La flota del Parque ya cuenta con 400 vehículos

La Comunidad de Madrid ha adquirido once nuevos vehículos para el Cuerpo regional de Bomberos que incorporan las últimas tecnologías en lo que a emergencias se refiere para facilitar y hacer más eficaz la labor de estos profesionales. El Ejecutivo autonómico ha realizado un gasto de algo más de seis millones de euros para sustituir once vehículos ya obsoletos por estos últimos de última generación.

Se trata de once autobombas que se adquieren en régimen de renting hasta 2020, de 16 toneladas de peso y 290 caballos de potencia, con motor diesel y una cilindrada que alcanza los 6.374 cm3. Cada vehículo tiene doble cabina, con capacidad para cinco bomberos, e incorpora un depósito de agua de 3.000 litros, más otros dos depósitos para espumógeno, uno para 151 litros y el otro para 50.

“La adquisición de estos vehículos supone una importante mejora en las prestaciones de los recursos de nuestros bomberos, así como en las condiciones de seguridad en las que estos trabajan. Además, facilitan el manejo de los profesionales que los utilizan”, explicó Victoria.

Concretamente, las nuevas bombas introducen mejoras en todo lo relacionado con la ergonomía e incorporan una plataforma de trabajo longitudinal completa que permite una maniobrabilidad más rápida, eficaz y, a la vez, segura, del bombero en la intervención. Además, otras novedades son la incorporación de las cajas de cambios automática con retardador incorporado, de cinturones de seguridad de tres puntos; la retirada de los equipos de respiración de la cabina, lo que reduce el riesgo en caso de accidente; la instalación de un asiento específico de seguridad para el acompañante del conductor y la unión de la carrocería y cabina en una única estructura.

También se han instalado de manera novedosa cabinas triples, escaleras de techo con sistemas de descenso, accesibilidad a cabina y carrocería con peldaños escamoteables, sistema de dosificación digital de espumógeno y mayor volumen en cabina y carrocería. El control de producción de los vehículos, que se han fabricado durante el presente año, ha corrido a cargo del propio Cuerpo de Bomberos de la Comunidad de Madrid y del INSIA (Instituto Universitario del Investigación del Automóvil de la Universidad Politécnica de Madrid). Ambos organismos han realizado diversos ensayos sobre la estabilidad dinámica y estática de los vehículos y las prestaciones de mismos.

Además, los bomberos destinados en los parques a los que se asignarán los nuevos vehículos han recibido un curso formativo de 12 horas de duración (24 horas, en el caso de los profesionales que son conductores) para adiestrarse en el manejo de los mismos y, especialmente, de las nuevas aplicaciones. Los nuevos vehículos se incorporan a los parques de bomberos de la Comunidad de Madrid en Alcobendas, Coslada, Alcalá de Henares, Torrejón de Ardoz, Arganda del Rey, Parla, Villaviciosa de Odón, Getafe, Las Rozas, Collado Villalba y Pozuelo de Alarcón.

Las autobombas rurales pesadas son vehículos de emergencia multiuso para todo tipo de intervenciones. Aunque pueden actuar en incendios de vivienda o industriales, su diseño les permite estar especialmente capacitadas para trabajos frente a fuegos de vegetación y agrícolas y para el tránsito por caminos rurales y forestales. En cada parque se cuenta con al menos uno de estos vehículos dispuestos a intervenir en cualquier momento como vehículos de primera salida.

El Cuerpo de Bomberos de la Comunidad de Madrid cuenta con una flota de alrededor de 400 vehículos de emergencia. Aunque en su mayoría son autobombas, el catálogo incluye también otros tipos de aplicaciones como son las autoescalas, vehículos de salvamento, furgones de iluminación, equipos de achique, material NBQ (nuclear, bacteriológico y químico) y hasta barcas para el salvamento acuático entre otros.