19
Sep
2016
CCOO critica el nuevo canal de ventas de la ONCE Imprimir
Otras Noticias - Madrid
Compartir en MenéameCompartir en TuentiCompartir en Buzz it!Compartir en FacebookCompartir en Twitter

Creen que supone “competencia” para los vendedores

Hoy martes 20 de septiembre, delegadas y delegados de CCOO se concentrarán ante la sede de la Dirección General de la ONCE en Madrid (calle Prado, nº 24), entre las 12 y las 13:30 horas, para manifestar su rechazo a la política antisocial y comercial de la entidad que, en opinión del sindicato, está hipotecando y empobreciendo el futuro de esta importante institución social, de interés público.

CCOO viene alertando desde hace años que la ONCE está implantando un canal de ventas en paralelo a su red principal de vendedoras y vendedores, que son trabajadores y trabajadoras por cuenta ajena a cargo de la ONCE y además son, en su totalidad, personas con discapacidad. Dicho canal alternativo supone una competencia para el personal vendedor de la ONCE, aunque la empresa lo considera como “complementario”.

La red de ventas tradicional de la ONCE está compuesta por aproximadamente 20.000 personas con discapacidad, mientras que la red de ventas externalizada la componen una variedad de establecimientos que van desde pequeños negocios, como estancos o quioscos de prensa, hasta grandes empresas como cadenas de gasolineras, las oficinas de Correos, El Corte Inglés, cadenas de alimentación como Simply o Covirán y recientemente se han incorporado entidades u organizaciones sociales como la Interagrupación de las fallas de Valencia.

CCOO analiza con preocupación este aumento desproporcionado del canal de venta externo, sobre el que la ONCE no explica sus previsiones de desarrollo y expansión. Mientras, desde 2009 se han perdido 1.613 puestos de trabajo de venta y 845 de personal no vendedor, y se han cerrado más de 60 agencias, algunas de ellas situadas en capitales de provincia. Las retribuciones del personal vendedor se han visto afectadas por la disminución progresiva de las ventas (- 9% desde 2009) y además la dirección de la ONCE hace una aplicación rigurosa del régimen disciplinario, estableciendo suspensión de empleo y sueldo e incluso el despido, por las dificultades de llegar a los mínimos de venta exigidos por la empresa a sus vendedores y vendedoras.

La precariedad laboral es otro elemento importante de la situación actual en la ONCE. Un importante número de contrataciones no se consolida con el único argumento de que el vendedor o vendedora no alcanza las cifras de venta establecidas unilateralmente por el departamento comercial, normalmente por encima de las obligatorias establecidas en convenio.

CCOO exige a la ONCE una reconsideración de esta política institucional que perjudica gravemente a su personal vendedor y no vendedor, que renuncie a la expansión desorbitada del canal físico complementario, ajeno al personal vendedor de la ONCE, y que lleve a cabo una verdadera labor social hacia las personas con discapacidad en general y las personas invidentes en particular.