29
Jun
2025
Juzgan a una torrejonera acusada de matar a un hombre en su clínica estética Imprimir
TorreNews - Sucesos Torrejón
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Foto cedida por CAMLo asfixió hasta la muerte, llevó el cadáver a un pinar y lo prendió fuego

Este martes comienza en la Audiencia Provincial el juicio por un terrible suceso desconocido hasta ahora, a pesar de producirse hace cuatro años. Y es que una torrejonera se enfrenta a una petición de veinte años de cárcel por el asesinato de un hombre en la Clínica Estética en la que trabajaba. Pero el asunto es aún más truculento, pues según el relato del Fiscal, tras asfixiar al hombre llevó su cadáver a un pinar y le prendió fuego.

El presente caso judicial involucra a una mujer acusada de asesinato y a un cómplice que enfrenta cargos de encubrimiento. La Fiscalía Provincial de Madrid ha solicitado una pena de veinte años de prisión para la mujer, mientras que para el hombre se piden tres años. El juicio está programado para comenzar el próximo martes en la Audiencia Provincial de Madrid.

El crimen ocurrió en un centro de estética en Torrejón de Ardoz, gestionado por la acusada, M. J. B. G. La Fiscalía detalla que el 28 de agosto de 2021, entre las 12:00 y la medianoche, la mujer tuvo una discusión con la víctima, G. E. S. Durante este altercado, M. J. B. G. golpeó a G. E. S., causándole un traumatismo craneoencefálico severo que lo dejó inconsciente. Posteriormente, la mujer asfixió a la víctima mediante sofocación, ocluyendo sus vías respiratorias, lo que resultó en su fallecimiento.

Un día después del asesinato, a las 8:49 horas, el cómplice se presentó en la escena del crimen con conocimiento del homicidio. Junto a M. J. B. G., se dirigieron a la Estación de Renfe de Alcalá de Henares para recoger un vehículo. Este acto fue parte de un plan para deshacerse del cadáver.

Media hora después, ambos regresaron al centro de estética, donde cargaron el cuerpo de G. E. S. en el vehículo. Posteriormente, trasladaron el cadáver a un pinar cercano, específicamente en la Calle Cerro del Murmullo en Madrid. Allí, le prendieron fuego con la intención de ocultar el crimen y evitar su descubrimiento. Abandonaron el lugar alrededor de las 10:48 horas.