La entrega se ha realizado en el transcurso de un sentido homenaje organizado por el Ministerio en el que han estado presentes un amplio grupo de familiares y amigos de Lasheras, representantes de las diferentes Administraciones Públicas, destacadas personalidades de la Arqueología, Prehistoria y Museología y compañeros del Museo. Entre los cerca de 250 asistentes quisieron estar presentes el director y los productores de la película ‘Altamira’, Hugh Hudson y Morena Films.

El acto ha comenzado con un vídeo con imágenes del futuro documental ‘El maestro de Altamira’, que se rodó en paralelo al rodaje de la película, editado ex profeso por su director para el homenaje, José Luis López Linares, que también estaba presente.

Muestra a José Antonio Lasheras explicando aspectos formales y científicos del arte de la cueva de Altamira, a la que dedicó toda su vida profesional.

A continuación, se han dado paso a las intervenciones en representación del personal del Museo y del ámbito científico, por personas todas ellas amigas de Lasheras. La ahora directora del Museo y mano derecha del homenajeado en los últimos 16 años, Pilar Fatás, ha conducido el acto y ha realizado una intervención titulada “José Antonio Lasheras, una vida dedicada a Altamira”. Y Carmen de las Heras, administradora del Museo, ha compartido fotos y ha hecho referencia a uno de los últimos trabajos José Antonio, la monografía “Altamira revisitada: investigar para conocer y para difundir”, que se publicará próximamente.

Por su parte, Julio Novo, que fue Consejero Delegado del Consorcio para Altamira durante sus diez años de existencia, ha relacionado la figura del homenajeado con la creación del nuevo Museo de Altamira; y Pedro Saura, Catedrático de Bellas Artes de la UCM y Felipe Criado, Director del Instituto de Ciencias del Patrimonio del CSIC se han referido a los 25 años de amistad y colaboración mantenida con Lasheras.

José Antonio Lasheras (1956–2016) se licenció en Filosofía y Letras, y se inició en la arqueología provincial romana en el Museo de Zaragoza. Posteriormente fue museólogo en la Subdirección de Museos Estatales del Ministerio de Cultura hasta 1990.

En 1991 fue nombrado director del Museo Nacional y Centro de Investigación de Altamira, cargo que ostentó hasta su fallecimiento. Se vinculó de inmediato en la conservación de la cueva original redactando el Plan Museológico, dirigido a la construcción del nuevo Museo de Altamira que incluye la Neocueva, una réplica a escala natural de la cueva y sus pinturas paleolíticas. Su nombre permanecerá inexorablemente unido a Altamira pues fue determinante como impulsor y alma mater, no sólo del proyecto de construcción del Museo, inaugurado en 2001, sino de innumerables proyectos relacionados con la conservación de la cueva original, la investigación y la divulgación del patrimonio.

Autor de numerosas publicaciones científicas y divulgativas sobre arte rupestre, especialmente sobre la cueva de Altamira, de la que era el máximo conocedor. Falleció el 26 de febrero de 2016 a consecuencia de un accidente de tráfico a la altura de la localidad burgalesa de Quintanas.