Según CCOO, algunos de ellos renuncian a la plaza

La secretaria general de Enseñanza de CCOO de Madrid, Isabel Galvín, ha pedido al consejero de Educación, Enrique Ossorio, que aclare el tipo y duración del contrato que se está haciendo al nuevo profesorado al que, desde el pasado lunes, se le está asignando plaza.

CCOO avisa que la falta de claridad, transparencia y seguridad en los contratos es tal que un número significativo de profesores y profesoras que ha obtenido plaza ha renunciado a la misma o está pensando en hacerlo, ya que en muchos casos tendrían que cambiar de residencia o abandonar otro trabajo sin saber dos aspectos fundamentales: las condiciones y la duración. “El riesgo que esto supone es que Madrid no consiga atraer y mantener al profesorado necesario para poner en marcha las medidas que garanticen la seguridad en los centros escolares y el derecho a la educación”.

Isabel Galvín ha reiterado que la duración de los contratos debe coincidir con el curso escolar y no limitarse hasta el mes de diciembre, como ha dado a entender el gobierno regional. “Los equipos directivos están desconcertados y con mucha incertidumbre ante la posibilidad de que la organización hecha ahora se desmantele a mitad de curso”, afirma.

Ante la gravedad de la situación, CCOO ha solicitado a la Consejería de Educación una nota aclaratoria urgente e inmediata “Es imprescindible que hoy mismo el Gobierno de Madrid aclare sus planes a la comunidad educativa. Debe confirmar la información que la Dirección General de Recursos Humanos ha dado a las organizaciones sindicales en la mesa sectorial de que los nombramientos de la asignación extraordinaria del 7 de septiembre son para todo el curso escolar. Esta es la misma respuesta que Recursos Humanos está dando a las direcciones de los centros cuando plantean la cuestión”.

Por otra parte Isabel Galvín califica de “irresponsables” la declaraciones de Ossorio relativas a la contratación y argumenta que el consejero no transmite seguridad ni confianza ni al profesorado ni a los equipos directivos ni a las familias.

“El consejero mantiene al sistema educativo en jaque permanente como si fuera un juguete de cuerda que se pone en movimiento o se para según los intereses y prioridades del gobierno de Madrid. Ignora que para que se haga efectivo el derecho a la educación de niños y niñas el sistema necesita recursos, estabilidad, certezas y seguridad jurídica”, concluye la secretaria general de Enseñanza de CCOO de Madrid.