El Presidente de la asociación critica lo que considera un acto de racismo ocurrido en Valencia

El pasado 8 de julio una familia de Alzira se acercaba hasta la piscina municipal de la cercana localidad de Catadau, donde se iba a celebrar el Festival “Catadau a la fresca” con actividades durante todo el fin de semana. Y es que música en directo, cine o castillos hinchables por sólo dos euros era una oferta más que interesante. Pero la sorpresa de esta familia, integrante del colectivo gitano, llegaba al llegar a la taquilla, ya que el encargado intentó cobrarles el doble que al resto de los que querían entrar.

La situación, que desvelaba el diario Levante hace unos días, está provocando una auténtica revolución entre la comunidad gitana, siendo muchos los que han protestado por lo que consideran un claro acto de discriminación.

Y entre ellos, el Presidente de Progreso Gitano Nacional, el torrejonero Javier García que “denuncia públicamente los ataques racistas hacia la comunidad gitana en España. Hechos como el vivido el pasado 14 de julio en una piscina pública de Catadau, donde se vivió un episodio de racismo cuando una familia perteneciente al colectivo gitano quiso acceder a las instalaciones queriendo cobrarles el doble que al resto de los usuarios”.

Según García, que continúa con su ruta contra el racismo por diversas localidades de España: “Éste no es un hecho aislado, pues situaciones similares se están viviendo por toda España. Es hora de que se tomen las medidas oportunas para evitar que se repitan hechos racistas como los vividos. Es lamentable que en el siglo XXI la sociedad te siga juzgando por tu cultura, tu religión o el color de tu piel. Tenemos que luchar por crear una conciencia y una visibilidad favorable al pueblo gitano. Hacer ver que tenemos un enorme bagaje cultural y que hemos aportado muchas cosas favorables a la sociedad. Tenemos que luchar por una sociedad multicultural donde todo el mundo pueda convivir y compartir su cultura”.

También la presidenta de la Asociación Yerba-Buena de Madrid, Pilar Heredia, criticaba lo sucedido: “Cuando hablamos de racismo, estamos hablando de un tipo de discriminación, aquella que se produce cuando una persona o grupo de personas siente odio hacia otras por tener características o cualidades distintas, como el color de piel, idioma o lugar de nacimiento. Una de las causas más comunes de las actitudes racistas, puede encontrarse en el miedo a lo diferente, por desconocimiento o por falta de información al respecto”.

Volviendo a lo ocurrido en tierras valencianas, el alcalde de Catadau, Héctor Roig de Compromís, explicaba que el precio más alto se debía a la celebración del Festival, aunque sólo se cobraba a los no empadronados, argumento que no consta en ningún documento oficial. Esta respuesta no convencía a la familia agraviada, que ha iniciado una campaña para conseguir el despido del encargado de la piscina.