05
Jun
2013
Gran Hermano 14 (GH 14): debate, porcentajes de expulsión y Desi consigue su tinte Imprimir
Los Blogs del Telescopio - El Choniblog
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Mañana, últimas nominaciones y continúa la guerra entre Kristian y Susana

Ayer vivimos el penúltimo debate de Gran Hermano, lo que significa que, por fin, esto se acaba. Cada vez va tomando más fuerza la final a seis y un combate final entre Susana y Kristian por el maletín, ya que los porcentajes confirman lo que se intuía: desde que el programa ha empezado a mostrar vídeos no positivos del Pelocho los votos se han incrementado, exactamente igual que sucedió hace unos días en el bando Susargista cuando las Wallistas criticaron un comentario de Susana sobre los chicos de su asociación. El efecto rebote, que tan bien conocen los políticos, puede servir para despertar el interés de la audiencia (mas bien poca) que sigue viendo el programa.

Lo que sí está claro es que, salga el que salga mañana jueves, el programa verá resentirse su audiencia: sin las Wallistas por un lado, o sin las Argiristas, por el otro, algo que no puede permitirse si quiere renovar el año que viene.

Pero en cualquier caso, los porcentajes están muy igualados: un 51,5 % frente a un 46,7%, con lo que todo esta por resolver (es posible que el primer porcentaje corresponda a Kristian, ya su incremento se produjo coincidiendo con una lluvia de votos organizada por Miguel Frigenti, pues, según el Debate, al principio del programa estaban rozando el empate técnico 49,2 % frente a 49%). Con semejante panorama, y con el programa en un compromiso, todo puede pasar.

Para los que seguimos a este lado de la barrera lo más interesante es que se quede Igor, y vaya laminando lenta, pero inexorablemente, al grupo pelochil, algo para lo que sería necesaria una fase final en condiciones y no lo que parece va a suceder. La final a seis es el último despropósito de una edición en la que los ha habido a decenas, y el mejor broche para cerrarla por todo lo alto. Seis expulsiones en una noche significa seis entrevistas, incluyendo la del ganador, algo que no hay escaleta que soporte, pero ya veremos como lo hacen.

Volviendo al Debate, contaron con profusión de detalles lo ocurrido en la Fiesta Medieval, y también la Noche de los Cuchillos Largos, aunque el acercamiento de Nacho a los Pelochos se lo guardaron, posiblemente, para la Gala; y concedieron a Desi tres deseos: uno, el oficial, pedido al Gran Hache, una noche de pijamas con Álvaro y Susana; otro, inconfesable, un striptease de Juan Carlos; y un tercero, el de verdad, el famoso tinte para el pelo, un tinte que, por cierto, de poco le va a servir si Igor cumple su amenaza de robarle el maquillaje para vengar a Argi. En cualquier caso, tres deseos deberían tener una contraprestación importante, pero ya veremos que ocurre.

Volviendo a la casa, la noche del lunes comenzaba con el descubrimiento de que no había gala, un descubrimiento que se tomaron bastante bien: “somos el primer Gran Hermano que hemos estado en todos los días”, afirmaba Igor; “Ya no saben donde ponernos”, respondía Álvaro (recordar que son estos dos concursantes los últimos en entrar en la casa, y, por tanto, los que mejor saben lo mal que van las audiencias del programa). La noche dejaba una interesante confesión de Igor: “lo único que no me gustó de mi vídeo de presentación es que me escribieron todas las frases que yo decía”.

La mañana comenzaba con un despiste, o un grifo que no gotea bien. Raki, la monje, esperaba que su rudimentario reloj de agua le avisase de cuando tocar las campanas, pero el grifo goteó de forma diferente y la chica estuvo convencida durante un largo rato de que eran las siete y media de la mañana cuando realmente eran más de las diez. Seguro que este olvido tendrá consecuencias hoy mismo...

Más cosas. La fiesta de pijamas no sentó nada bien a los concursantes. Igor, Kristian, y Raki se mostraban muy enfadados de que Desi no les hubiese escogido para irse al apartamento. Especialmente enfadado estaba Igor, que no entendía por qué se cumple el deseo de la sevillana en lugar del suyo (desde fuera podemos intuir que la razón es que el vasco se va a quedar el jueves, por lo que habrá más tiempo para cumplirlo). Kristian, por su parte, se mostraba muy enfadado porque la visita al apartamento suponía la ausencia de fiesta, aunque Igor remarcaba: “y de alcohol”. En cualquier caso, las consecuencias no se hicieron esperar: Raki, Kristian, y en algún momento, Nacho, estuvieron rajando de Desi durante un buen rato, por lo que todo apunta a que la de Sevilla podría ser la nueva pieza de caza si Kristian se salva mañana de la expulsión.