14
Sep
2021
La Hermandad del Rocío, madrina de la Virgen de la Soledad en su coronación Imprimir
TorreNews - Sociedad Torrejón
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La Exaltación de la Cruz terminó con la presentación del gran acto litúrgico de 2022

Se esperaba una Exaltación de la Cruz sin procesión, y así fue, más o menos, porque, ya que las imágenes no podían moverse, fueron los fieles, y en concreto, el Coro de la Hermandad del Rocío el que se acercó a ellos para cantarles como cada año. Eso sí, esta vez el acto no fue el cierre de la procesión del día grande de la Vera Cruz, si no el primer jalón de la celebración de la Coronación de la Virgen de la Soledad.

Pero la celebración comenzaba algo antes. Con mascarilla, con lugares preasignados y con distancia de seguridad, los Hermanos de la Vera Cruz ocuparon los asientos de la parroquia de San Juan Evangelista, acompañados por el resto de las Hermandades torrejoneras, la Cabeza de Alcalá y la Almudena de Madrid. La que no estuvo presente fue la Presidenta, Yolanda Rodríguez, que se recuperaba tras una larga estancia en el Hospital.

Juntos escucharon una misa muy especial en que el simbolismo de la cruz fue protagonista de la homilía. Pero terminada la misa, que fue acompañada por la música del Coro de Villar del Olmo, llegaba la sorpresa: la Vera Cruz, casi desaparecida en los últimos meses, aprovechaba el acto para presentar los eventos preparatorios de la Coronación de la Virgen de la Soledad, su Titular junto al Cristo de la Vera Cruz, que conseguirá la corona en mayo de 2022.

Y el primero de esos eventos se celebraba en la misma tarde. La Vera Cruz presentaba como Hermandad madrina de la Coronación a la Hermandad del Rocío de Torrejón, una hermandad con la que, explicaban, les une algo más que “vivir” puerta con puerta en el José Antonio Paraíso.

La Presidenta del Rocío lanzó una especie de pregón de aceptación en el que resumió muy bien el sentimiento de todas las Hermandades y Cofradías religiosas en este año y medio de crisis sanitaria. Rosa María Álvarez detalló los sentimientos de los rocieros al no poder ir a Almonte por segundo año consecutivo, y esperaba que la normalidad vuelva de cara a 2022.

Tras el discurso y el intercambio de regalos entre las Hermandades, llegaba la sorpresa: a golpe de pífano hacía su entrada el Simpecado rociero que, tras recorrer la nave central se postraba ante los dos Titulares de la Vera Cruz, colocados en una composición junto al Altar. Allí, la Virgen del Rocío saludaba al Cristo de la Vera Cruz y a la Virgen de la Soledad bajo la atenta mirada de la Virgen del Rosario, la Patrona de Torrejón.

Y así la fiesta de la Exaltación de la Cruz más atípica terminaba exactamente igual que las tradicionales: sin procesión, sin encuentro de las imágenes, y sin lanzamiento de pétalos, pero con la Salve de los rocieros y el “Viva la Virgen de la Soledad” a la advocación titular de la Hermandad.