x

Uso de cookies

Utilizamos cookies propias y de terceros para mejorar nuestros servicios y mostrarle publicidad relacionada con sus preferencias mediante el análisis de sus hábitos de navegación.
Si continúa navegando, consideramos que acepta su uso. Puede obtener más información, o bien conocer cómo cambiar la configuración, en nuestra Política de cookies

25
Abr
2020
Sanidad permitirá a la UAH realizar test PCR PDF Imprimir E-mail
Zona Este - Sociedad Alcalá
Compartir en MenéameCompartir en TuentiCompartir en Buzz it!Compartir en FacebookCompartir en Twitter

Foto cedida por CAMEl estudio serológico para saber qué porcentaje de población ha pasado el coronavirus durará, al menos, ocho semanas

Las Comunidades Autónomas prestarán su colaboración y apoyo imprescindible para la realización del Estudio Nacional Epidemiológico de la infección por SARS-CoV2 en España (ENE-COVID), que están ultimando el Ministerio de Sanidad y el Instituto de Salud Carlos III (ISCIII). Así lo han acordado en el Pleno del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud.

Proporcionarán el personal sanitario para la realización del proyecto y serán las encargadas de adecuar la logística del estudio de la forma que se considere más adecuada en cada territorio, garantizando que se cumplen todos los requisitos metodológicos del estudio.El papel de los servicios de Atención Primaria de Salud será especialmente relevante a lo largo de todo el proceso.

Con este estudio, el Ministerio de Sanidad y el ISCIII, dependiente del Ministerio de Ciencia e Innovación, en estrecha colaboración con las Comunidades Autónomas, pretenden estimar el porcentaje de la población española que ha desarrollado anticuerpos frente al nuevo coronavirus SARS-CoV-2 (concepto conocido como seroprevalencia). La información obtenida será de enorme relevancia para la toma de decisiones de salud pública en el conjunto del Estado.

En colaboración con el Instituto Nacional de Estadística (INE), se han seleccionado más de 36.000 hogares españoles, para que la muestra tenga participantes de todos los grupos de edad y localizaciones geográficas. De esta forma, se invitará a participar a un mínimo de 60.000 personas.

El diseño del ENE-COVID, cuya coordinación científica se lleva a cabo en el Centro Nacional de Epidemiología del ISCIII, contempla el estudio de todas las personas que conviven en un mismo domicilio, ya que esto facilita la representatividad de la muestra, y además, puede permitir diferenciar entre las nuevas infecciones que se producen por trasmisión comunitaria y las que se puedan estar produciendo dentro de los hogares. Este diseño está inspirado en las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS) para estudios de seroprevalencia frente al SARS-CoV-2. Además, el ENE-COVID pretende evaluar de forma dinámica la evolución de la epidemia, para lo cual se realizarán varias visitas a los participantes para determinar si desarrollan anticuerpos a lo largo del periodo de estudio.

El muestreo realizado proporciona una muestra representativa a nivel provincial, autonómico y nacional. El tamaño muestral por provincia varía entre 900 personas en las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla y 6.000 personas en Madrid, lo que permite estimar la seroprevalencia de COVID-19 con suficiente precisión en todas las provincias. Se preserva a su vez la proporcionalidad poblacional interprovincial, lo que redundará en una mayor eficiencia en las estimaciones tanto autonómicas como nacionales.

Los participantes en el ENE-COVID responderán a un breve cuestionario y se realizarán pruebas serológicas para determinar si tienen anticuerpos frente al virus. En primer lugar, se les hará un test rápido de determinación de anticuerpos en sangre por inmunocromatografía, que proporciona información para saber si la persona ha estado infectada. Esta prueba se realizará en el propio hogar o en un centro de salud, en función de la evolución de la epidemia y de las circunstancias de cada familia.

La sensibilidad de esta prueba, que sólo requiere de un pinchazo en el dedo, se estima que es superior al 80%, pero esta información relativa a su precisión diagnóstica se ha obtenido en grupos muy concretos de pacientes y se desconoce si puede extrapolarse al conjunto de la población.

