Carmena aprueba un nuevo contrato que aumenta el presupuesto un 31%

Un nuevo centro de atención a familias en situación de emergencia y el  incremento en el número de trabajadores de calle, trabajadores sociales y unidades móviles. Estas son algunas de las mejoras que supone el nuevo contrato de servicios, aprobado hoy en Junta de Gobierno, para la gestión del Samur Social en atención a emergencias sociales y a las personas sin hogar que viven en la calle.

El presupuesto que se destina es de 22.788.632,80€ lo que supone un incremento del 31% con respecto al anterior contrato y que permite la mejora de la atención social en emergencias una de las prioridades del Área de Equidad, Derechos Sociales y Empleo. El nuevo contrato tendrá vigencia desde  el 1 de septiembre de 2016  hasta el 31 de agosto de 2019.

Mejoras en el servicio

Este empuje presupuestario permite incrementar servicios y crear otros nuevos. De hecho, una de las novedades es que próximamente se pondrá en marcha un nuevo centro de atención a familias en situación de emergencia con 40 plazas, duplicando la actual capacidad de acogida para familias del Centro de Estancias Breves actual.

Además, el nuevo contrato incluye la posibilidad de hasta 12.000 estancias en diferentes modelos de alternativas habitacionales. Esto se concreta en proporcionar una media diaria de unas 30 plazas de alojamiento en pensiones u otro tipo de alojamiento no institucionalizado.

La atención a la ciudadanía también se ve mejorada gracias al incremento en el número de equipos de calle,  pasando de los 12 actuales a 18; más trabajadores sociales pasando de 10 a 18.

Por otro lado, el  Centro Municipal de Urgencia Social (CEMUS) se configura como un recurso que se activaría en situaciones de emergencia imprevistas.

Prestaciones

Samur Social funciona las 24 horas del día, los 365 días del año. Las prestaciones que ofrece son la atención e intervención en emergencias individuales y familiares, en todos los sectores de población, además del poyo en la atención e intervención social en emergencias colectivas, así como en las grandes emergencias.

La atención a personas sin hogar que se encuentran en la calle en una situación de gran riesgo y deterioro personal es otra de las prioridades. Entre sus funciones también se encuentran las prospecciones de colectivos vulnerables y agrupamientos urbanos en el municipio de Madrid.

Cobra también importancia la labor de información y sensibilización sobre la atención a las emergencias sociales y a las personas sin hogar, tanto a los ciudadanos, que se encuentran en el lugar de la intervención y que demuestran interés por la misma, como a la sociedad en general y profesionales pertenecientes a otros servicios y organismos públicos y privados.

Además, entre sus funciones hay que añadir la atención social de las emergencias que se reciban por teléfono en la Central del Samur Social, el acompañamiento de las personas afectadas por una emergencia y que se encuentran alojadas en la Unidad de Estancias Breves de la Central del SAMUR SOCIAL, así como en otros dispositivos de alojamiento (CEMUS, Unidad de Estancias Breves  para familias, establecimientos hosteleros, etcétera); participación en operativos preventivos organizados por los servicios de emergencia de la ciudad de Madrid y proporcionar respuestas habitacionales a situaciones de emergencia social.

Doce años de experiencia

El Samur Social se creó en 2004 como un servicio especializado en la atención a las emergencias sociales y a las personas sin hogar. Casi doce años de experiencia avalan su consolidación y reconocimiento social, reconocimiento que este año ha quedado ratificado al recibir la certificación en calidad de AENOR.

Entre los  datos de atención más significativos durante el periodo comprendido entre junio 2004 y junio 2015 destacan las 578.547 llamadas gestionadas desde la Central del Samur Social, las más de 119.200 emergencias individuales/familiares atendidas y las 5.578 personas sin hogar atendidas en la vía pública  por los equipos de calle, lo que ha supuesto realizar 357.843 intervenciones.

Además, desde 2004 ha intervenido en 425 emergencias colectivas (hundimiento de edificios, explosión de gas, edificios ruinosos...) en coordinación con otros servicios de emergencia (Bomberos, SAMUR Protección Civil, Policía Municipal). Samur Social ha participado en tres  emergencias de gran alcance que afectaron a la capital: el atentado del 11-M, el incendio de la central eléctrica ubicada en el Paseo del Prado y en el accidente de Spanair en el aeropuerto de Adolfo Suárez Madrid-Barajas.

