Sospechan que tras el nuevo ERE se esconde una estrategia de deslocalización

El despido de trabajadores de Roca no solo afecta a la planta de Alcalá de Henares, sino que gran parte de sus efectos se verán en otra Alcalá, la sevillana Alcalá de Guadaira. Por eso, y en el convencimiento de que la unión hace la fuerza, los políticos de ambos municipios han decidido colaborar y emprender acciones conjuntas.

Si el miércoles era Javier Bello el que informaba de la intención de formar un bloque con el alcalde de Alcalá de Guadaira, ayer eran las Agrupaciones de IU las que enviaban un comunicado conjunto en el que se oponen al cierre de las fábricas, y es que, según afirman, las razones del cierre no tienen nada que ver con la situación económica de la compañía.

COMUNICADO CONJUNTO DE LAS ASAMBLEAS DE IU EN ALCALÁ DE HENARES Y ALCALÁ DE GUADAÍRA EMITIDO EL 18 DE DICIEMBRE SOBRE EL CIERRE DE LAS PLANTAS DE ROCA SANITARIO

“Desde las asambleas locales de Izquierda Unida en Alcalá de Guadaíra en Sevilla y Alcalá de Henares en Madrid, queremos denunciar el indecente ataque a los trabajadores de nuestras localidades que la empresa Roca Sanitario pretende llevar a cabo”.

Ya denunciamos en 2010 cuando la empresa aprovechó la crisis económica para la presentación del Expediente de Regulación de Empleo, que era inadmisible su aprobación, pues hablábamos de una multinacional que había facturado en los últimos cuatro años 2.800 millones de Euros, y que además pretendía deslocalizar la producción llevándosela al extranjero, como ahora se demuestra.

Por aquellos tiempos era el Ministerio de Trabajo dirigido por el PSOE quien debía aprobar o rechazar el ERE, y como no podía ser de otro modo, el ERE fue refrendado por el Ministro Celestino Corbacho.

Para aprobar el Expediente de Regulación de Empleo, el Ministerio se basó en un informe, al que tuvo acceso Izquierda Unida, elaborado por el propio Ministerio, donde se afirmaba textualmente que "no queda claro que la empresa pretenda deslocalizar la producción", pese a que se sabía, porque así lo denunciamos en repetidas ocasiones, que Roca Sanitario estaba adquiriendo instalaciones en países como Marruecos o Portugal, y ejecutando la compra de grupos extranjeros dedicados a la misma producción como el caso de la suiza Keramik Holding Ag Laufen, la polaca Roca Polska SP ZOO o la asociación con el grupo de inversión tailandés Karat Sanitari Ware.

Gracias al mencionado ERE, se facilitó el despido de 629 trabajadores de las tres plantas que el grupo Roca tiene en todo el país, de manera traumática y no facilitando que los trabajadores saliesen de la empresa de forma voluntaria.

Tras el ERE, vino un segundo golpe a los trabajadores en octubre de 2011, un Expediente de Regulación Temporal de Empleo que duraría teóricamente desde el 1 de enero de 2012 hasta el 6 de enero de 2013. Y en esta ocasión volvimos a repetir que la empresa sólo buscaba la deslocalización para llevarse las fábricas a países donde la mano de obra es mucho más barata que en España. Como denunciara un sindicato: "tenemos la experiencia de que la empresa con la firma de la parte social, sólo busca la complicidad en sus argumentos con vistas a futuras agresiones", como así ha sido.

El 18 de diciembre de 2012, amanecíamos con la noticia de que la empresa de fabricación de sanitarios Roca despedirá a un total de 486 trabajadores cerrando sus plantas de Alcalá de Guadaira (Sevilla) y cesando cerca del 70% de la actividad del centro de Alcalá de Henares (Madrid), como consecuencia, según ellos, del hundimiento del sector de la construcción y la crisis económica.

Desde las asambleas locales de Izquierda Unida en Alcalá de Henares y Alcalá de Guadaíra hacemos ver que vuelve a quedar de manifiesto la mala fe de la multinacional Roca Sanitario al mentir en las causas del cierre. Roca es una compañía que sigue generando ingentes beneficios para sus dueños, y su obstinada determinación en deslocalizar la producción hacia Marruecos y Portugal no responde a otra causa que multiplicar los beneficios a costa de aumentar la explotación y de arrojar a cientos de familias a la precariedad y al desempleo.

Por todo lo expresado, desde las asambleas locales afirmamos nuestro más rotundo rechazo a esta nueva agresión a los trabajadores de Alcalá de Henares y Alcalá de Guadaíra, y manifestamos nuestra decisión a oponernos frontalmente a ellas con todas nuestras fuerzas. Así mismo mostramos toda nuestra solidaridad y nuestra reiteración en el apoyo que desde nuestra organización venimos mostrando a los trabajadores y trabajadoras de Roca Sanitario tanto de Alcalá de Guadaíra como en Alcalá de Henares, y nuestra solidaridad con las familias afectadas que están sufriendo la situación más directamente, y afirmar que siempre tendrán a Izquierda Unida de su lado.

En Alcalá de Henares (Madrid) y Alcalá de Guadaíra (Sevilla) a 18 de Diciembre de 2012.