 También se habló del Caso Yusta y se dio luz verde a la reparcelación de la finca que acogerá el Centro de Salud de Barrio Verde
Una vez más un Pleno en Torrejón terminaba de forma muy polémica ayer, y es que la oposición criticaba con dureza la campaña de Pulseras Solidarias puesta en marcha por el Ayuntamiento para conseguir desfibriladores para los centros deportivos y convertirse en Ciudad por la Cardioprotección.
“su perversa lógica neoliberal está retorciendo y cambiando los conceptos y es la propia administración la que hace la competencia a las entidades sociales”, afirmaba la moción presentada por el PSOE. El PP presentaba, por su parte, una enmienda a la totalidad en que mostraba su apoyo a la campaña y se lamentaba porque los dos partidos de la oposición no apoyasen la iniciativa, que salía adelante con la abstención de PSOE e IU.
“El Gobierno local lamenta que PSOE e IU no apoyen esta iniciativa con un fin tan justo como lógico a pesar de que cuando gobernaron no instalaron ni uno sólo de estos equipamientos sanitarios, mientras que el Gobierno de Pedro Rollán cumplió su promesa electoral en 2008 e instaló desfibriladores en todas las instalaciones deportivas de la ciudad. De hecho, en la actualidad ya son 10 los desfibriladores existentes. La experiencia nos ha demostrado que estos equipos permiten salvar vidas y no entendemos como PSOE e IU se oponen a esta campaña voluntaria, que permitirá extender la red de desfibriladores de la ciudad, salvando más vidas como recientemente ha ocurrido en una de las piscinas de nuestra ciudad”, afirmaba José Luis Navarro, portavoz del PP local.
Sin embargo, el Pleno comenzaba con otro tono completamente distinto: en una moción del Concejal de Urbanismo que salía adelante sin debate, y con la abstención de los dos partidos de la oposición, se aprobaba la transformación de la calificación jurídica de una parcela en Barrio Verde, parcela que, tras este trámite, queda afecta al dominio público, y podrá destinarse a la construcción del Centro de Salud Barrio Verde, junto al José Antonio Paraíso.
Ya en la segunda parte, IU veía como sus cuatro mociones acababan con el mismo resultado: voto negativo del PP y positivo de los partidos en la oposición municipal. Así, el Pleno de Torrejón tumbaba mociones contra el Programa de Recualificación Profesional de Desempleados, el recorte en las becas a científicos, los criterios puestos en marcha por el INEM para seleccionar ofertas de trabajo, y a favor de la creación de un Fondo de Estudiantes para hacer frente a los costes de las tasas universitarias.
“Nosotros no estamos de acuerdo con que el INEM priorice a los trabajadores que están cobrando subsidio a la hora de acceder a un trabajo. Yo creo que sería mas urgente atender a los que llevan más de un año sin cobrar ningún subsidio de desempleo, familias enteras, pero en lugar de eso prefieren coger gente voluntaria del paro para que trabajen en las instituciones, algo que, creemos, puede ser inconstitucional. Además hemos pedido que se habilite un fondo de rescate para estudiantes que, al no poder pagar las tasas, se van a quedar fuera del sistema. También pedimos que se amplíen las becas de investigación para evitar que los jóvenes investigadores tengan que marcharse al exterior, algo que para el Partido Popular es símbolo de optimismo”, explicaba José Fernández, portavoz de IU en el Ayuntamiento.
Además de los desfibriladores, el PSOE llevaba a Pleno dos mociones más de carácter muy polémico, que terminaban con el mismo resultado: aprobación de una enmienda popular con el voto negativo del PSOE y la abstención de IU. Los asuntos llevados por los socialistas eran viejos conocidos: la piscina de Yusta y el fraccionamiento de contratos, asuntos que ya habían estado en el Pleno anterior. Sobre el primer asunto, los socialistas volvían a pedir la dimisión del concejal, si bien el mismísimo Departamento de Disciplina Urbanística explicaba lo ocurrido: según afirmaban, "con motivo de un nuevo censo de piscinas se realizó una inspección sobre inmuebles construidos en los últimos quince años, en el que se detectaron algunas irregularidades, entre ellas, que la piscina del concejal se había construido sin licencia hace doce años". Según el Departamento, "el proceso continuaba instando a los propietarios a regularizar la situación, algo que ha sucedido con la mayoría de ellos, incluido el Concejal". Al llevar más de cinco años construida la piscina, la legislación establece la prescripción de la sanción administrativa, si bien, según explicaba José Luis Navarro, “este concejal consideró su obligación moral abonar la sanción como si esta no hubiese caducado”.
Otro Departamento municipal, el de Contratación, respondía a Fouce por sus insinuaciones de fraccionamiento de contratos y “adjudicaciones a dedo” en el Ayuntamiento. Con estilo didáctico, el Informe explica: “Según la Ley de Contratos del Sector Público, se considera contrato menor el contrato de importe inferior a 50.000 euros, cuando se trate de contratos de obras, o 18.000 en el resto de casos. Tan solo cinco de los 1.468 pedidos realizados durante 2013 supera la cantidad de 18.000 euros, de los cuales dos son contratos de obras, cuyo límite es de 50.000 euros, mientras que los otros tres se adjudicaron tras la petición de un mínimo de tres presupuestos”.
No obstante, y a pesar de la guerra, el Pleno terminaba con un sorprendente final: la última moción socialista salía adelante por unanimidad de toda la corporación. La propuesta, presentada con motivo del Día del Orgullo que se celebra mañana, buscaba la elaboración de un programa para la adopción de medidas contra la discriminación por motivos de orientación sexual e identidad de género, y conseguía el beneplácito de los 27 concejales. |
