al Equipo AXA de Promesas Paralímpicas. Entonces, no se clasificó para las finales de los 50 y los 100 metros libre y la de los 200 estilos. Después, ha ido experimentando una gran progresión y ha centrado su carrera en las pruebas de espalda.

Llopis obtuvo medallas en el Mundial de Londres 2019 (bronce en 100 espalda), el Europeo de Dublín 2018 (oro en 400 libre y platas en 10 libre y 100 espalda en Dublín 2018) y el Europeo celebrado el pasado mes de mayo en Madeira (oro en 100 espalda y bronce en 400 libre y el relevo de 4x50 estilos 34 puntos para nadadores con discapacidad física).

La piscina dio otra plata a España merced a Marta Fernández en los 50 metros mariposa de los Juegos Paralímpicos de Tokio 2020, con lo que España acumula ya seis metales en la cita japonesa, cinco de ellos y de color plateado a cargo del equipo de natación.

Fernández, de 27 años y con parálisis cerebral, participó en esa prueba para nadadoras de la clase S5, aunque la burgalesa es de la S4 (por tanto, una clase para deportistas con mayor discapacidad). El reglamento permite competir en una prueba de la clase superior, siempre y cuando se obtenga las marcas clasificatorias exigidas.

En la ronda clasificatoria, Fernández batió su propio récord del mundo de los 50 mariposa S4, con 41"27, lo que suponía el segundo mejor registro de las finalistas, sólo superado por los 40"74 de la china Dong Lu (clase S5). Ya en la final, Fernández confirmó sus claras opciones de podio al tocar la pared en la segunda posición y pulverizar de nuevo el récord del mundo hasta dejarlo en 40"22. El oro fue para Lu, que batió la plusmarca mundial de la clase S5 con 39"54, y el bronce se quedó en manos de la china Jiao Cheng, que detuvo el cronómetro en 43"04.

"Ha sido una locura. La carrera de ayer en el relevo me dio más confianza del estado de forma que traía y ha salido todo muy bien", comentó Fernández a los periodistas tras acabar la prueba, antes de destacar que nadó en la clasificatoria sin reservar fuerzas para la final y en ésta volvió a dar lo mejor de sí misma.

Marta Fernández, que pertenece a la Federación Española de Deportes de Personas con Parálisis Cerebral y Daño Cerebral Adquirido (FEDPC), debutó internacionalmente esta temporada con el Europeo celebrado en Madeira (Portugal), donde se colgó dos oros, tres platas y dos bronces.

Por su parte, el judoka Sergio Ibáñez, de 22 años y con discapacidad visual grave, logró el mayor éxito de su carrera deportiva al colgarse la medalla de plata en los Juegos Paralímpicos de Tokio 2020. Además, se trata del 20º metal del judo paralímpico español desde Barcelona'92.

Ibáñez, que compitió en la categoría de menos de 66 kilos y es el séptimo del ranking mundial, perdió el combate final contra el uzbeko Uchkun Kuranbaev (cuarto en el ranking) en el Nippon Budokan de Tokio, templo de las artes marciales en la capital japonesa.

Pese a no haber aficionados en las gradas, Ibáñez pudo sentir el aliento y los ánimos de todo el equipo paralímpico español de judo, que estuvo apoyando al aragonés desde su primer combate, el cual concluyó con victoria por 'ippon' a los 2'10" ante el costarricense Luis Jabdiel Pérez.

Ya en cuartos de final, Ibáñez se enfrentó al azerbaiyano Namig Abasli, a priori uno de los favoritos a alzarse con medalla al ser el segundo del ranking mundial. El judoka zaragozano derrochó una gran forma física y se mantuvo muy firme hasta llegar al final del tiempo reglamentario con dos amonestaciones para su rival. En el 'punto de oro' (tres minutos extra), Ibáñez venció por 'waza-ari', lo que valió su pase a semifinales.

