12
Sep
2020
El Hospital de Emergencias de Valdebebas costará casi 52 millones de euros Imprimir
Otras Noticias - Comunidad de Madrid
Compartir en MenéameCompartir en TuentiCompartir en Buzz it!Compartir en FacebookCompartir en Twitter

Foto cedida por CAMLas obras alcanzan el 35% de ejecución

Las obras de construcción del nuevo Hospital de Emergencias de la Comunidad de Madrid están siendo seis veces más rápida que trabajos de similares dimensiones y su ejecución alcanza ya un 35%. El Consejo de Gobierno ha sido informado de la tramitación con carácter de emergencia, como consecuencia de la situación creada por el coronavirus, de la construcción del centro sanitario en Valdebebas por un importe de 51.706.443,76 euros.

Este nuevo hospital llevará el nombre de Enfermera Isabel Zendal, reconocida por la Organización Mundial de la Salud como la primera profesional de esta especialidad sanitaria en misión internacional de la historia que viajó en la expedición Balmis de vacunación de la viruela. Según la Gobierno autonómico, esta decisión se ha tomado “como reconocimiento al trabajo de enfermeras y matronas en el Año Internacional Nursing Now 2020”.

Gracias a su diseño funcional polivalente, versátil y sectorizable, esta nueva infraestructura, cuyos trabajos de construcción están siendo coordinados por la Dirección General de Infraestructuras Sanitarias, podrá adaptar sus instalaciones a usos posteriores distintos a la pandemia, dando cobertura a diferentes necesidades asistenciales del Servicio Madrileño de Salud.

El objetivo de este nuevo Hospital de Emergencias es seguir reforzando el sistema sanitario madrileño con un nuevo centro público que aporta más de 1.000 camas a la red de hospitales de la región. Además, estará dotado de las tecnologías sanitarias más avanzadas y preparado para ser un nuevo centro de referencia en materia de enfermedades contagiosas.

A diferencia de los hospitales provisionales levantados en Wuhan (China), donde se utilizaron módulos prefabricados tridimensionales, el Gobierno autonómico ha optado por grandes pabellones de 10.500 metros cuadrados polivalentes, versátiles y sectorizables, que podrán adaptarse a diferentes necesidades asistenciales en el futuro.

El éxito experimentado en el Hospital instalado por la Comunidad de Madrid en IFEMA, en el que se atendieron cerca de 4.000 pacientes, con pocos contagios registrados entre los profesionales sanitarios, se ha convertido en un referente nacional e internacional en el abordaje del COVID-19, por lo que se hace recomendable seguir el mismo modelo para la construcción del nuevo Hospital de Emergencias.

Para ser capaz de atender cualquier tipo de crisis sanitaria en el futuro, el hospital será polivalente, basado en pabellones sectorizables desde el punto de vista de instalaciones y modulación (para habilitar únicamente la parte necesaria), y con posibilidad de adaptarse a cualquier plan funcional diseñado por las direcciones asistenciales.

Además, este centro podrá utilizarse como hospital de apoyo durante las campañas de la gripe estacional, así como para dar cobertura asistencial a otros hospitales que se encuentren inmersos en reformas integrales. En definitiva, se trata de una infraestructura que se podrá adaptar ante cualquier situación de aumento de demanda sanitaria.

La construcción del nuevo Hospital de Emergencias fue declarada “de extraordinaria urgencia y de excepcional interés público” por el Consejo de Gobierno. Para cumplir con el calendario previsto, se ha optado por el modelo fast-track, mediante el cual las obras se van ejecutando al mismo tiempo que los arquitectos redactan el proyecto. Esto requiere una exigente coordinación y ha permitido mejorar el proyecto inicial añadiendo instalaciones y servicios sanitarios adicionales.

La superficie total del nuevo Hospital de Emergencias Enfermera Isabel Zendal alcanzará los 80.000 metros cuadrados. Constará de 3 grandes pabellones de hospitalización de 10.500 metros cuadrados cada uno, con accesos y circulaciones diferenciadas y dos alturas de salas polivalentes y servicios sanitarios tales como áreas de diagnóstico por imagen (salas convencionales y portátiles de rayos X, un equipo de TAC, una reserva de ecógrafos, etc.), despachos de dirección médica y de enfermería con vistas a las unidades de hospitalización, habitaciones de guardia y áreas de trabajo para profesionales y laboratorio.

Los pabellones sumarán más de 1.000 camas, organizadas modularmente en torno a controles de enfermería de 48 camas. El pabellón central dispondrá de un área de admisión y triaje, así como de un total de 48 puestos de UCI y Cuidados Intermedios.

