Le abordó en un parque y le apuntó con un arma simulada
El 6 de septiembre, en un parque de Torrejón de Ardoz, se produjo un incidente violento relacionado con un enfrentamiento entre grupos organizados juveniles rivales, específicamente entre los DDP (Dominican Don't Play). Este tipo de confrontaciones son comunes entre bandas que buscan establecer territorios o resolver disputas. El suceso tuvo lugar alrededor de las 11:00 horas, cuando un individuo disparó contra un joven que se encontraba sentado en un banco del parque.
El atacante utilizó un arma detonadora que tenía una apariencia similar a un arma de fuego real. Desde una distancia aproximada de diez metros, el agresor realizó una primera detonación. Sin embargo, al intentar realizar un segundo disparo, el arma se encasquilló, lo que le obligó a huir rápidamente del lugar.
Al llegar al parque, los agentes de la Policía Nacional se encontraron con la víctima, quien se mostró poco colaborativa. A pesar de ser un testigo clave, el joven no proporcionó muchos detalles sobre el incidente. Su versión de los hechos fue considerada poco verosímil y, además, manifestó su deseo de no presentar una denuncia formal.
A pesar de la falta de cooperación de la víctima, los investigadores de la Jefatura Superior de Policía de Madrid iniciaron una investigación para esclarecer lo sucedido. Uno de los principales desafíos fue determinar si el arma utilizada en el ataque era real o simplemente una réplica. A través de las pesquisas realizadas, los investigadores lograron identificar al presunto autor del disparo, quien resultó ser un miembro de los DDP.
El sospechoso fue detenido el 17 de septiembre y posteriormente fue puesto a disposición judicial. En este proceso, se le imputó un delito de amenazas, dado que el uso del arma, aunque no era real, generó un ambiente de peligro y temor. Durante la investigación, la Policía logró recuperar el arma utilizada en el ataque. Se confirmó que no se trataba de un arma de fuego real, sino de un dispositivo detonador de alarma y señales, lo que subraya la naturaleza del ataque y la intención del agresor de intimidar a la víctima. |