Además de los delitos de violación y secuestro, al detenido se le imputa otro de maltrato animal

Poco a poco se van conociendo más datos sobre lo ocurrido en el zulo de Pezuela de donde consiguió escapar una mujer tras ser retenida y violada en su interior. Así, la investigación desvelaba que el Seprona rescató a diez perros, uno de ellos muerto, en la ya bautizada como "finca de los horrores".

Tras ser rescatados, los animales fueron trasladados a dependencias de la Comunidad de Madrid, mientras que el hombre, apodado "El Puma", era puesto a disposición judicial e ingresaba en prisión para hacer frente a la acusación de los delitos de agresión sexual, detención ilegal, lesiones, y malos tratos físicos, psicológicos y contra la integridad moral; además de un delito de maltrato animal.