El inmueble, situado en la calle San Faustino, 23 (con vuelta a la calle Sebastián Francisco, 2) se encontraba desde hacía tiempo vacío y sin uso, por lo que desde la Junta Municipal de San Blas-Canillejas se comenzó a finales del año pasado los trámites para intentar conseguir el edificio para uso de tejido social, “puesto que – según Gómez Lahoz - el distrito tiene una necesidad enorme de este tipo de espacios”. La concejala presidente de San Blas-Canillejas ha señalado que “a los vecinos y vecinas les ilusionó desde el principio la idea, y yo me he implicado personalmente en todo el proceso, entre otras cosas por tratarse de administraciones diferentes, aunque he de señalar que por parte de Delegación del Gobierno y el Ministerio de Economía siempre ha habido buena voluntad”.

Hoy se ha llegado al final de este proceso con un acto simbólico de entrega de llaves que ha tenido lugar este mediodía. Marta Gómez Lahoz ha mostrado su satisfacción señalando que “muy pronto, este edificio será para uso y disfrute de las vecinas y vecinos de San Blas-Canillejas”.