Atención a las familias madrileñas, especialmente las que se encuentran en situación de mayor vulnerabilidad, siempre desde una visión amplia, integral e integradora. Ese podría ser el resumen de algunos de los pilares sobre los que se sustenta la política municipal en materia de familia y que hoy ha tenido su traducción en la aprobación de dos contratos para la gestión de servicios enfocados a ellas, por un importe total superior a los 13,5 millones de euros. Ambos incluyen las cláusulas sociales, aprobadas en enero, que priman la calidad de los proyectos frente al montante económico.

Se trata del Contrato para la gestión del Servicio de Apoyo a las Familias con Menores (SAF Menores) y el de gestión de los Centros de Apoyo a las Familias (CAF), que ha aprobado la Junta de Gobierno. Son dos servicios distintos pero con un protagonista único, las familias de la ciudad.

SAF, prestación básica, atención individualizada
El SAF es una prestación básica de los Servicios Sociales, que comprende un conjunto de actividades realizadas en el propio domicilio familiar para proporcionar atención personal a los menores y, en determinados casos, apoyar en la limpieza y mantenimiento del hogar, además de acompañarlos fuera de la casa familiar. Desde favorecer la conciliación familiar y laboral en familias de escasos recursos y apenas red de apoyo, promover el apoyo socioeducativo o la vinculación a los recursos comunitarios y actividades educativas, hasta favorecer la atención del menor en el seno familiar, procurando el adecuado nivel de cuidados personales, domésticos y sociales para prevenir situaciones de riesgo. Todos son fines de esta iniciativa que tiene como principales destinatarios a familias, con hijos menores de 18 años, escasos recursos económicos o carencia de habilidades necesarias para ejercer una paternidad responsable. Y también, aquellas familias que atraviesan situaciones adversas o de crisis que desbordan la capacidad de respuesta de los padres y pueden quebrar el sistema de crianza y cuidados que necesitan los más pequeños. A lo largo de 2015, por ejemplo, se atendieron a 653 familias y a cerca de un millar de menores.

El contrato aprobado incluye dos lotes en los que se agrupan los 21 distritos de la capital. Tiene una vigencia de tres años, que comienza el próximo 1 de julio, y un importe superior a los 8,4 millones de euros. Cada lote contempla una plantilla de 51 personas, integrada por un director, un coordinador, un ayudante de coordinación, 40 auxiliares domiciliarios y 8 auxiliares sociosanitarios o de educación infantil.

El servicio se presta en horario laborable de lunes a viernes de 7 a 22 horas, y el sábado de 7 a 15 horas. Se establece un horario especial (ampliado con el nuevo contrato) y que sólo puede representar el 4% del total de horas anuales al año, y otro nocturno (de 23 a 6 horas) cuyo volumen no puede ser superior al 1% del total de horas anuales prestadas.

El horario especial incluye los sábados de 15 a 22 horas, los domingos y festivos estipulados en el calendario laboral de la ciudad, además de los días 24 y 31 de diciembre, y los días laborables de 6 a 7 de la mañana y de 22 a 23 horas.

Novedades reseñables son, por ejemplo, la necesidad de que exista personal auxiliar sociosanitario o de educación infantil para los menores de 0 a 3 años o la inclusión de auxiliares domiciliarios masculinos.

Prevención de conflictos familiares
Los Centros de Apoyo a la Familia (CAF) son dispositivos municipales especializados que ofrecen un espacio de apoyo a las familias para el ejercicio de sus funciones parentales, educativas y de cuidados, al tiempo que constituyen una ayuda temprana para afrontar conflictos originados por cambios en la estructura familiar o por situaciones de crisis de sus miembros. Están enfocados a todas las familias madrileñas, con independencia de sus características y situación, y también a parejas en proyecto de constitución de nuevas familias.

La red municipal, integrada por siete centros, ofrece, entre otros servicios, información y formación, orientación social, asesoramiento jurídico en materia de familia, atención psicológica, actuaciones de prevención de violencia, mediación familiar, bancos de tiempo…

El contrato se distribuye en cuatro lotes para llegar a todos los distritos. Tiene una vigencia de dos años, con inicio el próximo uno de septiembre, y un importe algo superior a los 5,1 millones de euros. Entre sus novedades se encuentra el incremento de un profesional en tres de los centros para unificar la plantilla de todos ellos y un aumento del horario de prestación del servicio que abarca la franja de 8.30 a 20.00 horas de lunes a viernes.

Al igual que en el caso del SAF, la red cuenta con una plantilla integrada por equipos multidisciplinares de expertos en intervención familiar que suman 70 profesionales, entre psicólogos, trabajadores sociales, abogados, además del personal directivo y de administración.

