10
Dic
2023
La Universidad de Alcalá rompe el contrato con la empresa que gestionaba sus espacios deportivos Imprimir
Zona Este - Sociedad Alcalá
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Foto cedida por CCOO Madrid

CCOO denuncia que los trabajadores se han quedado en la calle

La Universidad de Alcalá (UAH) ha mentido y abandonado a las personas trabajadoras encargadas de las actividades deportivas del centro deportivo de la institución académica, un servicio que esta tenía privatizado y contratado con Ilitia Mediterránea SL desde principios de enero de este año.

Tras un año cargado de irregularidades, con vulneración de derechos consolidados, retrasos de meses en el pago de las nóminas y una sentencia que condenó a Ilitia Mediterránea a readmitir a la delegada de personal de CCOO tras ser despedida por presentar un conflicto colectivo, la UAH decidió rescindir el contrato con esta empresa.

En el ínterin, la gerencia de la Universidad de Alcalá se comprometió con la plantilla de monitoras y monitores deportivos a contratarlos y mantener así los puestos de trabajo hasta que la resolución de la nueva licitación, compromiso que ha incumplido dejando a las trabajadoras y los trabajadores en la calle.

Cabe recordar que la plantilla responsable de las actividades deportivas de la UAH, ya había sido subrogada al completo a Ilitia Mediterránea SL, con todos los derechos adquiridos.

Desde el Sector de Medios de Comunicación, Artes, Cultura, Ocio y Deporte de la FSC-CCOO de Madrid, lamentamos que una institución pública, como es la Universidad alcalaína, tenga privatizada la gestión de sus instalaciones deportivas y adjudique la misma a una empresa incumplidora, que ha pagado mal y tarde a monitoras y monitores y ha vulnerado los derechos laborales adquiridos y consolidados.

Denunciamos, además, que la Institución académica haya dejado en la estacada y sin empleo a estas personas trabajadoras, una práctica inapropiada e inaceptable en un centro universitario, cuya misión debería ser, no solo garantizar una educación superior de calidad e igualitaria para su alumnado, sino promover y mantener trabajos estables, dignos y decentes. Es una vergüenza que una universidad como la de Alcalá permita tener entre sus muros a empresas que precarizan y empobrecen a las personas trabajadoras.