Manu Zapata, navarro de nacimiento, vive en la ciudad complutense, y es uno de los Lobos de Boom

506 programas a sus espaldas, dos años jugando todas las tardes, y dos record Guiness, el de concursantes que mas tiempo han estado concursando de forma ininterrumpida en un programa de televisión y el del premio más alto jamás entregado en un concurso televisivo. Son Los Lobos, auténticas estrellas desde que comenzaron su participación en el programa Boom de Antena 3, y que ayer conseguian, por fin, llevarse un bote de más de cuatro millones de euros.

Pero la sorpresa llegaba justo tras la entrega del premio, pues las cámaras de Antena 3 seguían a Los Lobos en su regreso a la vida cotidiana, y desvelaban uno de los secretos de uno de ellos. Así, Manu Zapata, el más joven del grupo de concursantes que ha revolucionado las tardes de Antena 3, vive en Alcalá, tal y como él mismo contaba en su retorno a la vida normal.

Zapata, nacido en Tafalla, crítico de cine que ha trabajado como ayudante de realización de Gran Hermano, ha sido durante todo el concurso el portavoz de Los Lobos en la bomba final y el encargado, en su última noche de dar la respuesta a la pregunta definitiva: ¿Qué golfo del mar Báltico está situado entre Suecia y Finlandia? El Golfo de Botnia.

Otro de Los Lobos también tiene mucha relación con el Corredor, pues vive y trabaja en Guadalajara. Se trata de Erundino Alonso, un ingeniero de caminos que trabaja como técnico de la delegación de agricultura de la Junta de Comunidades de Castilla La Mancha, y que fue el encargado de ponerle el nombre al grupo, ya que trabaja con lobos en la Sierra Norte de Guadalajara.

Hace un par de semanas se producía la noticia más esperada por los aficionados al programa de las tardes de Antena 3, y por eso la cadena se volcaba con la despedida de Los Lobos, con un programa especial que se trasladó al prime time para darle la categoría de evento histórico que tenía.

Así terminaba un largo viaje de dos años en que cuatro amigos que se conocieron en otro programa de televisión, “Saber y Ganar”, decidían asaltar el programa buscando alzarse con un más que suculento bote. El encargado de dar el salto era Valentin Ferrero, profesor asociado de la Universidad de Alicante que cobraba 250 euros al mes y al que, al detectársele un cáncer, empezaron a no salirle las cuentas.

Ferrero entró en contacto con alguno de los mejores concursantes del programa de La 2, buscando crear un equipo capaz de desactivar todas las bombas de Antena 3. Y asi fue, Valentín Ferrero, Manu Zapata, Erundino Alonso y José Pinto comenzaban el 16 de mayo de 2017 un viaje en el que no todo han sido alegrías. Tras pasar más de un año concursando, José Pinto, un ganadero salmantino, decidía abandonar el juego para volver a cuidar de sus animales, siendo sustituído por una auténtica eminencia de los concursos televisivos, el ubetense Alberto Sanfrutos, primer “magnífico” (concursantes que superan los seis mil euros ganados) de “Saber y Ganar”.

El recién reconfigurado grupo recibía un durísimo palo a las pocas semanas, pues Pinto fallecía de forma repentina. Tras lo ocurrido el grupo se planteó abandonar el concurso, pero decidieron continuar para ganar el bote y ofrecérselo en homenaje al “quinto lobo”.

Con la llegada de Sanfrutos comenzaron a hacer historia: el programa 400, el récord Guiness a los concursantes más longevos, el programa 500.... y en el 505, la sorpresa. Tras estar a punto de quedar eliminados, los errores de sus rivales les llevaban directos a la prueba final, convertida en un auténtico paseo militar en el que no fallaron una sola pregunta para llevarse el bote más alto de la historia.

En concreto, Los Lobos se repartirán 6.689.700 euros entre el bote y lo ganado a lo largo de los dos años que llevaban concursando, si bien el 47% irá a parar a las arcas de Hacienda. Eso sí, lo que nadie les podrá quitar son los dos años vividos entrando cada tarde en las casas de los españoles y el haberse convertido en historia de la televisión, al haber pulverizado el premio de cinco millones de euros que entregó la versión holandesa de "Allá Tú" en 2001, y que hasta ahora era el premio más alto jamás entregado.