El Centro Logístico, de casi 8.000 metros cuadrados, funcionará como almacén central del Servicio Madrileño de Salud y alcanzará los 12 metros de altura para su máximo aprovechamiento mediante robotización. Bajo rasante, se están construyendo las centrales de instalaciones y suministros, con acometidas eléctricas, centro de transformación, central térmica, central de gases medicinales, acometida de agua, sistema de protección contra incendios y distribución e instalaciones de comunicaciones. Todo ello gobernado por un completo sistema de control de instalaciones que las gestionará de forma automática.

El complejo hospitalario se articula a través de una avenida peatonal, que finaliza en una gran plaza ajardinada presidida por un monumento dedicado a los profesionales sanitarios. Además, contará con un edificio de usos múltiples, de 7.100 metros cuadrados que incluirá, entre otros, un Centro de Coordinación de Urgencias del SUMMA112 y el Centro de Coordinación de Crisis Sanitarias.

El Hospital de Emergencias Enfermera Isabel Zendal será un centro de referencia en investigación, formación, desarrollo y centro de simulación de nuevas soluciones terapéuticas para ésta o futuras pandemias.

El nuevo hospital, a diferencia del Hospital de IFEMA, tendrá salas polivalentes de curas, que podrán habilitarse como quirófanos, zonas de CMA (cirugía mayor ambulatoria) o sencillas salas de curas, para poder practicar intervenciones menos complejas.

También es esencial para evitar contagios diferenciar las circulaciones entre pacientes y profesionales, entre circuito de limpio y de sucio, entre altas e ingresos y entre logística/aprovisionamiento y pacientes. Además, se habilitará un sistema de compuertas para el acceso controlado de personas a determinadas zonas de seguridad por riesgo de contagio o exposición a carga vírica.

La Comunidad de Madrid ha sido informada en su reunión de Consejo de Gobierno de la tramitación por la vía de emergencia de un contrato de 16.497.193 euros para la compra de material de protección individual destinado a todos los centros sanitarios dependientes del Servicio Madrileño de Salud (SERMAS) con un plazo de ejecución de un mes.

El Gobierno regional ha aprobado, además, una inversión de 3.619.142,87 euros en material sanitario, de protección y limpieza para el Hospital temporal que se instaló en IFEMA al inicio de la pandemia, y para material destinado a los centros del SERMAS. El Consejo de Gobierno ha sido informado hoy de adquisición de este suministro, tramitado también con carácter de emergencia, como consecuencia de la situación creada por el COVID-19.

El Hospital de IFEMA, instalado para pacientes con coronavirus, estuvo funcionando entre los meses de marzo y mayo y ha llegado a contar con 1.300 camas de hospitalización. Además, dispuso de 96 puestos de UCI en las instalaciones, en las que trabajaron 1.000 profesionales sanitarios en dos de los pabellones, los 7 y 9. Cerca de 4.000 pacientes ingresaron en el centro durante su puesta en marcha.

Por otro lado, el Consejo de Gobierno ha sido informado del contrato de trasporte desde el Aeropuerto Madrid Barajas-Adolfo Suárez hasta este hospital. En concreto, este servicio supuso un coste de 133.826 euros entre los meses de mayo y julio de este año y comprendía el traslado de productos sanitarios y distinto equipamiento requerido para el buen funcionamiento del hospital sanitario temporal.

El Consejo de Gobierno ha conocido también la adquisición de distinto material para el Hospital Universitario Puerta de Hierro-Majadahonda, que tramitó en el mes de mayo distintos contratos para hacer frente a las necesidades generadas por la pandemia, como respiradores no invasivos e invasivos, una mesa de anestesia y monitores de respiradores.

La tramitación por el procedimiento de emergencia permitió al Hospital Puerta de Hierro reaccionar de forma rápida y adoptar medidas urgentes para atender a las necesidades derivadas de esta crisis, adquiriendo este equipamiento, fundamental para la lucha contra el COVID-19 dentro del centro, tras la autorización de la Dirección General de Infraestructuras Sanitarias de la Consejería de Sanidad. A todos los contratos de las entidades del sector público para atender las necesidades derivadas de la protección de las personas y otras medidas adoptadas para hacer frente al COVID-19 les resulta de aplicación la tramitación de emergencia.

La Comunidad de Madrid contará con un Plan de Actuación de Protección Civil ante Pandemias con el que pretende reforzar la acción de la autoridad sanitaria y activar las necesidades sociales derivadas de crisis como la del COVID-19.

Con el diseño de este Plan regional, sobre el que el Consejo de Gobierno ha sido informado por parte del consejero de Justicia, Interior y Víctimas, Enrique López, el Ejecutivo que dirige Isabel Díaz Ayuso pretende automatizar una respuesta rápida y coordinada ante escenarios provocados por pandemias, movilizando los medios y medidas que mejor se adapten a cada momento de la emergencia.

