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22 Dic 2011 |
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(Artículo publicado en diciembre de 2010)La localidad agraciada fue Torrejón, allá por 1988, hace veintidos añosEl premio Gordo de la Lotería de Navidad, ese que promete tres millones de euros, y que viene acompañado de un soniquete inconfundible, solo ha tocado en una ocasión en el Corredor del Henares, concretamente, en Torrejón de Ardoz, allá por el año 1988, y en un sorteo en que Alcalá de Henares se quedó integramente con el segundo premio. A pesar de que Madrid es la provincia donde más veces ha tocado el primer premio de la Lotería de Navidad, la suerte es esquiva al Corredor del Henares. En la capital el premio grande de la Navidad ha caido en 72 ocasiones, mientras que la provincia ha recibido seis gordos: en Alcorcón, Aranjuez, Fuenlabrada, Parla, san Sebastián de los Reyes, y el gordo del año 1988. Tan sólo en una ocasión ha tocado el Gordo en la zona Este de Madrid. Fue en 1988, concretamente, un 22 de diciembre, cuando, a las once de la mañana y cuarenta y un minutos, veinte minutos antes del final del sorteo, dos niños, Raúl Ávila Moreno, y Oscar Paje García, sacaban un número que cambiaría la vida de mucha gente. El 21583 dejaba veinte series del Gordo en Torrejón, que por aquel entonces era un premio de 250 millones de pesetas al número. En total, se quedaron en Torrejón unos cinco mil millones de pesetas. El número premiado con la suerte se vendió en la Administración número 2, situada en la Galería Comercial del Parque Orbasa; y desde allí se repartió por toda la localidad.Una carnicería, propiedad de Armando Mantecón, se encargó de repartir tres mil participaciones de cien pesetas de la época; participaciones que se llevarían un millon de pesetas cada una. En total, la carnicería repartió doce series del gordo, y un premio de, aproximadamente, cuatro mil millones de pesetas. El carnicero, que se quedó con cien millones de pesetas , nada mas enterarse de la noticia comenzó a repartir el género entre los clientes. Además del Parque Orbasa, la suerte también llegó de las manos de otros niños, los que acudían al Colegio Miguel de Cervantes, que repartieron otras ocho series del número premiado. en total, Torrejón se quedó con cinco mil millones de pesetas, unos treinta millones de euros de hace veinte años, una cantidad nada despreciable si tenemos en cuenta que los pisos, por ejemplo, costaban unas 250.000 pesetas. Pero no fue la única localidad tocada por la varita mágica de la suerte hace veintidos años. En el mismo sorteo otro número, el 32694, se llevaba el segundo premio, un premio vendido intégramente en Alcalá de Henares. Sucedía en la cuarta tabla del sorteo, una tabla que fue testigo de una curiosa anécdota: al niño encargado de cantar la tabla, Jesús Rodríguez, se le rompió la voz, y tanto él como su compañero, Fernando Gómez-Escalonilla, fueron sustituidos. A los pocos minutos, eran las diez y media, los nuevos cantores entregaban a Alcalá un premio que cambiaria la vida de la localidad. El premio, agraciado con 120 millones de pesetas dejó en la localidad complutense la friolera de ocho mil quinientos millones de pesetas, dinero que llegaba desde la Administración número 8, que llevaba abierta sólo trece meses. Quizás por eso de la novatada, el lotero no se quedó con nada de ese segundo premio que tiñó Alcalá de amarillo. La mayor parte, cuarenta de las 72 series que, por aquel entonces, componían un número completo, fueron repartidas por los integrantes del Club deportivo Avance, un club con enorme tradición en Alcalá, y al que la suerte de la lotería salvó de una situación muy complicada en que se encontraba: el ayuntamiento alcalaíno habia decidido meses antes que fueran ellos los encargados de la gestión de la Escuela de Fútbol del municipio, gasto al que el Club sentía que no podría hacer frente. Pero el 22 de diciembre todo cambia, pues el club reparte la friolera de cuatro mil ochocientos millones de pesetas entre los habitantes del barrio de Casablanca. El resto de series se reparten entre un quiosco de prensa y los bares El Cordobés y Santa Mónica, todo el número en participaciones de doscientas cincuenta y quinientas pesetas.La propietaria de el Cordobés, que sólo llevaba seis meses al frente del establecimiento fue una de las que más se llevó de este "gordito", como se llamaba en la época al segundo premio. En total, 13.500 millones de pesetas vinieron al Corredor en un día de Diciembre de 1988. Esperemos que hoy, veintidós años despues, los niños de San Ildelfonso vuelvan a teñir de amarillo las calles de las localidades. |