Los afectados por los EREs de ambas empresas han decidido aunar esfuerzos
Ayer las calles de Alcalá eran el escenario en el que se escenificaba la protesta de la localidad por la situación de los trabajadores de FIESTA y TEKA, dos históricas fábricas complutenses en una situación delicada.
A la marcha, que congregó a más de mil personas, se sumaron distintas personalidades políticas, como representantes de los cinco partidos con representación municipal, o los líderes de CCOO y UGT en el Corredor, todos unidos por la defensa de los puestos de trabajo de los empleados.
La manifestación, que comenzaba a las once de la mañana en la gasolinera situada junto a la Puerta de Madrid, para cruzar la Plaza de las 25 Villas, Avenida Complutense, la calle del Tinte y llegar a la Plaza de Cervantes, donde se realizó una performance reivindicativa.
|