Por tanto, para asegurar la fiabilidad de los resultados y aplicar el máximo rigor metodológico, se ha considerado muy recomendable obtener de forma adicional muestras de sangre por venopunción (pinchazo en el brazo) en todos aquellos participantes que den su consentimiento. El análisis de las muestras de suero, liderado por el Centro Nacional de Microbiología, se hará usando técnicas serológicas más sofisticadas y más precisas. Gracias a estas dos pruebas, que combinan diferentes niveles de precisión, se obtendrá una estimación poblacional de la presencia de anticuerpos del virus.

Junto a estos dos estudios serológicos, los participantes en el estudio responderán diferentes preguntas sobre síntomas y posibles fuentes de infección, mediante un cuestionario epidemiológico que se recogerá a través de una aplicación web para facilitar una obtención rápida de la información.

Los hogares han sido seleccionados al azar. Cada uno de ellos recibirá una llamada telefónica para informar a sus residentes sobre los objetivos del estudio ENE-COVID, solicitar su consentimiento y concertar la visita domiciliaria, o la cita en el centro de salud. La participación en el estudio es voluntaria, pero es muy importante la colaboración de todas las personas seleccionadas para que la información del estudio sea una foto real de la situación.

De cada participante se obtendrá la información necesaria para conocer la existencia de un diagnóstico previo de COVID19, la presencia o antecedentes de síntomas compatibles con esta enfermedad y los principales factores de riesgo conocidos.

Se está cuidando especialmente la información ofrecida a los participantes, especialmente en lo referente a la interpretación de los resultados de los test. Entre otras medidas, se pondrá a disposición de los participantes una línea de atención telefónica para resolver dudas, y se contará con un documento de consentimiento informado para cada miembro del hogar, incluyendo uno orientado a menores, para que comprendan en qué consiste su participación.

Además, se ha establecido un programa de formación coordinado por la Escuela Nacional de Sanidad para el personal sanitario que realizará el estudio, y se ha elaborado con un protocolo específico de bioseguridad para proteger la salud del personal que realizará el trabajo de campo y de las personas participantes.

Investigadores del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) han puesto en marcha un estudio genético para identificar el riesgo individual de desarrollar formas graves de COVID-19. Los resultados podrían ayudar a prevenir infecciones graves y a descubrir potenciales tratamientos.

"El objetivo de nuestro estudio es averiguar por qué algunos pacientes infectados con coronavirus (SARS-CoV-2) apenas sufren afectación clínica mientras que otros desarrollan formas muy graves de la enfermedad COVID-19", ha explicado Anna Planas, investigadora del CSIC en el Instituto de Investigaciones Biomédicas de Barcelona (IIBB), que coordina el proyecto INMUGEN. "La edad avanzada y la presencia de enfermedades crónicas aumentan el riesgo de padecer una reacción grave y necesitar ingreso en UCI e incluso de fallecer. No obstante, también hay pacientes más jóvenes sin patologías previas que desarrollan formas muy graves de la enfermedad por motivos actualmente desconocidos. Pensamos que la respuesta podría estar en los genes", ha añadido.

"El proyecto propone estudiar genes de inmunidad innata (que es el sistema de defensas con el que nacemos) para explicar el mayor riesgo de cada persona a desarrollar formas graves de la enfermedad COVID-19", ha señalado Planas.

Existen pequeñas variaciones genéticas en la población normal que pueden determinar una capacidad diferente de las personas para responder a agresiones causadas por ciertas infecciones. "Por ello vamos a estudiar variaciones genéticas enfocándonos a genes de inmunidad innata", ha precisado la investigadora.

"Estudiaremos el ADN de pacientes con infección grave y otros con infección leve. Esperamos que los resultados ayuden a identificar aquellas personas con riesgo de enfermar gravemente, ya que son las que van a necesitar mayor protección. Y también esperamos que nos permitan encontrar dianas moleculares para posibles tratamientos", ha concluido Planas.

