Informa, en un comunicado, de que lo hace para evitar el “linchamiento” al que están sometiendo a su familia y al Club Básket Torrejón

Hace tan solo unos minutos el Caso Yusta daba un giro inesperado. Y es que, a pesar de que, de momento, ha quedado meridianamente comprobado que no existe prueba para imputar ninguna irregularidad en la adjudicación del servicio de cafetería de la Piscina Cubierta de la calle Londres al Club de Basket Torrejón, el nombre que puso en entredicho la información de El Confidencial acaba de dimitir.

Raúl Yusta se va, según explica a través de un comunicado, para intentar acabar con el linchamiento público al que se está sometiendo a su familia y al Club de Basket del que fue Presidente hasta hace dos años. Yusta presentaba su dimisión esta misma mañana por registro y lo hacía para aumentar la imagen de transparencia en el Consistorio Local y dejando claro que no tiene nada que ocultar.

La salida de Yusta del Gobierno torrejonero se produce una semana después de que el  Pleno Municipal votase en contra de la constitución de una Comisión de Investigación sobre el  asunto, y después  de dos semanas de informaciones y rumores sobre la presunta relación que guardaría con la empresa Gedeseo, de la que es copropietario el actual presidente del Club de Basket.

En el comunicado oficial, Yusta aprovecha para arremeter contra las prácticas del anterior ejecutivo local, y desmiente tajamente las insinuaciones vertidas por el concejal socialista en el último Pleno, y que le vinculaban a la  adjudicación de los cerramientos de parques a una empresa de la localidad toledana de Yuncos.

Raúl Yusta, así, deja de formar parte del Gobierno torrejonero, pero conserva su acta como concejal del  Consistorio de la localidad, por  lo que, todo apunta, será punto en el orden del día del próximo Pleno.

COMUNICADO DE RAÚL YUSTA NOGUEIRA

En el día de hoy quiero hacer pública mi dimisión como concejal delegado de Nuevas Tecnologías, Sanciones y Patrimonio del Ayuntamiento de Torrejón de Ardoz. He tomado esta decisión ante los ataques y acusaciones sin ningún tipo de pruebas que contra mi persona y algunos miembros de mi familia se han vertido en los últimos días, a raíz de unas informaciones basadas en unos supuestos correos electrónicos de terceras personas en los que al parecer, se me mencionaba.

He tomado esta decisión para evitar que se siga atacando a mi familia y que se me utilice contra el Gobierno local. En un juicio justo uno se puede defender de las falsas acusaciones y rebatirlas con hechos y pruebas; contra los rumores y las insinuaciones he llegado a la conclusión de que es imposible defenderse.

Quiero dejar claro de forma rotunda y contundente que nunca, en ningún momento, he intervenido como concejal del Ayuntamiento de Torrejón de Ardoz para que se adjudique nada a nadie.

Me voy con la conciencia tranquila de haber trabajado con la mayor de las ilusiones por un proyecto hermoso que ha sido mejorar mi ciudad, Torrejón, y de lo que me siento muy orgulloso. Por este motivo, mi decisión de dimitir como concejal delegado es porque no quiero que se me utilice como arma contra el Gobierno local ni voy a permitir que se le haga más daño a mi familia, al igual que al Club Basket Torrejón por el que trabajé solo por amor a un deporte que me apasiona.

Los mismos que durante años permitieron sin rubor que su partido estuviera dirigido por un clan familiar encabezado por una alcaldesa cuyo suegro era el presidente del partido local y concejal, y con un marido que es dirigente y cargo confianza del PSOE han tenido la desfachatez de quererme dar lecciones de ética. Yo dimito ante unas acusaciones sin pruebas por mi familia, mientras que los que me intentan  dar lecciones se agarraron al sillón de la política incluso habiendo sido condenados.

Y todo ello sin pruebas, con insidias que han repetido hasta la saciedad para ver si las convertían en verdad, como que tengo una casa en un municipio llamado Yuncos, pueblo que no he visitado en mi vida y que no sé ni ubicar en el mapa.

Me gustaría pensar que de esta amarga experiencia algunos puedan aprender, que en política, tu adversario no es tu enemigo y por ello, machacarle a cualquier precio nunca está justificado.