El español cortó tres orejas, y los portugueses, dos cada uno

La Feria de Torrejón terminaba ayer con la corrida de rejones, una tarde que reunía en la Plaza de Toros a Joao Moura, Rui Fernandes y Roberto Armendáriz. Y la tarde no fue mal: los tres jinetes salieron a hombros de la Plaza con dos orejas, si bien Armendáriz se convertía en el gran triunfador de la tarde, al cortar una más que sus compañeros.

La lidia comenzaba con Rui Fernandes, que volvía a Torrejón con la intención de revalidar viejos triunfos, pero la cosa no empezó bien: el primer toro no dio demasiado juego al torero, ni tampoco a unos caballos que se encabritaron en un momento dado. Al final, el desastre se consumaba al clavar el rejón de muerte: el toro caía fulminado al sentir el hierro, lo que servía al portugués para irse de vacío.

En su segundo toro Fernandes tenía que arriesgar, y lo hizo: mas cabriolas, quiebros y juego con el toro fueron despertando a un público muy frio en su primera aparición, que estalló en aplausos al verle clavar rosas al astado. La cosa pintaba bien, y se confirmó en el tercio de muerte. El rejón entró perfectamente y el toro cayó dando al portugués dos orejas.

Joao Moura, ya habitual en las tardes de rejones de Torrejón, volvía a demostrar por qué. En su primer toro no acabó de enganchar al público, lo que le costó quedarse sin premio; pero en el segundo salió a por todas y clavó seis banderillas pequeñas consiguiendo dos orejas que le abrían la puerta grande.

En la primera mitad de la corrida sólo Roberto Armendáriz supo despertar al público que casi llenaba por completo la Plaza de Toros de Torrejón. Y es que el frío se hizo sentir dentro y fuera del ruedo. El único español de la terna, debutante en la Plaza de Torrejón, ponía al público en pie con una espectacular faena en la que tuvieron mucha importancia los dos preciosos caballos que utilizó, “Grano de Oro” y “Polvorilla”, que no tuvieron problema en acercarse mucho al astado. La faena terminaba con un rejón de muerte perfectamente colocado que le daba la Puerta Grande, y que vivía su momento más curioso cuando el caballo se agachó a morder al toro moribundo.

Ya sin tensión, Armendáriz buscó el más difícil todavía: recibió a su segundo astado a porta gayola con el caballo en un lance muy poco habitual en el toreo de rejones. Sin embargo esta vez los rejones no quisieron colaborar para llevar a Roberto a la gloria, desluciendo gran parte del trabajo con los caballos. Por si fuera poco, el rejón de muerte tampoco entró como se esperaba, y Armendáriz utilizó hasta tres intentos para clavarlo y un descabello, lo que, no obstante, le dio una oreja más para su palmarés.

Con esta corrida terminaba la Feria Taurina de las Fiestas de Torrejón 2013, y lo hacía con un balance de diecinueve orejas y ocho puertas grandes para los nueve participantes de la Feria. Tan sólo el torrejonero Rafael de Julia se quedaba sin salir por la puerta de la Plaza de Toros a pesar de conseguir una oreja, mientras que el resultado más habitual ha sido dos orejas cortadas (El Cordobés, El Fandi, El Capea, Daniel Luque, Rui Fernandes y Joao Moura). Roberto Armendáriz cortó tres orejas y el gran triunfador de la Feria fue el novillero torrejonero Gonzalo Caballero, con cuatro trofeos.