56 gigantes y gigantillos y la colla castellera de Madrid completaron el evento

Junto a los actos religiosos y el Homenaje a la Bandera es el evento central de las Patronales de Torrejón, y, de nuevo, volvió a ser referente. Los Gigantes de Torrejón recibieron en la localidad a 17 comparsas llegadas desde distintos puntos de España y Portugal que pusieron en las calles de Torrejón un total de 56 gigantes y gigantillos. Pero los gigantes no llegaron solos, ya que, además de las figuras de cartón-piedra, la Comparsa torrejonera invitó a representantes de otras dos tradiciones muy conocidas en Cataluña: los castellers y los correfocs.

Así la tarde comenzaba con el retorno de la colla castellera de Madrid, que levantaban un total de seis castillos en una ciudad que ya es para ellos un símbolo (en Torrejón lograron, hace dos años, su primer “3 de 6” tan sólo unos meses después de nacer como agrupación). Esta vez optaron por hacer varias composiciones ante un público sorprendido de su habilidad: ante la fachada del Ayuntamiento cargaron un pilar de 4 que terminaba con la “enxaneta” desplegando el pañuelo oficial de las Patronales; y el mismo “3 de 6” que levantaron en el centro de la Plaza dos años antes.

Pero cuando mostraron, de verdad, lo aprendido en los dos últimos años, fue en el baile de comparsas del Encuentro, unas dos horas después, donde levantaban, con la ayuda de una multitudinaria “pinya”, un “4 de 6” y un castillo triple formado por dos pilares de 3 y uno de 4. Los castellers eran sólo el principio de una tarde cargada de emociones fuertes. Así, media hora después de formar los primeros castillos, comenzaba el primer desfile del VI Encuentro de Gigantes y Cabezudos de Torrejón, un desfile que llevó a las comparsas por las calles de la zona centro durante una hora y que terminaba, de nuevo en el centro de la Plaza.

Allí, a las ocho y media, comenzaba el baile de comparsas, en que los representantes de Navarra, Cataluña, Portugal, Madrid, Zaragoza y Castellón. Todas ellas mostraron su arte ante un público entregado a sus actuaciones. Pero a eso de las nueve y media, y tras las actuaciones de la colla castellera y los Gigantes de Torrejón, llegaba el fin de fiesta, un fin de fiesta a cargo de la Coordinadora de Diables de Barcelona, que convirtieron la Plaza en su infierno particular. Así los correfoc tomaron el recinto con un gran espectáculo de pirotecnia que regó de chispas de fuego buena parte de la Plaza. Al ritmo de la frenética batucada que les acompañaba hicieron explotar sus gigantes: Lilith, Nemrod, y su sorprendente “cabezudo” el “Mascle Cabró”, durante un largo espectáculo que cerraba la jornada.

Al día siguiente, y ya repuestos de la “Nit del Foc” improvisada, los Gigantes volvían a la carga, y lo hacían tomando la Avda de la Constitución mientras se celebraba el Encierro Infantil. Eso sí, esta vez se situaron en uno de los laterales, formando una hilera que recordó mucho a la que formaron las comparsas del primer Encuentro de Gigantes. Desde allí, y después de hacerse fotos con los niños, comenzaba el último paseo de las comparsas por las calles de Torrejón, un paseo que terminaba en la Plaza donde el tradicional baile final se transformó en una gran foto de familia en la que los componentes de las comparsas posaron junto a los gigantes protagonistas del VI Encuentro de Gigantes de Torrejón.