Los restos incorruptos del santo fueron expuestos en la Magistral

El alcalde de Alcalá de Henares, Bartolomé González, asistió el domingo a la misa celebrada en la Catedral Magistral con motivo de la festividad de San Diego de Alcalá; como es tradición, la urna que contiene los restos incorruptos del santo fue abierta y expuesta para recibir la visita de cientos de vecinos complutenses.

Y es que Fray Diego, al que se considera patrón de los legos franciscanos, murió en la localidad complutense, convirtiendo su cuerpo incorrupto en una importante reliquia cotizada por los feligreses de medio mundo. Cuenta la leyenda que el propio Felipe II ordenó llevar la momia del santo hasta el Palacio Real para intentar curar a su hijo Carlos que se había golpeado en la cabeza tras caerse por las escaleras.

No se sabe si por la momia, que durmió con el príncipe, o por la trepanación que le realizó Vesalio, pero lo cierto es que Carlos de Austria consiguió sobrevivir al terrible accidente.