Sin mucho tiempo de recuperación, llegó la penúltima ronda ante el georgiano Giorgi Gamjashvili (tercero en el ranking mundial) y al que venció por 'ippon' a los 43 segundos de comenzar el combate. La victoria fue muy festejada por sus compañeros del equipo y el cuerpo técnico español.

Por la tarde se disputaron los combates decisivos de medallas. La gran final enfrentó a Ibáñez contra Kuranbaev y ganó el uzbeko por por 'waza-ari' a los 27 segundos de iniciarse el 'punto de oro', ante las protestas del entrenador y del deportista español porque el juez árbitro dio el punto al aragonés, pero el de mesa lo otorgó al rival y prevaleció este último criterio.

“Haber perdido una final nunca es algo agradable, pero hay que levantar la cabeza y disfrutar de este momento, que nunca sabes si se va a repetir o no. He hecho lo que tenía que hacer, lo llevo preparando meses y he hecho bien mi trabajo”, comentó Ibáñez tras recibir la medalla.

A sus 22 años, Sergio Ibáñez confirmó en Tokio 2020 su progresión encima del tatami después de que en 2018 lograra que, por primera vez en la historia del judo español, un deportista con discapacidad visual se colgara una medalla en el Campeonato de España absoluto frente a rivales sin discapacidad, concretamente la de plata en la categoría de menos de 60 kilos.

En el Campeonato de España de 2020, organizado en Madrid por la Real Federación Española de Judo, Ibáñez volvió a brillar con una medalla de bronce. Además, el aragonés cuenta en su palmarés con una medalla de plata conseguida en un Mundial de Judo para Ciegos y otra plata y un bronce en campeonatos de Europa.

El judo es uno de los deportes con menos modificaciones para personas ciegas y sólo es preciso que los combates se inicien con los dos deportistas agarrados. Si se sueltan, el árbitro detiene el combate para que vuelvan a cogerse. Existen otras adaptaciones en la forma en que los árbitros transmiten las señales a los deportistas, ya que no lo pueden hacer por gestos.

Por otro lado, el equipo español cosechó este viernes otros siete diplomas paralímpicos en cuatro sedes diferentes. En el Centro Acuático, María Delgado fue cuarta en los 100 metros espalda (clase S12), con un tiempo de 1'12"83, y sexta en los 400 libre (S13), con 4'46"88. Iván Salguero acabó séptimo en los 400 libre (S13), con 4'21"56, y Michelle Alonso, octava en los 200 libre (S14), con 2'19"67.

En el Velódromo de Izu, Ricardo Ten terminó octavo en el kilómetro contrarreloj (C1-C3, para ciclistas con mayor discapacidad) con un tiempo factorizado de 1'08"968, lo que supuso mejorar su marca personal. Si el valenciano hubiera competido con deportistas de su misma clase, habría obtenido el bronce.

La halterófila Loida Zabala logró el cuarto diploma paralímpico de su carrera deportiva al finalizar sexta en los Juegos de Tokio 2020, tras los quintos puestos de Londres 2012 y en Río 2016, y el séptimo de Pekín 2008. La cacereña, que compitió en la categoría de menos de 50 kilos, comenzó en el Foro Internacional de Tokio con un intento válido de 93 kilos, pero falló en sus dos apariciones posteriores sobre el escenario, en ambos casos de 97 kilos.

En el Estadio Olímpico, el atleta Xavi Porras acabó quinto en el salto de longitud (T11, para ciegos) con un mejor intento de 5,93 metros.

Este jueves hubo más presencia española en Tokio 2020. En el Velódromo de Izu, Eduardo Santas (C3) finalizó noveno en el kilómetro contrarreloj C1-C3, un puesto por debajo de Ten al parar el crono en 1'08"992. En esa misma prueba de velocidad, Alfonso Cabello ganó este jueves el oro en las clases C4-C5, esto es, para ciclistas con menor discapacidad. Si Santas hubiera competido exclusivamente con ciclistas de la clase C3 habría subido al tercer puesto del podio y recibido una medalla de bronce.

