17
Ene
2017
El Padre Ángel celebró San Antón bendiciendo a las mascotas Imprimir
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Foto cedida por Mensajeros de la PazEl Cardenal Amigo celebró la Misa en la parroquia de Chueca

La iglesia de San Antón de Madrid (Calle Hortaleza, número 63) celebraba ayer el día del patrón de los animales con cientos de bendiciones a mascotas, como es la tradición. El Ayuntamiento de Madrid ha organizado todo un programa de actividades para celebrar estas fiestas, en las que se han visto involucradas diferentes organizaciones benéficas, protectoras de animales, etc.

Mensajeros de la Paz, la organización del Padre Ángel, se ha encargado, desde el templo de San Antón, de la venta de los tradicionales panecillos de San Antón, de las bendiciones a las mascotas dentro y fuera de la iglesia, y de la celebración de la solemne misa en honor a San Antón. La misa ha sido presidida por el Cardenal Carlos Amigo, junto al Padre Ángel. Con palabras emotivas y firmes al mismo tiempo, el Cardenal Amigo ha dicho en su homilía que “el amor no aparta, sino que pone cerca. Lo que distancian los ojos, el corazón lo acerca”.

Ha reflexionado sobre “qué nos puede decir a nosotros un ermitaño del desierto de hace dos mil años”, que pertenecía a una familia rica y repartió todas sus posesiones. Ha aconsejado poner atención a los demás, porque “sin mirar bien, uno no se entera de nada”, y ha concluido con el ejemplo de personas como el Padre Ángel.  “Dios nos responde que no va hacer él los milagros que nos toca hacer a nosotros. Y el Padre Ángel le obedece, y hace milagros. Levantar del charco a una sola persona, es un milagro”, ha declarado el Cardenal Amigo. Durante la eucaristía, como siempre en S. Antón, personas sin hogar han ejercido de monaguillos.

Por último, las tradicionales “Vueltas de san Antón”, la procesión de animales, comenzarán en la Calle Hortaleza a las 17 horas, para recorrer la travesía de San Mateo y las calles de San Mateo y Hernán Cortés.

En la iglesia de San Antón, donde siempre está permitida la entrada de mascotas, el Padre Ángel y su ONG atienden a cientos de personas en situación de calle 24 horas al día. “Que esos panecillos sean pan para todos, y abramos la puerta a quienes no tienen refugio ante esta oleada de frío”, ha deseado el P. Ángel durante la misa.