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09 Oct 2024 |
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El General Pablo Guillén visitó la localidad para ofrecerlo y homenajear al Teniente Estrada"Menuda semana hemos vivido", decía el sacerdote de la San Juan Evangelista en su homilía, y no le falta razón: una novena que comenzó con un emotivo homenaje a Luisi, el Rosario de la Aurora, la misa por la beatificación de Isabel la Católica, la ofrenda floral, la Solemne Salve, la Misa Mayor en honor a la Patrona, y la Procesión de fin de Fiestas, y todo esto antes de la celebración del Día de la Virgen del Rosario. Y es que el verdadero cierre de las Patronales se producía unas horas después de la Procesión en honor de la Patrona en una misa especial en la que la Hermandad del Rosario recordó a sus hermanos fallecidos, celebró la ceremonia del Cambio de Varas e impuso el fajín de General de División a la Virgen. Así, en una tarde mucho menos apacible que la del día anterior, los torrejoneros volvían a reunirse en la San Juan Evangelista, y lo hacían para celebrar una misa del día de la Virgen del Rosario cargada de momentos. Con el recuerdo de sus fallecidos se iniciaba una ceremonia en la que se produjo el relevo de Hermanos Mayores durante una emotiva ceremonia de Cambio de Varas en que los Hermanos Mayores salientes entregaron las varas y las medallas a sus sucesores en el cargo. La Presidenta, Cristina Vidales, menos emocionada que en la noche anterior, despedía las Fiestas volviendo a agradecer a todos los que las han hecho posible en un discurso parecido al que cerró la Procesión unas horas antes. Pero el momento principal, por el hecho de ser un acontecimiento histórico, se produciría al final de la ceremonia. El General Pablo Guillén regresaba a Torrejón tres años y medio después de imponer el fajín de General a la Virgen del Rosario durante la celebración del 300 aniversario, y lo hacía porque, al haber ascendido a la categoría de General de División, también la Virgen del Rosario debía recibir el nuevo fajín. Guillén, tras ofrecer el fajín y las presillas del cargo, subía al ambón para ofrecer un discurso en el que, por supuesto, recordó al Teniente Estrada, fallecido el pasado viernes tras caerse su F-18 en un pueblo de Teruel. El General en una parroquia en la que los Hermanos del Rosario compartieron bancada con militares de alto rango, recordó la conmoción que ha provocado en el Ejército la muerte del jefe de los F 18 de la Base, que también fue protagonista del Homenaje a la Bandera del día anterior, y del celebrado en la Base con motivo del aniversario de la UME esa misma mañana. Y tras el Homenaje tocaba "ascender" a la Virgen, para lo que se colocó en su manto una de las presillas del General como representación simbólica el nuevo estatus de la Patrona. La celebración terminaba, como manda la tradición, entonando la Salve en honor a la Virgen, que ponía el cierre definitivo a unas largas Fiestas Patronales.
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