A más de 9,7 millones de euros asciende el contrato para la gestión de los Centros de Atención a la Infancia (CAI) que ha aprobado esta mañana la Junta de Gobierno. Con este nuevo contrato, que entrará en vigor el próximo 1 de septiembre con una vigencia de dos años, Madrid va a contar con dos nuevos centros, ubicados en Fuencarral-El Pardo y Villaverde, que elevan a diez el número de estas dotaciones. Hasta el momento la red municipal dispone de 8 CAI, tres de ellos de gestión directa municipal, y cinco de gestión indirecta. El contrato administrativo de servicios, aprobado hoy, afecta a los cinco de gestión indirecta actuales y a los dos nuevos, siete en total.

Los CAI se enmarcan dentro de los servicios municipales de atención especializada, en este caso a menores y familias. Tienen carácter interdistrital y las dos nuevas dotaciones permitirán aligerar el volumen de atención de los CAI 5 y 3, respectivamente. Se implantaron con el objetivo de atender a menores de entre 0 y 17 años y a sus familias cuando la existencia de graves disfunciones en el entorno familiar sitúa a los menores en una situación de desprotección y riesgo social. 
En los últimos cinco años han atendido a cerca de 27.000 familias o, lo que es lo mismo, a más de 110.000 personas, de las que cerca de 50.000 eran menores.

Detección de situación de riesgo y atención son dos de las líneas estratégicas de estos centros, siempre preservando la convivencia familiar para evitar en lo posible la separación del menor de su grupo familiar. En caso de producirse dicha separación, se trabaja para favorecer la reincorporación del menor a la convivencia familiar. Son una garantía del buen trato a los menores y el fortalecimiento de los núcleos familiares mediante acompañamiento, supervisión, y tratamiento especializado.

El nuevo contrato lleva incorporadas las cláusulas sociales aprobadas en enero y en los criterios de adjudicación prima la calidad del proyecto sobre la oferta económica.

Mayor demanda, nueva distribución geográfica
La red municipal, creada en 1989, está territorializada, de forma que cada CAI atiende a entre uno y cuatro distritos para dar cobertura a toda la ciudad. Con los dos nuevos centros de Villaverde y Fuencarral, la distribución geográfica es la siguiente: el CAI 1, ubicado en el distrito de Centro, atiende a este distrito y a menores y familias de Retiro, Salamanca y Chamberí. Es de gestión directa. También de gestión directa son los centros 2 y 3. El primero, ubicado en Hortaleza, da servicio a este distrito y a los de Barajas, Ciudad Lineal y San Blas-Canillejas, mientras que el segundo, con sede en Usera, atiende también a Arganzuela.

Dentro de los de gestión indirecta, objeto del contrato aprobado hoy, el CAI 4 atiende a los dos distritos vallecanos, Puente y Villa; el 5, a Tetuán y Chamartín; el 6, a Latina; el 7, a Moratalaz y Vicálvaro; el 8, a Carabanchel; el 9, de nueva creación, a Fuencarral-El Pardo y Moncloa Aravaca y, por último, el 10, también nuevo, se ocupará de Villaverde.

La puesta en marcha del CAI 9 supone aligerar el volumen de atención del centro de Tetuán del que antes dependía esta población. Lo ha aconsejado el aumento de la demanda, que ilustra bien un dato: en los tres primeros trimestres del año anterior la atención se incrementó en un 61% con respecto a todo el año 2010. De esta forma, el CAI 5 tendrá su sede en un espacio cedido en la Junta Municipal de Tetuán, mientras que el 9 se ubicará en el Centro de Servicios Sociales de San Vicente de Paúl, siguiendo la línea de incorporación de estos centros a los de Servicios Sociales para favorecer el acercamiento a los potenciales usuarios, mejorar la coordinación entre ambos servicios y reducir los costes de alquiler de los locales donde se ubican.

Atención interdisciplinar
La plantilla está formada por equipos interdisciplinares de profesionales con formación y experiencia en intervención terapéutica con menores y sus familias. Este nuevo contrato pone a disposición de los ciudadanos 111 técnicos (psicólogos, trabajadores sociales y educadores sociales) además de personal administrativo y de servicios, que se suma a los 32 técnicos de los CAI de plantilla municipal.

En cuanto a la forma de acceso, al tratarse de un servicio social de atención especializada, la mayoría de los casos son derivados por los servicios de Atención Social Primaria (Centros de Servicios Sociales). El acceso directo se produce fundamentalmente a través de la Comisión de Tutela del Menor, juzgados o Fiscalía de Menores. A veces también se accede de forma directa, bien por derivación de otros servicios municipales como el SAMUR-Protección Civil, el Samur Social o los Centros de Apoyo a las Familias (CAF) o cuando se trata de familias que han sido atendidas con anterioridad y vuelven a demandar ayuda.