Este proyecto está financiado por el CSIC y es un esfuerzo colaborativo de diversos equipos de investigación multidisciplinares. Se obtendrán muestras de pacientes del Hospital Clínic de Barcelona gracias al apoyo y la colaboración de diferentes investigadores y servicios de este hospital. También participa en el proyecto el Dr. Israel Fernández-Cadenas del Hospital de Sant Pau de Barcelona, y los siguientes investigadores del CSIC: Jordi Pérez Tur, del Instituto de Biomedicina de Valencia; Marta López de Diego, del Centro Nacional de Biotecnología (CNB-CSIC); Fuencisla Matesanz, del Instituto de Parasitología y Biomedicina López-Neyra, Granada; Lara Lloret, del Instituto de Física de Cantabria; Ignacio López Cabido, del Centro de Supercomputación de Galicia; y la propia doctora Anna Planas.

El ensayo clínico “Solidarity”, impulsado y coordinado por la Organización Mundial de la Salud (OMS), estudiará la eficacia de cuatro medicamentos en el tratamiento del Covid-19. En este estudio participan 90 países y varios de ellos son hospitales españoles de alta complejidad.

Varios hospitales españoles participan en este ensayo, la inmensa mayoría centros de alta complejidad, El Hospital Universitario Fundación Alcorcón es uno de los pocos hospitales de complejidad media que participa en “Solidarity”, y ya ha iniciado el reclutamiento de pacientes para el ensayo.

Más de 90 países participan de forma solidaria en esta iniciativa que permitirá, además, trasladar conocimiento de los países más desarrollados a aquellos con menos recursos para generarlo, y orientarlos en los tratamientos a aplicar.

El ensayo, un hito en la investigación mundial por sus dimensiones y diseño, permitirá recoger y analizar una gran cantidad de datos en un plazo relativamente breve, lo que se prevé logre acortar en un 80% el tiempo necesario para obtener conclusiones sobre la eficacia de los tratamientos.

Los tratamientos que se incluyen en el ensayo son remdesivir, cloroquina (e hidroxicloroquina), la combinación de lopinavir y ritonavir, y esta misma combinación más interferón beta.

Los pacientes de todo el mundo que acepten participar en el ensayo se distribuirán en cinco grupos de forma aleatoria, y se les asignará uno de estos cuatro tratamientos, o a grupo control.

“Solidarity”, por su gran volumen de participantes, y en el contexto de emergencia mundial, extraerá datos durante su desarrollo, e informará periódicamente de los resultados de los tratamientos. Así, en el plazo de unas semanas la OMS podrá aconsejar, en su caso, el descarte de algunos tratamientos o su ajuste a perfiles concretos de pacientes a lo largo del propio ensayo. No será necesaria su finalización (no tiene fecha prevista de cierre) para ir aplicando sus resultados a la práctica clínica. También participa el Hospital Clinico San Carlos de Madrid, primer hospital de España en participar en este estudio a gran escala.

El Instituto de Salud Carlos III (ISCIII), en coordinación con el Ministerio de Ciencia e Innovación, ha validado en los últimos días a 11 centros de investigación y universidades para que lleven a cabo labores de apoyo en la realización de test de PCR para el diagnóstico de COVID-19, con lo que son ya 24 los laboratorios capacitados desde que se inició este proceso de validación, que continúa abierto.

La suma de todos estos laboratorios permite realizar más de 5.000 PCR diarias, lo que supone un importante refuerzo a la capacidad diagnóstica en España para el manejo del SARS-CoV-2 y del COVID-19. Varios centros más están en fase de capacitación, por lo que esta cifra seguirá creciendo en los próximos días.

Desde que se detectó la necesidad de reforzar la capacidad diagnóstica, el ISCIII lleva a cabo un proceso de análisis y selección para asegurar que los centros colaboradores cumplan con los requisitos de bioseguridad y dispongan del personal y los procedimientos adecuados para poder realizar estas pruebas.

Los 24 laboratorios validados por el ISCIII para colaborar en el diagnóstico por PCR de la COVID-19 corresponden a universidades y centros de investigación biomédicos, militares y veterinarios. Prestan apoyo a los hospitales de su comunidad y, en algunos casos, a universidades, centros de referencia, residencias y Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado.