El ciclismo en pista concluirá este sábado con opciones de metal para el trío de velocidad por equipos compuesto por Ricardo Ten, Pablo Jaramillo y Alfonso Cabello, que tratarán de exprimirse en una prueba en la que ya exhibieron potencial en el Mundial de Milton 2019, donde una descalificación les dejó fuera de la lucha por el oro tras registrar un gran tiempo para acceder a la final.

En el Centro Acuático, tres españoles no pudieron llegar a las finales: Sergio Martos, que hizo 1'12"15 en los 100 metros espalda (S8); Eva Coronado, con 2'23"13 en los 200 libre (S14), y Ariadna Edo, con 4'51"55 en los 400 libre (S13).

En baloncesto en silla de ruedas, la selección masculina selló su pase a los cuartos de final al imponerse a Colombia por 74-56, con actuaciones estadísticas más destacadas de Ignacio Ortega (19 puntos y 6 rebotes), Asier García (12 puntos, 9 rebotes y 11 asistencias) y Manu Lorenzo (10 puntos y 6 rebotes). No ocurrió lo mismo con la femenina, que perdió ante China por 29-46; ocho jugadoras lograron anotar, con nueve puntos de Vicky Alonso como máxima encestadora.

En el tenis de mesa, José Manuel Ruiz (clase 10) quedó eliminado de la competición individual al caer en su último partido de grupos por 0-3 contra el montenegrino Luka Bakic. Francisco López Sayago (4) ganó en octavos de final al chileno Cristian González por 3-0 y perdió en cuartos frente al tunecino Abdullah Ozturk por 3-0.

Eduardo Cuesta (11) entró en los 'play offs' al vencer en su último encuentro de grupos al tunecino Karim Gharsallah por 3-0, pero se quedó en los cuartos de final al caer ante el australiano Samuel Philip von Einem por 3-1. Y Jordi Morales también se apeó en cuartos tras ser derrotado por polaco Maksym Chudzicki por 3-0.

En atletismo, Izaskun Osés se clasificó para la final de los 1.500 (clase T13) con un tiempo de 4’46”70, mientras que quedó eliminada Mari Carmen Paredes, con 5’56”71.

Este viernes debutaron tres deportes con participación española (atletismo, remo y tenis en silla de ruedas). Cabe destacar que el clima extremo obligó a suspender durante varias horas los partidos de tenis en silla de ruedas en las nueve canchas exteriores, ya que la temperatura de bulbo húmedo llegó a 31,2 grados a las 10.30 horas en el Parque de Tenis de Ariake, más del umbral permitido para soportar el calor y la humedad.

Los encuentros en tenis en silla de ruedas de esas canchas se disputaron por la tarde. Ganaron en la primera ronda Martín de la Puente (11º cabeza de serie) al argentino Agustín Ledesma por un doble 6-1, Daniel Caverzaschi (13º) al británico Dermot Bailey por 6-2 y 6-0 y Quico Tur al tailandés Banjob Suwan por 1-6 y 4-6. En cambio, Kike Siscar se despidió de Tokio 2020 al caer contra el japonés Takuya Miki (12º) por 1-6 y 2-6.

También se estrenó el remo en el Canal Sea Forest. En la embarcación individual masculina de la clase PR1, Javier Reja hizo el sexto mejor tiempo con 10'38"83, con lo que se clasificó para la repesca de este sábado. Lo mismo sucedió con el equipo mixto PR3Mix4+, formado por la timonel Estíbaliz Armendáriz y los remeros Josefa Benítez, Enrique Floriano, Jorge Pineda y Verónica Rodríguez, que empleó 8'08"53 en su serie y pasó a la repesca.

Respecto al tiro con arco, Carmen Rubio terminó 21ª en la ronda clasificatoria de arco compuesto individual con 652 puntos, lo que supone la mejor marca de la temporada y su pase a los dieciseisavos de final.

 

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