El Tribunal cree que deberían haberse podido oponer a la operación, y ordena retrotraer las actuaciones al momento procesal anterior

Este lunes el diario La Información soltaba un bombazo de imprevisibles consecuencias. Y es que, según el periódico, el Tribunal Supremo ha aceptado el recurso de uno de los afectados por la venta de viviendas del IVIMA a Encasa Cibeles, obligando a retrotraer las actuaciones al momento procesal previo a esa venta para que pueda ejercer su derecho de oposición.

Así, según el Tribunal, los inquilinos de las viviendas serían afectados directos por la venta, al cambiar el nivel de protección de sus pisos dejando el ámbito público para convertirse en privadas. Además el Alto Tribunal recuerda que el artículo 47 de la Constitución obliga a los poderes públicos a “promover las condiciones necesarias” para hacer efectivo el derecho a la vivienda, algo que no encaja con la venta de las viviendas a fondos de inversión.

El afectado que ha llevado el caso hasta el Supremo vio como tanto el juzgado de Primera Instancia como el TSJM tumbaban su pretensión, pero recurrió al Alto Tribunal, y ha conseguido una sentencia que puede ser la primera de muchas, y poner en serio riesgo el negocio que hicieron la Comunidad y la inmobiliaria de Goldman Sachs.

Y es que esta vivienda de Navalcarnero es sólo una de las casi tres mil que entraron en el lote, y entre las que se encuentran 224 del barrio de Soto del Henares de Torrejón (las ubicadas en Carmen Laforet), que ya generaron polémica hace unos años. Y es que fueron estos vecinos los primeros en levantar la voz contra lo que estaba sucediendo, allá por 2011, en una asamblea abierta en la que participaron los líderes de la oposición municipal de aquel momento.

Cinco años después, y con la venta ya consumada, afirmaban que no les habían dejado ejercer su derecho a compra: “En concreto, la empresa Encasa Cibeles ha permanecido callada durante los últimos meses, a pesar de las reiteradas peticiones de información solicitadas por las familias inquilinas de las viviendas situadas en la calle Carmen Laforet 6 y 9 de Torrejón de Ardoz. Incluso, aunque estas familias se hayan dirigido a la empresa con el fin de informar sobre su intención de ejercer el derecho a compra tras siete años de alquiler, Encasa Cibeles ha permanecido en silencio, a pesar de que la finalización del periodo de alquiler termina el próximo 25 de agosto. Sólo el pasado 2 de agosto, Encasa Cibeles respondió a algunos vecinos indicándoles que el plazo para ejercer su derecho a compra había finalizado el pasado 23 de junio, a pesar de las insistentes peticiones de información formuladas por dichos vecinos en los últimos meses”, explicaba Ganar Torrejón en un comunicado de agosto del año pasado.

Volviendo a la sentencia, pone en entredicho la venta de 1.380 viviendas de la capital, 259 en Móstoles, 224 en Torrejón de Ardoz, 21 en Tielmes, 240 en Parla, 44 en Collado Villalba, 332 en Majadahonda, 36 en Leganés, 80 en Valdemoro, 127 en Arroyomolinos y otras 192 en Navalcalnero que se entregaron a la inmobiliaria Encasa Cibeles (propiedad en un 97% del fondo de inversión Goldman Sachs) por 201 millones de euros.

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