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11
Mar
2013
Madrid hace pruebas de ADN a las aves de cetrería PDF Imprimir E-mail
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Foto cedida por CAMSe pretende certificar que proceden de criadores autorizados

El Centro de Recuperación de Animales Silvestres (CRAS) de la Consejería de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio realizó un total de 194 pruebas de ADN a ejemplares de aves de cetrería en 2012, comprobando así que los individuos aportados por los cetreros corresponden a animales criados en cautividad y no proceden de ejemplares expoliados en el medio natural. El director general de Medio Ambiente, Juan José Cerrón, acompañado por el alcalde de Tres Cantos, Jesús Moreno, acudió al CRAS para comprobar el procedimiento en crías de halcón y de harris.

La Comunidad de Madrid cuenta con el Registro de Ejemplares Vivos de Especies Catalogadas, en el que se inscriben las aves de cetrería que poseen los cetreros autorizados en la región. Si esas aves se van a dedicar a la cría el control se intensifica, controlando en todo momento que los polluelos que se puedan llevar al Registro sean crías de progenitores ya registrados.

El Centro de Recuperación de Animales Silvestres “Madrid-Viñuelas” es el lugar en el que los cetreros acuden con los polluelos criados en cautividad. En el CRAS se extrae sangre para comprobar en el laboratorio el ADN del pollo, se etiqueta y se remite para su cotejo a un laboratorio, para comprobar así que el pollo procede realmente de un centro de cría y de los progenitores indicados por el criador.

A lo largo del año 2012 se realizaron en el CRAS 38 pruebas de ADN a progenitores y 156 a crías de especies como azores, cernícalos, halcones, halcones peregrinos, lechuzas o harris, aves dedicadas esencialmente a la cetrería como modalidad de caza, una actividad que se incrementa año a año en la Comunidad de Madrid y que ha hecho que también se incremente el número de aves inscritas en el Registro. Además, ha realizado otro tipo de controles a 480 progenitores y 282 pollos.

“El objetivo de la Comunidad de Madrid es asegurar la procedencia legal de las aves que se dedican a la cetrería”, declaró Juan José Cerrón, director general de Medio Ambiente. “Esto garantiza a quien las adquiere que provienen de criadores autorizados y, a todos los madrileños, que no se trata de animales que han sido expoliados del medio natural. Una de las finalidades de autorizar la cría en cautividad de especies protegidas, como son muchas cetreras, es precisamente evitar tanto el robo en la naturaleza como su comercio ilegal”.

Cuando un cetrero quiere criar ejemplares pertenecientes a especies silvestres autóctonas, especialmente protegidas, el control de la cría en cautividad se intensifica, realizando además de la comprobación documental de progenitores y pollos una revisión de los pollos a cargo de un veterinario especializado en fauna silvestre, que comprueba su especie, la identificación o el marcaje, a la que se suma el cotejo ya mencionado del ADN. El CRAS ha realizado a lo largo de los últimos 10 años este tipo de pruebas a 9.170 aves que han aportado 927 cetreros criadores de la Comunidad de Madrid.

La Comunidad de Madrid, con la práctica de estos análisis de ADN de aves de cetrería, continúa apostando por la calidad en la gestión de la fauna de nuestra región y dando respuesta a una demanda de los cetreros y criadores de rapaces, cualificando a los dueños de las aves como gestores responsables de animales protegidos.

El Centro de Recuperación de Animales Silvestres de la Comunidad de Madrid tiene como finalidad principal dar una respuesta rápida y eficaz a los ciudadanos que encuentren animales silvestres incapacitados, buscando su rehabilitación y posterior suelta en el medio natural. Desde su apertura en julio de 2010 ha recibido 7.500 ejemplares y se ha convertido en el mayor y más avanzado hospital de España en el tratamiento y rehabilitación de animales silvestres heridos.

 

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