25
Abr
2013
Juan Barranco participó en la presentación de Operación Chamartín Imprimir
Otras Noticias - Comunidad de Madrid
Compartir en MenéameCompartir en TuentiCompartir en Buzz it!Compartir en FacebookCompartir en Twitter

Foto cedida por PSMEl libro es obra de Jesús Espelosín

El presidente del PSM y diputado en la Asamblea de Madrid Juan Barranco, ha presentado el libro “Operación Chamartín”, de Jesús Espelosín, concejal del primer gobierno municipal de Tierno Galván, y que narra el auge, la caída y el fracaso de lo que él llama “pelotazo urbanístico-inmobiliario en Madrid a costa de la expropiación de unos terrenos”.

Espelosín achaca a “la ingenuidad de unos políticos, la desvergüenza de otros y la colaboración necesaria de legisladores, jurídicos, funcionarios varios y medios de comunicación” el que unos terrenos, “expropiados en su día para construir unas instalaciones ferroviarias, públicas, se fueran a convertir en un negocio inmobiliario, privado”.

En la presentación Barranco ha destacado que "en estos momentos el debate de la ciudad está fuera de las preocupaciones intelectuales y de las preocupaciones de la ciudadanía y ha expresado vivimos unos tiempos en los que nadie explica nada".

Barranco se ha referido al "Madrid de excelencia que nos vendió Gallardón a bombo y platillo y de cuyos proyectos no se sabe nada como  la operación Campamento, el Eje Prado Recoletos, la Ciudad de la Justicia, el túnel por debajo de la calle Serrano, operación de rehabilitación de todas las orillas de Madrid Río, los cuarteles de Villaverde, el proyecto de la Gran Vía, el Centro de Convenciones, era el Madrid”

Además en declaraciones a los medios el presidente del PSM, Juan Barranco ha denunciado los "cientos de millones de euros que se han invertido en proyectos con arquitectos famosos en publicidad en propaganda y ha finalizado expresando su agradecimiento al autor del libro Espolosín por relatar lo ocurrido en este desierto de debates es de agradecer que alguien se haya acordado de la “operación Chamartín” .

Por último Juan Barranco ha recordado que la Operación Chamartín, llamada también prolongación de la Castellana, se presentó como la "operación urbanística más importante de toda Europa se decía que iba a mover un volumen de más de 500.000 mil millones de pesetas 85.000 mil puestos de trabajo como la operación de EuroVegas", ha ironizado Barranco “siempre se utiliza los mismos señuelos”, “veinte años después no hay nada es decir la montaña pario un ratón”, ha finalizado.

"La ambición desmedida, la falta de liderazgo y la suma de intereses y afanes especulativos y codicia, fueron las causas de que una de las operaciones más importantes de Madrid redundara en un completo fracaso, tras 20 años de especulaciones que sólo se han traducido en un proyecto que no ha temido ni una sola realización urbanística".

Con ácido sentido del humor, el antiguo concejal narra cómo se convirtió personalmente en la bestia negra de las Administraciones del PP. El entonces presidente de la Comunidad de Madrid, Alberto Ruiz Gallardón llegó a afirmar en sede parlamentaria que el único problema existente para sacar adelante la Operación Chamartín, se llamaba Jesús Espelosín. Sin embargo, Espelosín sólo representaba a una pequeña parte de los herederos de las familias expropiadas.

Con numerosos datos, citas y pruebas, el libro desmonta los argumentos de quienes buscaron, por encima de todo, el enriquecimiento rápido. El autor reflexiona sobre las razones que han llevado a la paralización del proyecto: “Parece tan difícil no haber conseguido sacar adelante la Operación Chamartín en veinte años que da que pensar en que DUCH ha encontrado el camino perfecto para no ejecutarla, de manera tal que, con cualquier cosa que hubieran hecho distinta, podrían haberla llevado adelante en unos momentos, los de la hinchazón de la burbuja inmobiliaria, en los que cualquiera era capaz de desarrollar una promoción de inmuebles”.

Espelosín se pregunta "por qué la Constructora San José no ha sacado adelante la operación". Y señala dos posibilidades: "o estaba en la misma idea de especular con el suelo hasta que alcanzara un valor suficiente o bien, como socio minoritario, ha tenido que ir siempre a remolque de lo que decidiera el BBVA, socio mayoritario de DUCH".

En sus conclusiones se señala que el suelo no urbano, es decir, el suelo que hay que urbanizar, no tiene, en este momento, ningún valor ya que no hay demanda alguna para el mismo y, por consiguiente, si forma parte de los activos contables de una entidad bancaria, debe ser aprovisionado su valor de adquisición, su valor como garantía o el valor del préstamo que se haya hecho a un tercero para su adquisición.

El suelo del recinto ferroviario de Chamartín, concluye Espelosín, “no tiene el valor previsto ni existe, por tanto, ninguna posibilidad, ahora, de financiar ese proyecto con su configuración actual, y no sé si con alguna otra en muchos años. La realidad, pues, es la que es: a pesar de los intentos de tanta gente porque BBVA diera el tan deseado pelotazo y quizás porque la impericia de los responsables ha compensado las ganas de colaborar en el intento, la crisis lo ha evitado”

Sin embargo, el autor del libro deja entrever una cierta esperanza y afirma su confianza en que “se volverá a replantear el proyecto de integrar el recinto ferroviario de la estación de Chamartín en la ciudad de Madrid”, pero añade que ahora han de primar criterios de utilidad social y sostenibilidad.