Según Consuelo, María llevaba quince años “armando jaleo”

Ayer se celebraba la vista oral del juicio contra Consuelo, vecina del barrio de Las Fronteras de Torrejón, acusada de intento de homicidio contra su vecina hace dos años. En el escrito de acusación parecía clara la agresión, pero ambas partes afirmaban ante el juez “no recordar” la existencia de cuchillos en el suceso.

Según relataba Consuelo, María llevaba quince años “amargándole la existencia”. La acusada afirmaba que su vecina armaba jaleo y no le dejaba dormir, por lo que el día de autos, el 29 de marzo de 2009, y tras una discusión a través de la ventana, María fue a casa de Consuelo, donde la vecina la zarandeó y empezaron una discusión. María, por su parte contaba que la pelea se produjo cuando bajaba a una reunión de vecinos. Consuelo abrió la puerta y ambas se dijeron “tonterías”, se enzarzaron y se pegaron.

Ninguna de las dos vecinas recuerda nada de lo sucedido en los minutos siguientes. María solo recuerda caer inconsciente al suelo para después levantarse y bajar a la reunión, donde el resto de vecinos notaron que tenía sangre y llamó a una ambulancia. Consuelo afirmaba que solo recuerda gritos y jaleo.

El fiscal, sin embargo sí hablaba de cuchillos. Para el representante del Estado Consuelo gritó a su vecina que la iba a matar, tras lo que le asestó tres puñaladas: una en el abdomen, otra en el hombro, y otra justo encima del pecho izquierdo, heridas que, según el forense, no revestían gravedad, pero si la trayectoria hubiera sido otra y la herida más profunda, podrían haber matado a María.

Por último los psiquiatras que trataron a Consuelo afirmaron en la vista que la acusada sufre epilepsia y un trastorno ansioso depresivo. Consuelo se enfrenta a la petición de ocho años de cárcel por un delito de homicidio en grado de tentativa.