02
Abr
2017
14 años de cárcel para la madre que tiró a su bebé a la basura en Mejorada Imprimir
Zona Este - Mejorada del Campo
Compartir en MenéameCompartir en TuentiCompartir en Buzz it!Compartir en FacebookCompartir en Twitter

Foto cedida por Ayuntamiento de MejoradaLa Audiencia Provincial de Madrid la considera culpable de un delito de asesinato en grado de tentativa con agravante de parentesco

14 años de cárcel. Esta la pena que ha impuesto la Audiencia Provincial de Madrid a Catalina, la madre que tiró a su bebé a un contenedor de basura en Mejorada hace casi dos años. La pena, por un delito de asesinato en grado de tentativa con agravante de parentesco, es prácticamente la mitad de los 27 años que pedía el fiscal, debido a la que la acusada mostró arrepentimiento durante la vista oral.

En concreto Catalina afirmaba ante el Tribunal que no fue consciente de la gravedad de la situación hasta que entró en prisión. El bebé fue rescatado por dos guardias civiles, y hoy se encuentra perfectamente en manos de una familia de acogida.

Tal y como explicaba el fiscal en sus conclusiones previas, Catalina, tras mantener oculto el embarazo de un bebé varón, dio finalmente a luz en el Hospital del Henares, de la localidad de Coslada.

El 6 de julio de 2015 fue dada de alta y se trasladó con el padre biológico del recién nacido y otros tres hijos menores de edad de ella al domicilio común. El 15 de julio, Catalina cogió al bebé y lo metió en el interior de una bolsa de deporte junto con varios enseres del niño, y lo introdujo todo en el interior de una bolsa de basura negra que anudó y llevó al contenedor de basura de restos orgánicos tipo subterráneo que se hallaba a unos 150 metros de su domicilio, en la Avenida de los Toreros de Mejorada del Campo.

Y allí arrojó la bolsa de basura negra con el bebé dentro al interior del contenedor, entre más de treinta bolsas con diferentes residuos. Abandonó al recién nacido –recalca la calificación fiscal-, a sabiendas de que tal acto entrañaba un peligro concreto para su vida, por lo que venía a aceptar el resultado mortal que podía producirse y que finalmente no tuvo lugar al escuchar un viandante el llanto del bebé. Tras dar inmediato aviso a la Policía, esa misma mañana fue rescatado en buen estado de salud.