El 20 de abril de 1963 era fusilado el último condenado por la Guerra Civil

El pasado sábado se celebró un aniversario que pasó desapercibido para casi todo el mundo: nada menos que el 50 aniversario de la muerte de Julián Grimau, histórico dirigente comunista que se convirtió, un 20 de abril de 1963, en el último condenado por la Guerra Civil.

Paso desapercibido, pero no para todos. El PCE de Torrejón decidió dedicarle un homenaje en un acto celebrado en la sede de IU en la localidad, un acto al que no pudo asistir José Luis Centella debido a una visita de última hora.

En su lugar, los miembros del Partido en Torrejón le dedicaron un sencillo, pero emotivo homenaje, en el que no faltó la hagiografía del personaje, y unos versos en su memoria, y es que, no en vano, su nombre es el que lleva por bandera la Agrupación Comunista de la localidad.

Sin embargo, los actos centrales se vivían en Madrid, donde el PCE organizó una ofrenda floral en su tumba, celebró un acto en el Ateneo de Madrid, y dejó una corona de flores tricolor en la Puerta del Sol madrileña.