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07 Abr 2013 |
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La nueva estación será una realidad ocho años después de que se presentase el proyecto La paralización del proyecto de Metro de Torrejón tiene una contrapartida importante en la localidad. Y es que, además de la remodelación de la estación central, Soto del Henares tendrá dentro de dos años, una estación de tren, la segunda de Torrejón, y que permitirá acceder con rapidez a una de las infraestructuras más importantes del municipio: el Hospital de Torrejón. Pero la historia de la construcción de la Estación de Soto comenzaba hace seis años. Un 21 de marzo de 2007, la alcaldesa, Trinidad Rollán, en plena precampaña electoral, anunciaba la construcción de la nueva estación, aunque sin poner fechas al proyecto. Aquella primera estación iba a ser un Centro de Servicios que incluiría la Estación propiamente dicha, una pasarela que conectase el barrio con la Avenida de la Constitución, y lo que se denominaba “espacio rotacional” de 10.000 metros cuadrados, una extensión en la que se construiría un aparcamiento subterráneo y edificios multifuncionales que se venderían, o alquilarían a empresas privadas con la intención de financiar el proyecto, que iba a costar más de doce millones de euros. Pero llegaron las elecciones, y hubo cambio de gobierno en la localidad. ADIF, que debía haber firmado el convenio con el nuevo alcalde, se negó a hacerlo, incluso negándose a recibir al nuevo Ejecutivo, y dejando pasar los meses. De hecho, incluso en octubre de 2008 se presentó el mismísimo Pedro Rollán ante las puertas de ADIF para que lo recibieran, sin conseguirlo, y dando órdenes de que todas las semanas se intentase contactar con el director general de la compañía. Al comprobar que el proyecto no avanzaba, y en medio de las más que justas reivindicaciones de los vecinos, el Consistorio torrejonero tuvo que recurrir a un Plan B: ellos, con la Comunidad de Madrid a través de Arpegio, financiarían el proyecto, para después sacar a concurso el espacio de 10.000 metros cuadrados donde se construiría un gran centro comercial al estilo de la madrileña estación de Príncipe Pío. Ya en 2009, NNGG inició una recogida de dos mil firmas que presentó por registro ante la compañía ferroviaria, pero tampoco consiguieron desbloquear la situación. Sin embargo, de nuevo la cercanía de unas elecciones, esta vez al Parlamento Europeo, volvieron a dar impulso al proyecto: José Blanco presentaba en mayo de 2009, junto a Esperanza Aguirre, el proyecto de infraestructuras para Madrid en el periodo 2009- 2015, un proyecto en el que estaba incluida la estación de Soto. Esta nueva promesa, electoral, dio nuevas esperanzas a los vecinos del barrio, aunque recelaban de que el presunto proyecto no incluyese ni costes, ni periodos de ejecución. La presentación del proyecto Metro de Torrejón, en febrero de 2010, dio la excusa perfecta a ADIF para eliminar la estación de Soto de sus previsiones. Literalmente llegaron a afirmar: “ la estación inicialmente prevista en Soto del Henares resultaría innecesaria al haberse considerado la construcción de una estación soterrada dentro de la Variante Ferroviaria de Torrejón de Ardoz, incluida en el referido Plan de Cercanías y muy próxima al emplazamiento que se había previsto para la anteriormente citada”. Una vez más los vecinos de Soto, que seguía creciendo a pasos agigantados, recibían un jarro de agua fría, aunque la posición se matizaba en vísperas de las elecciones locales de 2011. En ese momento, ADIF afirmaba que la última palabra la tenía el Ayuntamiento de Torrejón. Pasaron las elecciones y Pedro Rollán se convirtió en el alcalde más votado de España, ya en plena crisis, y el proyecto pareció volver a moverse. El gran problema se encontraba en que, en ese momento, ya no había ninguna empresa interesada en la construcción de un gran centro comercial en la parcela. Así las cosas, hubo que esperar a otro cambio de gobierno, en noviembre de 2011, para que el proyecto, por fin, empezase a tener visos de realidad. Tan solo unos días después de la toma de posesión del nuevo director general de ADIF, se reunía con el alcalde para intentar desbloquear la situación, y lo hacían, aunque con un serio problema sobre la mesa: la financiación. Pasado el tiempo de las vacas gordas, ahora no había dinero para construir la estación tal y como estaba previsto, así que se decidió poner en marcha la construcción de un apeadero, una opción mucho más barata y que servía de parche hasta la puesta en marcha de la gran estación. Pero, una vez más, la crisis tumbó el proyecto: la intención del Gobierno Local era financiar la construcción con el dinero que debía poner la Junta de Compensación del barrio tras la venta de los pisos, pisos que, en muchos casos, ni siquiera llegaron a construirse, encontrándose las empresas en concurso de acreedores o, directamente, en la quiebra. Este último varapalo enterraba por completo el proyecto, hasta que el pasado miércoles se hacía pública la noticia: el apeadero se construirá a cambio de dejar enterrado para mejor ocasión el Metro de Torrejón. Así, y si no hay contratiempos, en dos años, y justo antes de las elecciones locales, Soto del Henares tendrá su estación de cercanías, una estación que permitirá comunicar directamente con Madrid, el centro de Torrejón, y Alcalá, y que sólo ha tardado en llegar ocho años. |