Actualizan, explican, la imagen corporativa
El alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, anunció la renovación de la imagen corporativa del Ayuntamiento, la cual no ha tenido ningún coste asociado. Esta decisión se toma tras 20 años de la imagen anterior y busca adaptar la comunicación institucional a las exigencias contemporáneas.
El alcalde Almeida destacó la importancia de actualizar la imagen del Ayuntamiento para alinearse con las nuevas demandas de comunicación. En un contexto donde la comunicación visual juega un papel crucial, la renovación busca que la imagen institucional sea más atractiva y relevante para los ciudadanos.
El nuevo logotipo ha sido diseñado internamente por los servicios de la Dirección General de Comunicación del Ayuntamiento de Madrid, lo que ha permitido evitar gastos externos. Almeida enfatizó que el proceso de diseño fue realizado de manera eficiente y sin coste adicional para la administración municipal.
A pesar de la renovación, Almeida aseguró que no se realizarán cambios en los símbolos tradicionales de la ciudad, como el escudo y la bandera. La nueva imagen incorpora elementos icónicos que representan a Madrid, tales como el oso y el madroño, las siete estrellas y la corona. Estos elementos son fundamentales para mantener la identidad visual de la ciudad.
La nueva imagen se complementa con un "claim" que dice: "Madrid, donde se cruzan los caminos". Este lema busca encapsular el espíritu de la ciudad, enfatizando su papel como un punto de encuentro y conexión. La transición hacia la nueva imagen se llevará a cabo de manera gradual. El Ayuntamiento planea reemplazar la antigua imagen en los diversos soportes y materiales institucionales a medida que se vayan actualizando, asegurando que el proceso no genere costes adicionales.
El portavoz de Más Madrid en funciones, Eduardo Rubiño, ha expresado su descontento con el nuevo símbolo, calificándolo de "auténtica vergüenza". Rubiño argumenta que la nueva imagen no representa un proceso compartido, sino que ha sido desarrollado de manera "opaca" y "a dedo". Según él, este enfoque ha resultado en la pérdida de una oportunidad para crear una identidad gráfica que refleje un consenso más amplio entre los ciudadanos de Madrid.
Rubiño enfatiza que la ciudad no debe ser vista como un "código privado" del PP, sugiriendo que la administración tiene la responsabilidad de garantizar que todas las decisiones del Ayuntamiento reflejen la diversidad y la identidad de la sociedad madrileña. Su crítica se centra en la falta de un proceso participativo que involucre a los ciudadanos en la creación de su identidad gráfica.
Reyes Maroto, portavoz del Grupo Municipal Socialista, ha manifestado su sorpresa ante la ausencia de un "concurso de ideas" que involucre a la sociedad en la creación de la nueva imagen. Maroto sostiene que la imagen institucional es crucial, ya que representará a todos los madrileños durante las próximas décadas. Por lo tanto, considera que es criticable que no se haya buscado la participación ciudadana en este proceso.
El portavoz de Vox, Javier Ortega Smith, también ha expresado su descontento, señalando que no han recibido información adecuada sobre la nueva imagen corporativa. Smith ha indicado que se han enterado de los cambios de la misma manera que el resto de los ciudadanos, lo que pone de manifiesto una falta de comunicación por parte del Gobierno de Almeida.
Ortega Smith ha criticado la intención del Gobierno de Almeida de sustituir el actual escudo de Madrid, que considera "muy bonito y con mucha historia y tradición". Según él, los escudos tienen un valor que se construye a lo largo del tiempo y representan la conexión del Ayuntamiento con su historia. Su crítica se centra en la percepción de que el nuevo enfoque busca modernizar la imagen de Madrid de manera superficial, como si la ciudad hubiera "nacido ayer". |