Los centros ya validados son los siguientes:

  • Universidad de Alcalá de Henares.

  • Centro de Investigación en Sanidad Animal (CISA).

  • Universidad Complutense de Madrid.

  • Centro Militar Veterinario de Madrid.

  • Universidad de León.

  • Laboratorio Regional de Sanidad Animal de León.

  • Centro Biolab-Arcelormittal de I+D de Asturias.

  • Universidad de La Laguna, Universidad de Valladolid.

  • Fundación para el Fomento de la Investigación Sanitaria y Biomédica de la Comunidad Valenciana (FISABIO).

  • Universidad de Castilla-La Mancha.

  • Laboratorio de Identificación Rápida (LABIR) de la Unidad Militar de Emergencias (UME).

  • La Universidad del País Vasco.

  • Instituto de Investigación Sanitaria Marqués de Valdecilla-Universidad de Cantabria.

  • Centro Nacional de Investigaciones Cardiovasculares (CNIC).

  • Instituto de Ciencias de la Salud de Talavera de la Reina.

  • Instituto de Investigación Sanitaria La Fe de Valencia.

  • Centro de Investigación Médica Aplicada (CIMA)-Universidad de Navarra.

  • Instituto de Investigación Biomédica de Salamanca-Universidad de Salamanca-Instituto Mixto USAL-CSIC.

  • Fundación Miguel Servet y Navarra de Servicios de Salud y Tecnologías-Navarrabiomed.

  • Área Científica y Técnica de Investigación (ACTI)-Universidad de Murcia.

  • Instituto de Investigación Sanitaria Biodonostia.

  • Instituto de Biomedicina de Sevilla.

  • Instituto de Estudios Cinegéticos de Ciudad Real.

El proceso de validación de centros se lleva a cabo de la siguiente manera: en primer lugar las comunidades autónomas confirman la necesidad de apoyo diagnóstico; a partir de ese momento, la petición de colaboración parte de los propios centros interesados en colaborar, en coordinación con los gobiernos autonómico y central. Posteriormente, el centro envía su solicitud de capacitación al ISCIII, que analiza los procedimientos de bioseguridad, inactivación, extracción y PCR y, si se cumplen los requisitos, da el visto bueno. Finalmente, son las propias comunidades autónomas quienes activan a los centros y les proporcionan las muestras que necesitan ser analizadas.

Desde el inicio de la pandemia, la comunidad científica ha mostrado un gran interés por colaborar en todos los procesos e iniciativas que permitan mejorar el manejo del virus y la enfermedad. Pese a esta notable predisposición por sumar apoyos, hay que recordar que no todos los centros que se ofrecen reúnen las condiciones necesarias para llevar a cabo esta labor. Por ello, la selección y aprobación de laboratorios se guía siempre según las necesidades identificadas y cumpliendo siempre con los criterios necesarios de seguridad y capacidad.

El aumento de la capacidad ya está permitiendo una mejora de la cobertura de las necesidades diagnósticas. Su labor será aún más relevante a corto y medio plazo, cuando vayan entrando en vigor las medidas de progresiva apertura social y la red de centros sanitarios del Sistema Nacional de Salud necesite apoyos para realizar más estudios diagnósticos entre la población española.

Los requisitos necesarios para que un centro reciba la validación son los siguientes:

  • Disponer de personal formado en técnicas de biología molecular.

  • Tener capacidad para trabajar con muestras infecciosas de nivel 2, cabina de bioseguridad y equipos adecuados.

  • Disponer de capacidad para producir reactivos de inactivación.

  • Manejar técnicas de extracción por medios propios que no resten capacidades a los centros hospitalarios.

  • Poder realizar PCR por medios propios o mediante kits comerciales.

  • Tener personal capacitado para validar informes de análisis clínicos; caso de no disponen de este servicio, la validación la realiza un hospital, personal sanitario o los servicios de salud pública de la comunidad autónoma.

 

Escribir un comentario

Código de seguridad
Refescar