El Consejo de Gobierno ha conocido el proyecto, que será presentado en la próxima Comisión de Protección Civil de la Comunidad de Madrid, y que, de momento, podrá activarse bajo el paraguas del Plan Territorial de Protección Civil de la Comunidad de Madrid.

El Plan jerarquiza y coordina la acción de los distintos departamentos y efectivos que intervendrán en emergencias provocadas por crisis pandémicas, estableciendo una organización clara y unos procedimientos de actuación de los medios y recursos de la Comunidad de Madrid vinculados a la protección civil.

Se articula así una red operativa de apoyo, siempre al servicio de autoridad sanitaria, que tiene como objetivo dar respuesta a sus demandas y hacer frente a las carencias sistémicas generadas por la crisis.

La aplicación de este Plan se estructura en dos niveles: alerta y emergencia que se activarán por el Director del Plan notificándose a la autoridad sanitaria y a todos los organismos y administraciones que corresponda.

El nivel de Alerta se pone en marcha ante una situación o información de la que podría derivar, con una elevada probabilidad, una emergencia sanitaria por pandemia o un incremento en la gravedad de los casos.

Por su parte, el nivel de Emergencia se determina al materializarse dicha pandemia, siempre que, siguiendo el criterio de la autoridad sanitaria, la enfermedad registre síntomas de gravedad y afecte de forma significativa a la actividad habitual de la población.

La estructura del Plan complementa las medidas y directrices de prevención, protección e intervención que se establezcan en cada momento, poniendo al servicio de la autoridad sanitaria los recursos humanos y materiales disponibles.

La dirección estratégica de los medios y las actuaciones de apoyo en el marco de este Plan de Actuación se organizará a través de un Director del Plan, que dirige el Centro de Coordinación en el que se integran un Director de Operaciones, un Comité Asesor y un Gabinete de información.

El Comité Asesor estará integrado, entre otros, por los responsables de las consejerías del Ejecutivo regional con competencias en Protección Civil; Transportes e Infraestructuras; Sanidad y Servicios Sociales, así como la Delegación del Gobierno, Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado; representantes de municipios afectados y expertos, técnicos y funcionarios que se estimen necesarios.

El Centro de Coordinación clasificará y procesará la información recibida a tiempo real en relación con la pandemia, su evolución, operaciones en marcha y demás circunstancias, actuando a través de cuatro Grupos de Acción (Intervención, Seguridad, Apoyo al ámbito sanitario y Apoyo logístico).

Estos equipos actuarán sobre el terreno, a través de efectivos profesionales y cuerpos como el de los Bomberos regionales, Agentes Forestales, agrupaciones de Protección Civil; Guardia Civil; Policías Locales y Cruz Roja, entre otros.

El Ministerio de Industria, Comercio y Turismo ha seleccionado de manera provisional 48 proyectos en la convocatoria del Plan de ayudas COVID dirigido a entidades que han realizado inversiones para la fabricación de productos higiénico-sanitarios, equipos de protección personal y aquellos dispositivos que sean considerados de emergencia para hacer frente a la pandemia.

Quedan en lista de espera otros 27 proyectos más. El Plan supondrá una movilización de inversiones por valor de 20 millones de euros durante el ejercicio 2020, a partir de una subvención de 10,7 millones de euros, lo que supone una ejecución del presupuesto de 97,3%.

Para la ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto, "el éxito de esta convocatoria permitirá disponer de suficiente material médico y equipos de protección individual (EPI) para abastecer al sistema nacional de salud y al conjunto de la población, aumentar la capacidad exportadora y la generación de empleo y estar mejor preparados para hacer frente a la pandemia. Sin duda, la colaboración público-privada ha respondido al desafío que teníamos: proteger la salud de la población y salvar vidas."

Por tipo de proyectos, 22 se refieren a nuevas instalaciones para la fabricación de este tipo de productos. Hay 17 iniciativas relacionadas con el aumento o expansión de la producción de empresas que actualmente fabrican dichos productos. Y 9 proyectos se refieren a empresas industriales que convierten sus líneas de producción actualmente utilizadas en la fabricación de otros productos, para la producción de productos relacionados con la emergencia de la crisis sanitaria.

En cuanto a productos fabricados, hay 24 proyectos relacionados con la elaboración de mascarillas (quirúrgicas, FFP2 y FFP3), 15 proyectos para fabricar soluciones hidroalcohólicas y sus materias primas, 5 que tienen que ver con batas desechables e impermeables, y 4 iniciativas para producir PCR. El resto de proyectos propuestos para subvención están relacionados con otros tipos de elementos y equipos de protección. La Comunitat Valenciana encabeza la lista de proyectos, con doce, seguida de Catalunya, con ocho, y Andalucía con siete. La Comunidad de Madrid sólo tiene uno de los 48 seleccionados.