Además, FAMMA pide a los taxis que incluyan el 5% de licencias para Eurotaxis

El Área de Medio Ambiente y Movilidad reclama que se cierre el compromiso entre el Ministerio de Fomento y las asociaciones del taxi para que los VTC dependan de una segunda licencia, en este caso urbana, y se pueda hacer cumplir la ratio fijada por el Gobierno nacional de una licencia VTC por cada 30 taxis, que fue respaldada por el Tribunal Supremo.

El conflicto que vive el sector del taxi se origina por la falta de cumplimiento de esa ratio marcada por el Ministerio de Fomento, pero que no cuenta con instrumentos para su cumplimiento. Crear una segunda licencia para los desplazamientos de VTC que tengan lugar dentro de las ciudades es la reivindicación principal del sector del taxi, que el Ayuntamiento de Madrid apoya.

En este sentido, el Gobierno municipal considera positivas las declaraciones realizadas por el Ministerio de Fomento hasta ahora, pero pide que se posibilite un compromiso firme este miércoles con la creación de esa segunda licencia municipal, con el fin de alcanzar una solución definitiva.

En el Pleno municipal de noviembre de 2017, con el apoyo de todos los grupos municipales, se aprobó instar al Gobierno y a la Comunidad de Madrid a dar los pasos necesarios para la creación de estas licencias urbanas, con las que ya tienen que contar los taxis para circular. Posteriormente, el Ayuntamiento se ha vuelto a dirigir al Ministerio de Fomento en el mismo sentido.

Desde la Federación de Asociaciones de Personas con discapacidad Física y Orgánica de la Comunidad de Madrid (FAMMA-Cocemfe Madrid) solicita al sector del taxi que, entre sus exigencias, incorpore el cumplimiento del 5% de licencias para Eurotaxis. Es un buen momento, para intentar avanzar, en el aumento de los servicios que pueden generar un mayor volumen de trabajo al sector y resolver la movilidad de una gran parte de personas con discapacidad muy importante.

Sólo en la Comunidad Madrid, podríamos estar hablando, que existen más de 390.000 personas con un tipo de discapacidad y que algo más del 60%, tiene movilidad reducida, sin contar con las personas mayores u otros sectores de la población que, con carácter temporal, pueden tener su movilidad limitada.

A propósito de la situación actual, la Federación reclama se cubran todos los servicios de taxis adaptados a las personas con movilidad reducida, independientemente del servicio que se requiera, pues su movilidad es, tan limitada , que no existe otro medio de transporte para moverse ante sus obligaciones diarias.

Desde la Federación, se cree necesario, que para qué los taxis puedan cambiar progresivamente de una licencia normalizada a una adaptada de eurotaxi, se deberían propiciar algunos incentivos tales como, la revisión de los conceptos en los que se basa la tasa administrativa para la autorización de vehículos eurotaxis, o la posibilidad, de promover la excepción o reducción del pago del Impuesto de Vehículos de Tracción Mecánica (IVT) entre otros.

Por otro lado, es necesario las ayudas directas a los usuarios de estos vehículos a través de tarifas reducidas u otros incentivos, ya que sus desplazamientos, se hacen imposibles, en otros medios de locomoción.

Con la incorporación de más vehículos adaptados, se multiplicaría las oportunidades de rendimiento económico para los taxistas, pues se abarcaría a un mayor número de clientes, propiciando una mayor actividad económica en el sector.

Desde la Federación, se cree que; “El servicio de euro taxis, es vital para las personas con movilidad reducida que no pueden utilizar otros elementos de transporte, porque conseguimos que el servicio se realice puerta a puerta y de una manera personalizada.”

Madrid ha sido un ejemplo importante para avanzar en la ampliación de estos vehículos con medidas complementarias, que han beneficiado a los taxistas y que ha producido un aumento de estos vehículos.

El servicio del taxi es y será una parte esencial del servicio transporte público para las personas con movilidad reducida. Un transporte, que siempre debe ser diseñado, bajo el parámetro de la accesibilidad universal y el diseño para todos. Cualquier otra cuestión, sería discriminar a las personas con discapacidad.

Desde la Federación se opina que la liberalización del sector del transporte de manera controlada, es bueno para todos y para las personas con discapacidad o con movilidad reducida, porque tendrán mayores oportunidades en su movilidad y por tanto, en su integración.