Cinco policías resultaron heridos antes de detenerlo

El pasado jueves Torrejón vivió una persecución de película por sus calles, y es que lo que comenzó como un robo en el aparcamiento del LIDL de la carretera de Loeches, terminó en un enfrentamiento directo con la Policía que dejaba cinco agentes heridos tras embestir el presunto ladrón en su huída cinco coches patrulla antes de ser capturado en Loeches.

El robo tuvo lugar alrededor de las 21:12 horas, cuando un hombre sustrajo un bolso de una víctima en el aparcamiento del Lidl ubicado en la Carretera de Loeches. La víctima, tras darse cuenta del robo, se comunicó inmediatamente con la Policía Local, proporcionando una descripción detallada del vehículo utilizado por el ladrón. El ladrón fue identificado como el conductor de un Volkswagen Touareg de color azul. Esta información fue crucial para que los agentes pudieran localizar al sospechoso poco después del robo.

Los agentes de policía localizaron el vehículo en la calle Circunvalación. Al intentar detener al ladrón, este aceleró y comenzó una fuga que se extendió por diversas calles de Torrejón, continuando posteriormente por la M-206 en dirección a Loeches. Durante la persecución, el conductor del Volkswagen Touareg llevó a cabo maniobras extremadamente peligrosas, invadiendo el carril contrario y obligando a otros vehículos a apartarse para evitar colisiones. En un momento crítico, estuvo a punto de chocar con un camión en una curva con poca visibilidad, lo que incrementó el riesgo de accidentes en la vía.

El ladrón embistió hasta cinco coches patrulla que intentaban cortarle el paso. Ante la gravedad de la situación y el riesgo que representaba para otros conductores, los agentes decidieron disparar a los neumáticos del vehículo en un intento de detenerlo. A pesar de los daños sufridos, el sospechoso continuó su intento de fuga. Finalmente, el ladrón fue reducido y detenido poco después de la intensa persecución. En el interior del vehículo, la policía recuperó los objetos robados, que incluían documentación, efectos personales y un teléfono móvil valorado en 500 euros.

Tras su arresto, el detenido recibió atención por parte de los servicios sanitarios y fue trasladado al cuartel de la Guardia Civil de Villalbilla. Posteriormente, fue puesto a disposición judicial, donde se determinarán las acciones legales pertinentes en su contra. El incidente dejó un saldo de cinco policías heridos y causó daños en cinco vehículos policiales. Este aspecto resalta no solo la peligrosidad del acto delictivo, sino también las repercusiones que tuvo en la seguridad de los agentes y en la infraestructura vehicular.